La perilla sanitaria le da margen al gobierno para dar un paso en la economía

Pasó una nueva semana y el gobierno sigue moviendo las perillas del control de mando. Con un poco más de aire en el plano sanitario ante los 434 testeos aleatorios negativos en la construcción, y focos de contagio en dos geriátricos que tampoco se extendieron, el Poder Ejecutivo buscó en los últimos días dar distintas señales para reactivar la economía, en medio de la amenaza por el fuerte deterioro del mercado laboral y la inflación al alza.

El Poder Ejecutivo mantuvo el lunes reuniones en Torre Ejecutiva con la Cámara Nacional de Comercio y Servicios y con la Cámara de Industrias. Ese día el 85% de los comercios del centro de Montevideo reabrieron sus puertas, mientras que el presidente Luis Lacalle Pou anunció por la noche en una conferencia de prensa la vuelta a la atención en algunas oficinas públicas y adelantó que analizan más “aperturas” en otros sectores productivos y comerciales.

También el lunes, un documento difundido por Presidencia, con base en un informe del grupo de asesores científicos del gobierno, señaló que “la baja prevalencia de la enfermedad entre la población” permite “dar un paso más hacia el restablecimiento de condiciones económicas y sociales más normales”.

Tanto los actores empresariales y del sistema de salud están a la expectativa de que eso ocurra mientras siga bajo control la perilla sanitaria. Para eso será clave que continúe el control de los contagios y medir a los distintos sectores que retornen.

El equilibrio entre salud y economía es uno de los puntos de discusión desde el inicio de la emergencia sanitaria decretada el 13 de marzo. Primero la incógnita fue cuánto cerrar. Y ahora cómo abrir, cuándo, y dónde.

La consigna que proclama el presidente es la de “acelerar los motores de la economía”, pero con “cuidado y prevención”, según dijo el miércoles durante una recorrida por Cerro Largo. El martes el gobierno y los empresarios avanzaron en el protocolo para los comercios y también se ajustaron las pautas para el regreso escalonado en las oficinas públicas.

En la conferencia del miércoles Lacalle Pou dijo que anticiparse en cuestión sanitaria era fundamental y adelantó pautas de testeo masivo para trabajadores zafrales de la caña de azúcar, para luego proceder al control aleatorio de los cañeros mientras transcurra la cosecha.

Los controles en las zonas limítrofes con Brasil fueron también una de las mayores preocupaciones del gobierno esta semana ante la propagación de la enfermedad en el país vecino.

Pese a las señales de la reactivación laboral, la gran incógnita todavía sigue siendo la enseñanza, donde además los padres presionan por las dificultades y costos que implica el cuidado de los niños al tener que salir a trabajar.

La semana incluyó además el dato sobre la aceleración de la inflación, registrada en un momento de mercado laboral golpeado. La inflación interanual trepó en abril a 10,9% desde el registro de 9,2% de marzo. El mayor incremento se dio en el rubro de alimentos y bebidas, que es el que más impacta en los hogares de menos recursos. Y eso ocurre al mismo tiempo que miles de personas perdieron sus empleos o fueron enviados al seguro de paro.

En la conferencia de prensa del lunes, la ministra de Economía Azucena Arbeleche insistió en la necesidad de "mantener los motores de la economía funcionando", en sostener las pequeñas y medianas empresas, y recordó las medidas dispuestas. Mientras, los Consejos de Salarios se encaminan a posponerse.

La cuestión para el gobierno está en cuánto dinero deberá destinar para paliar la situación económica y social, aunque en el Poder Ejecutivo asumen que en tiempos de coronavirus la lucha por el deteriorado déficit fiscal queda en un segundo plano.

El Frente Amplio, mientras, continúa con sus debates internos sobre cómo pararse en el rol de oposición. En tanto, en medio de la puja interna de liderazgos entre nuevos referentes, los expresidentes Tabaré Vázquez y José Mujica volvieron a la escena política.  

En los últimos días algunos dirigentes frenteamplistas empezaron a endurecer el tono de las críticas al gobierno. El manejo sanitario sigue sin ser un área de cuestionamientos, sin embargo apretaron los dientes con reclamos de medidas económicas y tras el inicio de la discusión formal en la comisión especial del Senado del proyecto de Ley de urgente consideración.

Sus dirigentes coinciden en poner el acento en la propuesta de “un subsidio equivalente a un salario mínimo nacional que dure el mismo tiempo que la cuarentena”, para trabajadores que no se encuentran en la seguridad social.

La bancada de Diputados del Frente Amplio presentó el miércoles siete proyectos de ley que van desde la limitación de los despidos por 180 días hasta la fijación de precios máximos para productos básicos de higiene y alimentación.

Pero Mujica salió al cruce de una de las iniciativas. "No sé por qué lo proponen, no creo que sea factible. Están expresando una forma de pensar", dijo este jueves el líder del MPP en una entrevista con informativo Carve. 

También el jueves, Vázquez concedió una entrevista al programa ADN de VTV donde dijo que "por el momento" le "satisfacen los resultados" ante la propagación del coronavirus en Uruguay. Fue su reaparición tras señalar al inicio de la pandemia que se debía ir hacia “alguna medida más radical” y que “se va imponiendo el concepto de una cuarentena obligatoria”, dijo el 23 de marzo en una entrevista con M24 . El expresidente pidió este jueves hacer "una precisión". "Yo hablé que quizá en la evolución de tiempo de la pandemia tendría que tomarse una medida más radical como una cuarentena obligatoria. Nunca dije total. Está grabado", afirmó. "No dije total, sino parcial, porque no se puede cerrar la economía”, agregó.

Larrañaga vs Bonomi

En el Parlamento también empezó la discusión formal del proyecto de ley de urgente consideración. La apertura del debate tuvo como duelo excluyente el lunes la comparecencia del ministro del Interior, Jorge Larrañaga, que enfrentó por primera vez desde el otro lado del mostrador a su antecesor, el ahora senador frenteamplista Eduardo Bonomi. La polémica siguió en la semana sobre los criterios tomados por Larrañaga para comparar las cifras de delitos.

Además de los chisporroteos con la oposición, la coalición de gobierno también busca por estos días acordar algunas de sus diferencias sobre el articulado. 

El debate continuará y el Frente Amplio prevé endurecer su posición, todavía más, cuando se discutan los artículos del proyecto de ley urgente sobre telecomunicaciones y la nueva ley de medios.