Éxodo ejecutivo para teletrabajar en Punta del Este

El teletrabajo y la cuarentena impulsaron un fenómeno que ya se venía dando en el balneario

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14 de junio de 2020 a las 05:00

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Punta del Este dejó de ser un balneario desolado en baja temporada –desde hace algún tiempo– para convertirse en una ciudad donde uruguayos y extranjeros eligen vivir. En tanto, la emergencia sanitaria dio un pequeño empujón para que muchos empresarios locales se decidieran por la ciudad fernandina. Locales y boliches abiertos y restaurantes colmados son algunas de las nuevas características del balneario que de a poco se va convirtiendo en sitio de residencia.

Si bien las autoridades departamentales no han podido medir cuántas personas más viven en la ciudad en el último tiempo, el alcalde de Punta del Este, Andrés Jafif, es consciente de que aumentó. “Mucha gente vino a pasar la pandemia y se quedó”, agregó.

Además, Jafif sostuvo que empresarios se contactaron con él cuando empezó la emergencia sanitaria en busca de la disponibilidad de alquiler durante el invierno. “Mucha gente combinó eso de la vida tranquila con el trabajo remoto. Este creo que fue el punto de inflexión”, dijo.

Pero este fenómeno no es solo coyuntural. Y según el alcalde, en la medida en que la gente fue eligiendo Punta del Este como lugar de residencia, los servicios acompañaron el cambio y mejoraron su calidad. Puso como ejemplo que muchos locales de comida ya no abren solo en temporada porque se dieron cuenta de que durante el invierno también pueden generar ganancias. “Hoy en día gastar para abrir solo por tres meses dejó de ser el único negocio”, subrayó Jafif.

Sin embargo, la pandemia golpeó al rubro de servicios e hizo que buena parte de las empresas decidieran cerrar hasta que la situación se acomodara. Según el alcalde, esto se notó los primeros meses y recientemente –en la medida en que disminuyen los casos de covid-19 en Uruguay– han retomado la actividad.

El jerarca contó que la mayoría de los comercios que venden alimentos o productos de primera necesidad se adaptaron rápidamente a la modalidad de delivery. “Esto se mezcla con una vida tranquila y natural, algo que las personas buscaron en medio de tanta incertidumbre”, afirmó.

El otro punto que destacó es la distancia que separa a Punta del Este de Montevideo. Si bien muchos empresarios teletrabajan, algunos deben viajar por lo menos una vez por semana a la capital.

“Creo que hoy en día estamos en un excelente momento y eso se ha visto traducido tanto en el aumento de población como de movimiento”, dijo Jafif.

El aumento de residentes significa un desafío para las autoridades porque uno de los puntos clave es incentivar el cuidado de los espacios verdes. Si bien Jafif reconoció que los habitantes son muy respetuosos de esos sitios, informó que tuvieron que intensificar las jornadas de mantenimiento y limpieza durante el año. “Al tener más gente, no podemos bajar mucho la frecuencia de trabajo respecto a la que se da en verano”, apuntó.

Por otro lado, el alcalde considera que los servicios de salud en el departamento tienen un gran nivel y está a la par de los seguros privados de primer nivel.

Sí reconoció en este punto que hace falta aumentar los servicios para los extranjeros, porque muchos se quedan sin cobertura de salud cuando llegan al balneario. “Pero creo que la ciudad y el departamento en sí son totalmente independientes, donde hay de todo y de una calidad excelente”, sostuvo.

Otro de los puntos a mejorar es la oferta cultural. Según el alcalde, esto será un aprendizaje en la medida que la gente siga eligiendo Punta del Este, porque hace algunos años no era redituable incentivar este sector dado que el público terminaba siendo muy acotado.

Profesionalismo

Otro de los cambios que Jafif nota en la ciudad es la profesionalización gastronómica. Este es un sector bastante demandado en el balneario del este y ya no se da de que vayan “a improvisar”.

“Hoy en día se instalan restaurantes o boliches con una calidad increíble y eso también provoca la necesidad de quedarse todo el año”, estimó. Agregó que se da una mezcla entre los más clásicos de la ciudad y los que recién están empezando o prevén desembarcar con “un aire más fresco”.

El sector inmobiliario notó el cambio

Si bien muchos residentes ya eran propietarios, y ese gusto por el balneario se fue forjando verano tras verano, uno de los rubros que notó la llegada de más personas fue el inmobiliario.

El operador inmobiliario y presidente de la Cámara Inmobiliaria de Punta del Este-Maldonado, Javier Sena, afirmó que cada vez hay más consultas en busca de alquilar o comprar. “Este tipo de contactos tienen algo en común: la gente que llama busca lugares que sean aptos para vivir y no solo para un par de meses”, detalló.

Otro de los fenómenos en ascenso es que las personas llegan a Punta del Este para quedarse más tiempo del previsto. 

Por eso, luego de cada temporada el sector inmobiliario suele tener actividad para buscar hogares que se adapten a las necesidades de esos clientes.

Sena indicó que los uruguayos que llegan al balneario suelen tener propiedades y por eso las consultas locales no son tan frecuentes. No obstante, durante la pandemia captaron a muchos montevideanos que alquilaron durante dos meses para teletrabajar.

“El teletrabajo fue clave en esto. Creo que nos viene ayudando mucho”, dijo.

Francisco Bistiancic, agente inmobiliario y propietario de Bistiancic Propiedades, agregó que la situación sanitaria confirmó una tendencia que se había dado en 2019. “El año pasado, las consultas se incrementaron y a partir del 16 de marzo muchos confirmaron sobre la hora”, especificó.

Para Bistiancic, cuando el coronavirus deje de ser un problema en Uruguay habrá dos caminos posibles: quienes se queden a vivir en Punta del Este y los que vuelvan a su ciudad. “Aún eso resta por definirse y no creo que pase en el corto plazo, porque la incertidumbre es grande”, sostuvo.

El sector inmobiliario espera poder recibir un buen número de argentinos una vez que las fronteras se abran.

Según Sena, en este punto se puede dar un aumento de compra de propiedades. “Aspiramos a que las medidas que está tomando el gobierno ayuden a que lleguen más extranjeros a residir en Punta del Este”, afirmó Sena.

Según él, la ciudad todavía tiene “capacidad ociosa” desde el punto de vista de la oferta inmobiliaria. “Claramente el movimiento es significativo, pero falta mucho para que veamos el mercado saturado”, explicó.

Bistiancic, por su parte, afirmó que un rubro que dejó su rastro y ha hecho que Punta del Este sea elegida es el de la educación. Sostuvo que el hecho de que hayan colegios de calidad suma para que más personas decidan instalarse y hacer una vida “casi como que en Montevideo”.

“Si venían hace 10 años, quizá era difícil estar tan alejado de Montevideo como hoy”, agregó.

En Bistiancic Propiedades han visto incrementado la cantidad de alquileres sobre todo en la zona donde se encuentran los colegios. “Esto te confirma que la gente se viene a vivir o a pasar un tiempo, porque si no optarían por otra zona”, dijo.

Más locales todo el año

Una de las transformaciones que venía registrando Punta del Este era el alquiler de locales comerciales todo el año. El operador inmobiliario y presidente de la Cámara Inmobiliaria de Punta del Este-Maldonado, Javier Sena, contó que son muy pocas las consultas que se hacen en busca de un contrato trimestral por el verano, sino que los empresarios deciden “emprender a largo plazo”.
Esto se vio afectado por la pandemia y algunas empresas decidieron cerrar este otoño y prevén reabrir en verano. “La depresión económica que causó el coronavirus hizo en algunos casos que se mandara gente a seguro de paro o se la despidiera”, reconoció Sena, pero agregó que los servicios siguen siendo de calidad.

¿Qué piensan algunos empresarios?

Federico Epis – Gerente de Ngena para América Latina

Mi caso tiene un tinte especial. Viví en Chile, trabajando para una multinacional: Cisco. En un momento decidimos venirnos, porque yo perfectamente podía mantener mi trabajo dado que teletrabajaba desde antes que la pandemia llegara. Optamos por Punta del Este porque tenía casa y no tenía ningún sentido irnos a vivir a Montevideo.

En lo que refiere a la soledad o a la tranquilidad, no tuve problema. Obviamente sentimos el cambio porque Punta del Este es una ciudad mucho más chica y tranquila que Santiago de Chile, pero nos adaptamos rápido. 

Considero que en materia de servicios está todo cubierto, pero en salud seguimos teniendo una faltante y una gran dependencia con Montevideo. Fundamentalmente, cuando hay que hacer algunos estudios médicos avanzados. La realidad es que los grandes seguros de medicina privada están en la capital del país. Todo esto se resume en que hay más gente viviendo. Y creo que hay un ejemplo bien gráfico: si hoy recorrés la rambla de la Brava notás muchos apartamentos iluminados de gente que está viviendo todo el año.

Michel Bomzstein – Asesor financiero

Siempre veníamos a Punta del Este y no nos daban ganas de volver a Montevideo. En ese entonces, entendíamos que era imposible vivir acá por la salud, la educación de los hijos. En un momento nos paramos analizar y vimos que podíamos.

Acá podés teletrabajar y hacerte un tiempo para llevar a tus hijos al colegio porque te queda todo a cinco minutos. En mi caso, no he tenido problemas de inseguridad y eso que me gustan los autos clásicos. Dejás el auto en cualquier lado y no suele pasar nada.

De las cosas negativas, la salud es donde más habría que trabajar. Le falta todavía para llegar al nivel que hay en Montevideo. Eso puede ser un problema o no, ya que la distancia que separa una ciudad de otra no es tanta. Claro que para la gente mayor y los extranjeros esto es una gran traba.

El otro punto es el teletrabajo. Mucha gente se está dando cuenta de que puede vivir en un lugar tranquilo y rendir de manera productiva. Esto también converge con una vida social activa. Al tener todo cerca hay una sociabilidad mucho más intensa que en Montevideo.

Gabriel Rozman – Presidente de la Cámara de Comercio Uruguay China y directivo de Zonamerica

Camilo dos Santos. Locación: hotel Aloft

El clic que me hizo venir a vivir acá fue poder combinar el teletrabajo con una vida tranquila y saludable. Tiene menos gente que Montevideo y tiene espacios abiertos que te permiten una vida sana. Camino o corro 10 kilómetros por día y eso en Montevideo no lo podía hacer porque el trabajo no me lo permitía. Pero acá sí, dado que es un lugar que tiene cerca todos los servicios y estás en menos de cinco minutos.

Trato de ir por lo menos una vez por semana a Montevideo, concentro todo lo que tengo para hacer y disfruto de almuerzos con amigos. El resto del trabajo lo hago de manera remota.

Si bien estamos en medio de una pandemia, los negocios en Punta del Este no dejan de funcionar. Es mucha la cantidad de lugares que están trabajando con la modalidad de delivery. Si a esto le sumamos que las distancias son cortas, el tiempo de espera que tenés es mucho menor que en Montevideo.

El servicio de salud es aceptable, no he tenido que utilizarlo mucho, pero en las mutualistas locales hay suficientes camas y personal médico.

Héctor Liberman – CEO de Walmer Interiorismo

Punta del Este me apasionó desde siempre. Es tranquilo para vivir y no perdés la calidad de vida. Esto del teletrabajo también ayudó a que nos diéramos cuenta de que esa calidad de vida se puede combinar con las responsabilidades.

Uno de los puntos claros de ventaja es la infraestructura. Es una ciudad que tiene construcciones muy buenas que permiten vivir bien. Esto es acompañado de servicios de calidad que están presentes todo el año.

En lo que a mí respecta, la salud no es algo que sea negativo. Esto y la educación fueron puntos que mejoraron a lo largo de estos años gracias a la cantidad de gente que se ha venido a vivir. Si bien Punta del Este venía teniendo residentes cada vez más frecuentes, en los últimos años esto creció de manera exponencial en poco tiempo. Muchos uruguayos y extranjeros se dieron cuenta de que no solo es un lugar paradisiaco en verano sino que mantiene esta misma condición todo el año. Eso de que es desoladora o que te aísla es un mito. Es todo lo contrario. Es un lugar con escala, lo que te permite una vida social más activa.

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