Bayardi, un ministro que ya chocó con militares por los desaparecidos cuando estuvo en Defensa

Tras el cese de la cúpula de Defensa y el Ejército en medio de cruces de responsabilidades entre el presidente Tabaré Vázquez, la Secretaría de Presidencia y los ex jerarcas de Defensa, Jorge Menéndez (Partido Socialista) y Daniel Montiel (MPP), el nuevo ministro José Bayardi volverá el lunes a la cartera donde ya estuvo entre 2005 y 2009 para lidiar con una interna castrense que mira de reojo cada acción del gobierno.

El tema que lo pone de vuelta en el gabinete no es nuevo para él. Durante su primera gestión en Defensa, primero como subsecretario de Azucena Berruti (hasta 2008) y luego al frente de la cartera casi hasta el final del primer período de Vázquez, Bayardi tuvo choques con los militares por las investigaciones sobre desaparecidos, a los que los acusó de mentir y a los que también debió pedir disculpas públicas por aludirlos como “maricones” en un Plenario del Frente Amplio en 2005. Además atravesó polémicas con salidas de comandantes en jefe y generales.

El dirigente de la Vertiente se reunió este jueves con el presidente Vázquez y a la salida del encuentro sostuvo que no aceptar el ofrecimiento del mandatario era “casi ser un desertor”. El ministro entrante dijo además que “no hablaría de crisis” militar porque la “subordinación al poder político no está en cuestión”.

En este período Bayardi deberá lidiar ahora con un Ejército descabezado, que en el último mes enfrentó destituciones de siete de sus 16 generales (incluidos dos comandantes en jefe), y mientras el Frente Amplio anuncia como prioritario el tratamiento en el Parlamento de una nueva ley orgánica militar.

Este domingo, al finalizar una reunión de su sector el ministro entrante que será acompañado por Andrés Berterreche (MPP) como subsecretario afirmó que "desde el punto de vista de la institucionalidad no hay espacio para el retobe".

Los desaparecidos

Cuando Vázquez asumió el gobierno en 2005 ordenó a los jerarcas de las tres fuerzas que le entreguen informes con datos sobre los desaparecidos en la dictadura y los lugares donde pudieron ser enterrados los cuerpos.

La investigación sobre el destino de los desaparecidos fue así una de las primeras fricciones que enfrentó Bayardi como número dos de Berruti. Fue en ese primer año del primer gobierno de Vázquez que comenzaron las excavaciones en los batallones 13 y 14 y en chacras de Pando, lo que generó molestia en las filas castrenses.

Cuando el Frente Amplio asumió su primer gobierno el comandante el jefe del Ejército era Angel Bertolotti, que estaba en funciones desde el 1° de febrero de 2005.

En el Ejército, Bertolotti encargó a los generales Pedro Barneix y Carlos Díaz la realización del informe.

En junio de 2005 Bayardi participó de una charla organizada por el Centro Académico de Estudios Estratégicos, donde recibió críticas de militares retirados. Ante cuestionamientos por compartir una coalición con tupamaros, Bayardi respondió que siempre tuvo “discrepancias con su método de lucha” y que “sobre esas acciones los integrantes del MLN han dado sus explicaciones”, según consignó la crónica de El Observador del 16 de junio de 2005. En tanto, en julio de 2005 el gobierno comenzaba a promover la Ley de Defensa Nacional.

A los pocos meses de que Bayardi asumiera junto a Berruti, el Frente Amplio comenzó a cuestionar que el gobierno mantuviera en el cargo a los comandantes en jefe del Ejército, Bertolotti, de la Armada, Tabaré Daners y de la Fuerza Aérea, Enrique Bonelli. En particular, Bonelli fue cuestionado por haber admitido ser copiloto del denominado primer vuelo que transportó detenidos políticos desde Argentina. En un plenario del Frente Amplio realizado el 3 de setiembre de 2005, Bayardi dijo que los informes de la Armada y el Ejército no cumplieron con el pedido de Vázquez y que el documento del comandante de la Fuerza Aérea, Bonelli, sobre la cuestión de los desaparecidos dejó en “off side” a los comandantes de las otras dos fuerzas, según informó el semanario Búsqueda. Además, el jerarca afirmó que sería “un error” relevar a Bonelli de su cargo por haber admitido que fue copiloto del denominado primer vuelo que transportó detenidos políticos desde Argentina. “Si viene alguien que puede ser comandante en jefe que me dice ‘yo no tuve nunca nada que ver’, en realidad fue un maricón o estuvo lejos, muy lejos”, dijo. Estas declaraciones le valieron un reclamo de Bertolotti a Berruti.

Otros militares llegaron incluso hasta a reclamar un Tribunal de Honor para el jerarca. Casi un año después de ese episodio, Bayardi admitió en agosto de 2006 en nombre del gobierno que hubo militares que dieron datos falsos sobre el paradero de los desaparecidos. “El gobierno sabe que hay militares que mintieron”, dijo Bayardi. “Los militares que faltaron a la verdad deberían ser enjuiciados”, agregó.

La caída de un comandante y otro general

Bertolotti pasó a retiro el 1° de febrero de 2006 y asumió como nuevo comandante en jefe el general Carlos Díaz. Pero Díaz duró poco tiempo. El jefe militar fue cesado luego de que el 18 de octubre de 2006 se reuniera junto al expresidente Julio María Sanguinetti y el exministro de Defensa, Yamandú Fau, en compañía de los generales Pedro Aguerre y Miguel Dalmao.

Así, asumió a fines de octubre como comandante en jefe del Ejército Jorge Rosales.  Su designación generó molestia en otros generales que llevan más antigüedad en la cúpula del Ejército.

Una situación similar se repetirá en la nueva gestión de Bayardi, ya que Caludio Feola, designado comandante en jefe del Ejército, es el general con menos antigüedad en la cúpula castrense.Las polémicas por los informes sobre los desparecidos volvieron en noviembre de 2007 cuando el gobierno relevó al general Raúl Gloodtdosky luego de que al final de una cena en Haití – donde estaba de misión – en la que el militar había tomado mucho whisky delante de varios oficiales de la Armada cuestionó a esa fuerza porque “dejó solo” al Ejército en las investigaciones por los desaparecidos.

Leonardo Mainé

Bayardi asume como ministro en marzo de 2008 y renuncia en agosto del 2009 para participar de la campaña electoral

En agosto de 2008 Bayardi dijo en el Parlamento que “el país debe discutir desde el punto de vista político” la misión en el Congo “debido al carácter multinacional de sus actores”.

También en agosto de 2008, Bayardi fue el primer ministro que se manifestó a favor de derogar la ley de Caducidad. “Si yo no estuviera en el Poder Ejecutivo mi posición es que estoy de acuerdo que la ley hay que derogarla y sacarla de nuestro sistema constitucional", dijo el ministro en una conferencia de prensa, aunque de todos modos marcó distancia sobre la posibilidad de anular la normativa y también advirtió que no militaría por ello mientras estuviera en el gobierno. "No creo que haya mecanismos que permitan anular la ley en nuestro sistema jurídico internacional”, sostuvo.

Días después de dejar el ministerio, durante una entrevista con Montevideo Portal Bayardi reiteró en setiembre de 2009 su posición favorable a eliminar la Ley de Caducidad, algo que ya había transmitido a los mandos de las fuerzas. "Eliminando esta ley gana el país porque deja de ser estigmatizado por tener una ley que tiene todos los cuestionamientos de los ámbitos jurídicos internacionales y regionales, gana la sociedad porque nadie va a tener ningún beneficio cuando vaya a ser convocado por un juez y creo que puede ser un enorme y sano instrumento en beneficio de los militares porque la ley les sigue pesando como un estigma", dijo.

Ya como parlamentario, entre 2010 y 2011, Bayardi fue uno de los principales impulsores en el Frente Amplio para anular la Ley de caducidad.