En una polémica medida, el gobierno del presidente Joe Biden limitará el asilo en la frontera de los Estados Unidos con México cuando este jueves levante la norma sanitaria que permitía expulsar a casi todos los migrantes que intentan entrar en el país.
El secretario de Seguridad Nacional norteamericano Alejandro Mayorkas dijo en conferencia de prensa este miércoles que "aquellos que no usan vías legales para entrar en los Estados Unidos no son elegibles para el asilo".
Este jueves expirará el llamado Título 42, una norma activada durante la pandemia que hacía casi imposible pedir asilo, y la tensión del lado mexicano de la frontera aumenta segundo a segundo.
En el río Bravo, que delimita la frontera estadounidense/mexicana, se multiplican los cruces de personas en colchones inflables convertidos en improvisadas lanchas, según informan la agencia de noticias AFP. Mientras tanto, cientos de personas acampan desde hace días en territorio estadounidense esperando poder sortear la valla metálica ante el temor de que, con la puesta en vigencia de la nueva norma, todo se transforme en una dificultad insalvable.
En Brownsville, Texas, Jimmy Muñoz, un ecuatoriano de 29 años que logró ingresar a los Estados Unidos, pero tiene frente a él un alambrado de púas y la valla de unos 4 metros de alto, dijo a AFP: "Tengo la esperanza de poder quedarme en este país, pero el puesto de control decidirá mi suerte”.
Los migrantes que sean declarados "no elegibles" por las autoridades serán deportados a no ser que demuestren "un temor razonable de persecución en el país al que van a ser expulsados”, señaló Mayorkas. Y si bien dijo que les queda todavía la opción de buscar impedirlo, las "circunstancias son muy limitadas".
A través de la aplicación móvil CBP One o al trámite en los países por los que transitan para llegar a los Estados Unidos, el gobierno norteamericano obliga a los migrantes a pedir cita para obtener el asilo. Para ello, deberán acogerse a un permiso de reunificación familiar o a un programa que autoriza la entrada sólo de 30.000 personas por mes desde Venezuela, Nicaragua, Cuba y Haití por motivos humanitarios.
El Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos (DHS) confirmó mediante un comunicado las excepciones a las restricciones de asilo. Entre ellas, quedarán exceptuados los niños no acompañados y aquellos migrantes que no pudieron usar la aplicación móvil por desconocer el idioma inglés, por analfabetismo o por falla técnica. También quedan exceptuados quienes lo solicitaron y se les denegó en otro país o en circunstancias excepcionales.
Varias ONG’s compararon esta regla de Biden con la medida que el expresidente republicano Donald Trump había intentado activar en 2019 para impedir la llegada de migrantes y los tribunales se lo impidieron.
El director de Estrategias Fronterizas de la ACLU, la asociación de derechos civiles estadounidense, Jonathan Blazer fue tajante: "Este es un día sombrío para nuestro país y para los refugiados. Biden cerró la posibilidad de asilo en los Estados Unidos a la mayoría de las personas. Está terminando el trabajo de Trump".
Algo que Mayorkas se encargó de desmentir: "Estamos dejando muy claro que nuestra frontera no está abierta, que cruzar irregularmente es ilegal".
Sin embargo, el mismísimo presidente Biden reconoció que “todo esto será caótico por un tiempo". Pero afirmó que “se están proponiendo vías legales para una migración ordenada y segura con el fin de que los migrantes no caigan en las garras de los traficantes de personas”.
Por lo pronto, en la frontera se distribuyeron más de 24.000 agentes junto con otros 1.100 nuevos coordinadores de la patrulla fronteriza. Se sumaron también cientos de policías de otras agencias del Departamento de Seguridad Nacional, 400 voluntarios y 1.000 personas encargadas de las llamadas entrevistas "De Miedo Creíble", que evalúan si existe una posibilidad de que la persona sea perseguida o torturada si regresa a su país.
Este jueves, cuando culmine la norma sanitaria, la política migratoria de los Estados Unidos volverá a regirse por el Título 8, norma existente desde hace décadas y que permite expulsar a quien entre al país sin una visa o la documentación requerida. Quienes migren de Cuba, Nicaragua, Haití y Venezuela serán expulsados a México. El resto será deportado a sus países de origen gracias a acuerdos negociados en el último año y medio.
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá