C. Pazos

La experiencia de fútbol en césped sintético contada por los protagonistas

Por primera vez se jugó en Uruguay un partido en una cancha de césped sintético y jugadores y técnicos analizaron pros y contras en charla con Referí

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20 de febrero de 2019 a las 05:03

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Que quema. Que causa lesiones. Que hay que tener cuidado con el pique de la pelota.

Que no provoca nada al caer. Que las lesiones son menos que las habituales en un campo de césped natural. Que no hay excusas porque las condiciones son las mismas para los dos equipos.

El césped sintético tiene una historia de idas y vueltas en el fútbol. Desde el año 2004, cuando la FIFA decidió habilitarlo para la práctica del fútbol profesional, la polémica se instaló para siempre y aquello que allá por la década de 1980 llamaban “campo de plástico” en Inglaterra, que en determinado momento ganó mala reputación y que se conoció como una superficie de juego propensa a causar más lesiones articulares, llegó para quedarse en las canchas uruguayas. El domingo 17 de febrero de 2019, el Campeonato Uruguayo vivió su bautismo en una cancha de fútbol sintético.

De la prueba en Finlandia a Montevideo

La primera vez que se utilizó el césped sintético en una competición internacional de fútbol fue en el Campeonato Mundial sub 17 de FIFA en Finlandia, en 2003, donde 10 partidos, incluida la final, se disputaron en una superficie sintética. En 2005 FIFA reiteró la estrategia en el Mundial sub 17 de Perú. En Uruguay no había cancha de esas características y los juveniles se terminaron preparando, para adaptarse a las condiciones en las que iban a jugar, en las canchas de Fútbol 5 de Aguada.

Tiempo después, las selecciones uruguayas tuvieron otra experiencia en césped sintético, en el repechaje para el Mundial de Sudáfrica 2010 en Costa Rica. En aquella ocasión Uruguay se preparó en Panamá.

La cancha de Rentistas

Carlos Pazos

El año pasado la cancha de Rentistas se sumó a esa revolución. Bajo el gobierno de Wilmar Valdez, la AUF le otorgó al club una serie de fondos de FIFA para la colocación de la alfombra sintética en su complejo de la avenida Mendoza. El costo de la obra fue de US$ 450 mil según explicó el presidente del club Mario Burstyn en julio de 2018, y generó polémica porque la adjudicación fue para el club del entonces presidente de la AUF, que dio su versión en una entrevista con Referí: "Por 20 años será oficial para las ligas de fútbol femenino, de juveniles y mayores de la AUF". 

Esta temporada los rojos, que juegan en Segunda División Profesional, alquilaron el campo de juego a Boston River que abandonó su localía en Las Piedras para jugar en Montevideo.

El fin de semana se inauguró el Campeonato Uruguayo, Boston River recibió a Plaza Colonia sobre césped sintético y la cancha, como no podía ser de otra manera, fue objeto de todo tipo de comentarios, algunos de ellos con tono humorístico.

¿Cómo se sintieron los jugadores?

Carlos Pazos

Mucho se podrá decir sobre el césped artificial pero la única realidad se ve en la cancha y allí los que padecen o disfrutan el juego son los futbolistas.

El volante de Plaza Colonia, Facundo Waller volvió el fútbol luego de una prolongada lesión. Referí lo consultó para conocer cómo se sintió en la cancha de césped sintético.

“En mi caso no me gusta jugar en el sintético. Primero, porque es mucho más duro que una cancha normal; segundo, porque el pique de la pelota cambia, pica más alto y se frena bastante para dar un pase, y a veces no para de rodar. Es raro. Yo prefiero el pasto. Y además veo como que se trancan los championes, pero eso depende de cada jugador. Prefiero jugar en cancha de pasto”.

El golero de Plaza, Nicolás Guirín, brindó su opinión desde otra perspectiva. Del que se arroja al césped en procura de evitar los goles. “Es bien de fútbol cinco, preciosa para jugar por abajo pero para los goleros es un poco dura y el caucho quema bastante. Recomiendo atajar de calzas largas, sería mejor”, dijo a Referí.

Consultado por el pique expresó: “Pica más alta la pelota, más rara, no es una diferencia horrible, es leve pero es una diferencia que la notás, mismo para pegarle el pie no se te entierra tanto”.

Guirín dijo que los jugadores de Boston River tienen ventaja sobre el resto al oficiar de locales en la cancha sintética. “Yo creo que sí, que tienen ventaja porque están acostumbrados, al pique, a la velocidad de la cancha y los jugadores nuestros luego de correr un rato les quemaba los pies porque el caucho calienta y te hace quemar el pie”.

Los entrenadores

Otra visión sobre el tema es la que pueden aportar los entrenadores. ¿Cómo preparan un partido? ¿Qué detalles no se pueden descuidar?

El técnico de Plaza Colonia, Mario Szlafmyc mostró su rechazo al césped sintético en diálogo con Referí.

“Es muy marcada la diferencia, no estoy a favor. Y si bien no me gusta, prefiero eso a una cancha que esté toda mala. Pero la magia del césped es otra cosa. El piso es diferente, el caucho que salta, la pelota no corre natural. Capaz que es un tema cultural porque me crié en el fútbol de pasto”.

Szlafmyc no dijo nada sobre el tema en la charla técnica “porque no quería generar en los jugadores una psicosis". De todas formas, puntualizó: "Es claro que a los goleros la pelota les pica más de lo normal y corre más rápido”.

Y concluyó diciendo: “Siempre que esté dentro de la reglamentación va a ser justo y no hay ninguna protesta para hacer. Obviamente que es una ventaja, pero lícita”.

@bostonriver

Por su parte el entrenador de Boston River, Gastón Machado, brindó su punto de vista a Referí: “(Carlos) Manta (gerente deportivo de Plaza) salió con la corneta, abriendo el paraguas toda la semana y el fútbol es uno solo. Estamos acostumbrados a jugar en canchas tan malas y esto tiene la ventaja de que es un terreno parejo que permite desplegar un juego con pelota al piso. Puede ser que sea más rápido y que nosotros teníamos ventaja sobre el rival por entrenar ahí, pero cuando suena el silbato son 11 contra 11 y el que hace el gol gana. Las teóricas ventajas cuando el juez pita, se terminan”.

El partido terminó en un empate a dos goles por bando.

Machado comentó a Referí que esta semana, debido a que el fin de semana jugarán en una cancha de césped natural, desde el miércoles entrenarán en terrenos de pasto natural.

Cuidados

A la hora de hablar de los cuidados que debe recibir una cancha de césped sintético, Referí consultó al ingeniero Salvador Invernizzi, encargado de la cancha del Complejo de la Asociación Uruguaya de Fútbol y la del Charrúa, que se inauguró en el Mundial femenino sub 17 en noviembre del año pasado.

“Lo normal es hacer cepillados como para redistribuir el terreno que se puede mover con el uso. Cada tanto alguna recarga de la goma que es la que se puede perder un poco, sobre todo cuando llueve fuerte”.

Camilo Dos Santos

Invernizzi reveló que las canchas de sintético que existen en Uruguay son las del Complejo Rentistas, Complejo Celeste, Los Céspedes (complejo de Nacional), el estadio Charrúa y “hay otras en un complejo en Camino Carrasco que tiene dos canchas grandes pero básicamente se utilizan como canchas chicas para alquiler”, acotó.

Con relación a la vida útil de la cancha, reveló: “Normalmente, usado en forma intensiva, dura de 10 a 12 años. Acá en Uruguay no se han hecho en ningún lado recambios”.

La palabra de un especialista

Las pistas brindadas por Invernizzi llevaron a Referí a consultar a un especialista en el rubro de la medicina para saber si existen riesgos de lesiones en una cancha de las referidas características.

Pedro Larroque, durante muchos años encargado de la sanidad de las selecciones juveniles de Uruguay, reveló que “el césped sintético no es igual que el normal, es un poco más firme, más apretado, te da menos posibilidad de rotación del pie. Estadísticamente no hay diferencias en las lesiones. Me parece que pasa más por un tema de adaptación. Pienso que una vez adaptados no hay mucha diferencia y sin dudas en el juego se hace más fluido”.

Larroque dijo que no creía que se trabajen distintos músculos en un piso y otro: “Estos pisos permiten desarrollar otras velocidades, pero no creo que trabajen diferentes músculos”.

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