Petróleo cae 19% en pesos para Ancap: ¿le da para mantener las las tarifas?

Todo indica que el gasoil quedará sin cambios, pero es más complicado para la nafta. Arabia Saudita desató una guerra de precios en medio del coronavirus y tumbó el mercado

Tiempo de lectura: -'

10 de marzo de 2020 a las 05:04

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 3 45 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 3 45 / mes

En el Poder Ejecutivo están afinando los números por estas horas para ver qué margen tiene para no modificar los precios de los combustibles al público. Aunque el saldo debacle de los mercados financieros y la propagación del coronavirus claramente es negativo para Uruguay por la fuerte dependencia que tiene del exterior, en el corto plazo el gobierno puede tener un aliado para definir las tarifas de los combustibles.

Los futuros del crudo se desplomaron 24% (US$ 11) este lunes, a US$ 34,3 por barril, luego que uno de los mayores productores a nivel mundial (Arabia Saudita) decidiera liberar su producción en medio de la debacle y la incertidumbre que gira sobre las consecuencias del coronavirus. Así, el mercado petrolero tuvo su mayor derrumbe diario desde la Guerra del Golfo en 1991.

La última referencia que hizo pública Ancap para sus tarifas en enero del año pasado fue con un crudo Brent a US$ 54,5 y un dólar promedio a $ 33,60 para 2019. Ello arrojaba un valor (teórico) en pesos de importación de $ 1.831 por barril para ese tipo de crudo. 

Catorce meses después la realidad para la dos variables de más peso para la paramétrica de costos de Ancap cambió drásticamente, pero con tendencias contrapuestas. Mientras que el petróleo cerró este lunes en los mercados internacionales un 37% por debajo del valor de referencia para el ente, la cotización del dólar interbancario trepó a $ 42,30 en promedio (+28,5%). Así, el barril de crudo en pesos cotizaba para Ancap este lunes a $ 1.482, esto es un 19% por debajo de su paramétrica vigente. 

El 70% de la paramétrica de costos del ente petrolero depende del dólar y el petróleo, pero no pesan por igual. Por ejemplo, una aumento de US$ 1 del barril Brent tiene un impacto negativo para el ente de unos US$ 16 millones, mientras que una suba del tipo de cambio en $ 1 le afecta en US$ 26 millones. La refinería de La Teja procesa anualmente unos 16 millones de barriles por año. 

“Hoy hay crudo en stock más caro para Ancap y el dólar está por las nubes. Está difícil zafar de un ajuste más allá de lo que pueda durar esta guerra de precios”, dijo una fuente del ente petrolero a El Observador. 

El secretario de la Presidencia Álvaro Delgado explicó el viernes que se postergaba la revisión de las tarifas públicas para este miércoles a la espera de cómo evoluciona el costo del petróleo, ya que la tendencia de la semana pasada era claramente bajista y no se quería ser “injustos” fijando una precio que no contemplara esa nueva realidad del mercado.

Sin embargo, este lunes la ministra de Economía Azucena Arbeleche dijo en rueda de prensa que si la volatilidad de los mercados se mantenía, quizás el Ejecutivo pueda seguir postergando su definición sobre el ajuste tarifario previsto para 2020. "Si la situación ameritara que esperemos un poco más, lo haremos", sostuvo. 

Delgado indicó que el ente petrolero contaba con una licitación para la compra de crudo y que estaba definiendo si podía asegurarse de crudo para un trimestre o un semestre. Está previsto que la ministra de Economía y el director de la OPP Isaac Alfie hagan público un anuncio de medidas económicas este miércoles, que irá más allá de las tarifas, según Delgado. 

Ajuste de costos e Imesi

Además de considerar la evolución y proyección de las principales variables de mayor peso en Ancap para su funcionamiento hay otros dos aspectos que juegan a la hora de fijar los precios de los combustibles que las autoridades del equipo económico están calibrando por estas horas. En primer lugar, los costos nominales para el ente subirán este 2020, por ejemplo, por el incremento de salarios de sus más de 2 mil trabajadores de 8,8% que ya está vigente desde enero. A esto hay que sumarle los ajustes de insumos y servicios contratados que el ente petrolero tendrá este año. 

La otra variable no menor que deberá atender Ancap es que en los lineamientos para definir las tarifas que envió el director de OPP la pasada semana comunicó una suba del Impuesto Específico Interno (Imesi) a los combustibles (naftas) del 11,75%, que fue la inflación acumulada de los últimos 14 meses.

Actualmente, por cada litro de nafta Súper 95 que hoy cuesta $ 54,95 en el surtidor, se abonan $ 23,5 por concepto de Imesi que recauda el Estado, lo que equivale al 42,8% de su precio de venta al público. Con una suba de 11,75%, el Imesi sobre la nafta Súper se elevaría a $ 26,2 por litro. Es decir, el aumento es de casi $ 2,7 por litro. El gasoil está exento de Imesi (paga IVA), por lo que sus chances de que las tarifas queden sin cambios son claramente mayores que para las gasolinas. Además, el Poder Ejecutivo pretende tener algún tipo de gesto con el sector productivo para no subir este insumo en plena zafra de arroz y soja, con el agregado de la emergencia agropecuaria que debió declarar este lunes para cinco departamentos por la sequía. 

Ancap cerró su ejercicio 2019 con una ganancia de US$ 39 millones, una cifra que prácticamente equivale a la compra mensual de un embarque de crudo que cada 20 días descarga en su boya de José Ignacio. 

Arabia Saudita y una guerra declarada 

Los titanes petroleros de Rusia y Arabia Saudita han acumulado grandes amortiguadores financieros que los ayudarán a capear una larga guerra de precios. Es una batalla de nervios, ¿quién parpadeará primero?

Los precios mundiales del petróleo cayeron un tercio después de que Riad descontó el precio de su crudo y dijo que aumentará la producción. Las acciones de los gigantes petroleros nacionales Saudi Aramco y Rosneft se derrumbaron.

Los dos principales exportadores petroleros mundiales tienen fondos de reserva de unos US$ 500.000 millones para resistir los impactos económicos y están haciendo ruidos alcistas sobre su resistencia mientras se cuadran. Moscú aseguró este lunes que podría soportar precios de US$ 25-30 por barril durante 6-10 años. Riad, por su parte, puede permitirse un crudo a US$ 30 dólares, pero tendría que vender más volumen para suavizar el impacto de sus ingresos, según fuentes.

Sin embargo, una guerra de desgaste sería perjudicial y obligaría a ambos países a hacer ajustes difíciles en sus economías cuanto más tiempo se prolongue.

"Como con cualquier guerra, esto se reduce a cuánto dolor puede absorber cada parte", dijo Hasnain Malik, de Tellimer.

Abren los grifos 

En Arabia Saudita, el príncipe heredero Mohammed bin Salman dio luz verde para que el reino -el principal exportador mundial de petróleo- bombee a voluntad después de que Rusia rechazó una propuesta de la OPEP de recortes más profundos para hacer frente al brote de coronavirus.

El punto de equilibrio fiscal de Arabia Saudita -el precio del petróleo al que se equilibraría su presupuesto- es de unos US$ 80 por barril, el doble que el de Rusia, dijo Malik.

Arabia Saudita disfruta de reservas extranjeras de US$ 500.000 millones y una baja relación deuda-PIB del 25%, que le da un amplio margen para endeudarse.

Riad ha recaudado más de US$ 100.000 millones en deuda en divisas desde 2016, para compensar el impacto de los precios más bajos del petróleo.

Los bonos internacionales emitidos por el gobierno y su gigante petrolero Aramco se desplomaron en las primeras operaciones del lunes, y el riyal saudí cayó bruscamente frente al dólar en el mercado de forwards.

Aún así, las bajas tasas de interés mundiales y un reciente recorte adicional de la Reserva Federal implica que, a pesar de la volatilidad del mercado, los prestatarios podrían recurrir a los inversores de deuda de manera relativamente barata.

El problema para Riad es que los bajos precios sostenidos del petróleo limitarán probablemente el gasto del gobierno en proyectos que son parte del impulso del príncipe heredero para diversificar la economía.

Monica Malik, economista jefe del Banco Comercial de Abu Dabi, dijo que con los precios del petróleo cerca de los US$ 30, Arabia Saudita registraría un déficit de dos dígitos como porcentaje del PIB de este año, por encima de la proyección del déficit presupuestario de 6,4% de Riad.

Cofre del Tesoro

Bajo la presidencia de Vladimir Putin, Rusia ha acumulado reservas de US$ 570.000 millones y el rublo ha entrado en libre flotación, lo que le permite ajustarse rápidamente a las condiciones del mercado y devaluarse.
Según los analistas, Rusia está mucho mejor posicionada para resistir un impacto económico que en 2014, cuando Occidente le impuso sanciones por la anexión de la región ucraniana de Crimea, o 2008, cuando fue golpeada por la crisis financiera mundial.
"Muchas personas nos criticaron, dijeron que es como un cofre del tesoro, que el Ministerio de Finanzas está sentado en oro", dijo el ministro de Finanzas, Anton Siluanov, la semana pasada sobre las reservas.
"Pero ahora la situación podría cambiar y financiaremos todos los gastos que hemos emprendido y que estamos obligados a hacer con este cofre del tesoro", declaró.
Las reservas de US$ 570.000 millones incluyen el Fondo Nacional de Riqueza del país, que asciende a US$ 150.100 millones, o el 9,2% del PIB ruso. El Ministerio de Finanzas dijo este lunes que el fondo podría usarse para compensar los menores ingresos petroleros si fuera necesario. Mientras tanto, el banco central dijo que suspenderá las compras de moneda extranjera durante 30 días, en un intento de aliviar la presión a la baja sobre el rublo, y que tomará en cuenta las condiciones del mercado para decidir si sigue adelante con las futuras subastas de bonos OFZ en rublos del gobierno.
Aún así, el rublo cayó a su nivel más débil desde principios de 2016 en el mercado interbancario y las acciones de las compañías rusas se hundieron en Londres, con los gigantes del petróleo Rosneft y Lukoil cayendo un 20,4% y un 18,5%, respectivamente .
Oleg Vyugin, jefe del Consejo de Supervisión de la Bolsa de Moscú, dijo que Rusia enfrentará una inflación y tasas de interés más altas como resultado de la guerra de precios.
Chris Weafer, director de la consultora Macro-Advisory, dijo que aún es posible que Moscú pueda decidir volver a cooperar con la OPEP en el otoño boreal si los precios siguen siendo muy bajos. "Putin será reacio a agotar las reservas financieras demasiado para financiar un déficit en expansión", agregó. (Con Reuters)
CONTENIDO EXCLUSIVO Member

Esta nota es exclusiva para suscriptores.

Accedé ahora y sin límites a toda la información.

¿Ya sos suscriptor?
iniciá sesión aquí

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Accedé ahora y sin límites a toda la información.

Registrate gratis y seguí navegando.