Le dicen “fogata” y es por calentón. Pero entre su voz afónica se esconde una mesura particular. Días después de haberse reunido con el ministro de Salud designado, Daniel Salinas, el secretario general de la Federación Uruguaya de la Salud (FUS), Jorge Bermúdez, no habla enojado pero sus declaraciones manifiestan malestar. Al comunista le disgustó la satisfacción que mostraron los dos principales líderes del PIT-CNT, Fernando Pereira y Marcelo Abdala, luego de la “cordial reunión de verano” que mantuvieron con el gobierno electo unas semanas antes y busca diferenciarse.
“Las definiciones políticas no son remeras ni zapatos que se cambian de acuerdo a la estación”, dijo en entrevista con El Observador. Así, Bermúdez se aparta del escenario de buenas relaciones entre el PIT-CNT y las nuevas autoridades. Cree que las “reglas de juego” son distintas y que ahora “todo va a cambiar”. A continuación, un resumen del diálogo con el sindicalista.
Luego de la reunión entre el PIT-CNT y el gobierno electo, los principales líderes sindicales manifestaron que había sido una reunión "positiva". ¿Qué lectura hace de las declaraciones posteriores?
Que integrantes del secretariado tuvieran una reunión de buen tono con el (futuro) presidente de la República (Luis Lacalle Pou) y dieran una posición... es una posición. Está bien. Ahora, el conjunto del movimiento sindical debe valorar esta situación. Por tener una relación amistosa no hay que confundir la composición de clase de la coalición.
¿Crees que los líderes del movimiento sindical se están olvidando de esas características de la coalición?
No, yo no creo que nadie la olvide porque en la campaña que nosotros realizamos como movimiento sindical recorrimos el país diciéndole a los compañeros lo que la coalición trae para la negociación colectiva. Con los compañeros vamos a tener un intercambio cuando el PIT-CNT retome la actividad y debatiremos. Pero con toda claridad el PIT-CNT había señalado que había dos proyectos de país en disputa.
Y cree que en este último tiempo el PIT-CNT presentó una visión más favorable del gobierno electo que la que se presentaba antes de las elecciones.
No voy a negar que hay cosas que no hubiera dicho. En esto tengo que ser sincero. Yo no hubiera hecho algunas afirmaciones que luego pueden llevar a confusiones. Porque si uno afirma antes de la campaña electoral que quienes llegan al gobierno representan las clases dominantes, luego, porque tengas una reunión con el gobierno electo, no podés decir que, entre otras cosas, los Consejos de Salarios no corren riesgos. Para mí los Consejos de Salarios sí corren riesgo. El ministro de Trabajo designado, Pablo Mieres, confunde los descuelgues con negociaciones por zonas del país. Eso no tiene nada que ver. Algunos dicen que Mieres es socialdemócrata. Yo nunca vi a un socialdemócrata gobernando con un gobierno de derecha.
¿Cuáles son esas afirmaciones que pueden llevar a confusiones según su entender?
Señalar que nada va a cambiar. Yo creo que todo va a cambiar. Si yo le dijera a usted que nosotros no vemos un cambio en la actual regla de juego le estaría mintiendo o sería un tonto. Claro que hay un cambio en las actuales reglas de juego.
¿Y por qué cree que desde el movimiento sindical se está diciendo que nada va a cambiar en los Consejos de Salarios o que no corren riesgos?
No lo sé, no tengo ni idea. Eso lo conversaremos con los compañeros cuando llegue el momento. Lo que sí nosotros decimos, como Federación Uruguaya de la Salud, que creemos que el gobierno no está poniendo todas las cartas arriba de la mesa porque no quiere tener un enfrentamiento de entrada con el movimiento sindical que hoy es la principal fuerza organizada que lo puede enfrentar. Las definiciones políticas no son remeras ni zapatos que se cambian de acuerdo a la estación. Para la FUS no ha cambiado absolutamente nada.
Pero si es una jugada del gobierno, ¿por qué el movimiento sindical no lo declara como tal?
Cada uno tiene su estilo. Nuestro estilo va de la mano de la gravedad que nosotros vemos en el problema. Yo tengo la obligación de desconfiar de los planteos. No creo que haya espacios progresistas en la coalición. Lacalle Pou puede ponerse una gorrita y salir a hacer mandados en La Paloma. Creo que tiene una luna de miel que disfrutar hasta que llegue el momento. La realidad es mucho más difícil que una cordial reunión de verano.
El nuevo gobierno le aseguró al PIT-CNT que va a derogar el decreto que permite las ocupaciones. ¿Qué le parece?
A mí me preocupan las consecuencias ulteriores. ¿Se llevarán preso a los trabajadores que ocupen? ¿Se contratarán rompehuelgas en los conflictos para impedir su desarrollo? Porque no es tan simple decir en el Uruguay nunca tuvimos permiso para ocupar. Yo creo que es una medida que significa un retroceso. Lo discutiremos en la Mesa Representativa.
Pero esa medida no generó tanto malestar en la cúpula del movimiento sindical. ¿Cree que se minimizó el tema?
Ah sí, yo creo que cualquier derecho que se le quiten a los trabajadores no es algo tan fácil de analizar. Sin duda es una estrategia interesante del nuevo gobierno. Yo me reservo mis tiempos como organización para prepararme para el momento del enfrentamiento.
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá