El proceso Tabárez sigue dando frutos

Desde que Óscar Tabárez retomó la conducción de la selección uruguaya en 2006 comenzó un proceso de refundación de las estructuras de las selecciones nacionales y además de dirigir a la mayor comenzó a coordinar y supervisar los trabajos de las juveniles.

Ese trabajo va mucho más allá de la cancha y se proyecta hacia la formación integral de los juveniles y a la vez que forma personas también moldea generaciones de recambio para el combinado mayor.

Los resultados del proceso Tabárez están a la vista tanto en la mayor como en las juveniles.

Desde 2007, Uruguay no quedó nunca afuera del Mundial y se clasificó ahora por sexta vez consecutiva ampliando la mejor marca de su historia.

Los sudamericanos sub 20 se juegan desde 1954 pero recién desde 1977 son clasificatorios para los mundiales.

En 1977, 1979 y 1981 Uruguay logró un histórico tetracampeonato (había sido campeón en 1975) y sumado a su segundo puesto de 1983 abrochó cuatro clasificaciones seguidas.

Después quedó eliminado en 1985, 1987, 1988, 1995, 2001, 2003 (como local) y 2005 clasificándose solo en 1991, 1992, 1997 y 1999.

Los tiempos cambiaron. Mejor dicho, Tabárez cambió los tiempos y ahora desde 2007 Uruguay no falta a los Mundiales en sub 20 y el sábado a la noche además se coronó campeón luego de 36 años.

El récord de clasificaciones seguidas lo tiene Brasil con 16, desde 1977 hasta que quedó eliminado en 2013.

La segunda mejor marca pertenece a Argentina desde 1995 hasta quedar afuera del torneo de 2009.

La tercera marca es la actual de Uruguay. Y la razón es muy sencilla: el proceso Tabárez.