IMM cargó multas sin notificar al Sucive a pesar de arreglo nacional

Armando Castaingdebat, intendente de Flores y presidente del Congreso, indicó ayer a El Observador que se había resuelto con la Intendencia de Montevideo (IMM) que sólo se cargarían a través del Sucive las multas de tránsito por las que se haya realizado una notificación por escrito o se tenga documentación gráfica.

“Eso se lo planteé a José Luis Falero –intendente de San José e integrante de la Comisión del Sucive– porque habíamos quedado con Montevideo que únicamente se cobraban multas con notificación o con foto”, explicó Castaingdebat.

Sin embargo, propietarios de vehículos empadronados en Montevideo se enteraron, al pagar la patente, que mantenían deudas con la comuna por multas de tránsito sobre las que no habían recibido ninguna notificación oficial. Una contribuyente que contó su caso a El Observador se enteró que fue multada en marzo de 2013 por estacionar en doble fila en la puerta de su lugar de trabajo pero nunca le llegó la boleta. Al apelar la infracción, se le dijo que había sido una “observación verbal” efectuada por un inspector que circulaba en el camión guinche.

El Observador consultó a José Castro, director interino de Tránsito y Transporte de la Intendencia, quien dijo no estar en conocimiento del tema.

Arturo Echeverría, director de Recursos Financieros, en cambio, explicó que, en general, esta situación afecta a contribuyentes de los que no se tiene su dirección “porque deciden pagar la factura acá (por el Palacio Municipal) o le llega por débito de cuenta”.

La inexistencia de un comprobante de la multa también puede deberse a una falla en el correo o, inclusive, porque se dejó en el parabrisas de un auto –por ejemplo mal estacionado– pero que nunca fue recibida por el infractor.

“La mayoría de los conductores es parado cuando es multado. Los otros, los que no se enteraron porque pasaron una luz roja y los inspectores no llegaron a pararlos y se enteran después de la multa, en esos casos, si (en la boleta) está bien descrito el color, el coche, la hora, el modelo, y si pasan por ahí, ¿qué vas a decir? No tenés mucho para decir”, apuntó Echeverría.

Del total de multas impuestas por los inspectores, en menos de 1% se inicia el proceso de apelación. A partir del momento en que el conductor es notificado de su infracción, dispone de 10 días hábiles para presentar un escrito en el Servicio de Vigilancia. La Comisión Asesora de Apelaciones de multas dispone de 30 días para responder el petitorio, el cual es avalado en última instancia por la Dirección del Servicio de Vigilancia. Para el intendente de Flores ese es el procedimiento que debe primar.

Para aquellos que se enteran de la multa a través del Sucive, Echeverría exhortó a que regularicen su situación en la IMM, ya sea a través del pago, o de una apelación. El riesgo de no hacerlo es el pasaje del contribuyente al Clearing de Informes. “Más allá de un error, que estadísticamente es posible, son multas que corresponden”, señaló el jerarca.

El año pasado las intendencias se enfrentaron cuando Montevideo envió 30 mil cartas para cobrar multas cometidas por conductores de vehículos con chapa del interior al tiempo que algunos departamentos perdonaban las anteriores a 2012. En esa oportunidad, Echeverría recordó que la multa es una “penalización” y que el infractor “debe sentir el rigor de no cumplir con las normas de tránsito”.

Hasta el viernes pasado hubo 492.049 transacciones de pagos de patentes por un total de $ 2.214.254. En las redes de cobranza se concretaron más de 475.900 servicios; el pago en línea y el débito automático fue elegido por 14.209 y 1.876 contribuyentes, respectivamente.