Martínez vuelve a hablar de “hechos, no palabras” y endurece críticas a Lacalle

Pero en campaña, después del descanso enseguida vuelve la ruta. Por eso temprano en la mañana del miércoles, el candidato frenteamplista se subió a la camioneta para enfilar hacia el norte del país e iniciar una gira por todo el país –y hasta la capital de Argentina– en la recta final hacia las elecciones del 27 de octubre. 

“¿Verdad que estuve bien?"

Melo, capital de Cerro Largo, fue la ciudad que lo recibió horas después del debate, y lo sucedido en el estudio de Canal 4  fue el eje del discurso de Martínez en la noche del miércoles. En comunión con el público que colmó el club Millenium, el candidato oficialista se despachó contra Lacalle Pou, lo volvió a acusar de no haber realizado “propuestas” y cuestionó el abandono de “la positiva” de 2014, el eslogan que utilizó el nacionalista en la anterior elección.

“Hay un candidato que en las elecciones pasadas era todo por la positiva. Omm y por la positiva.  O esa actitud positiva ante la vida se agota, o era una pose”, exclamó Martínez para aplausos del público.

El exintendente dijo que “respetaba” esa campaña “por la positiva” pero que en el debate “quedó claro” que esa ya no es la hoja de ruta de su adversario. “Hizo como 14 o 15 intervenciones repartiendo palo, tergiversando las cosas, dando vuelta asuntos, interpretando como quería, sin proponer nada y solo dedicándose a dar palo”, comentó.

Los descargos de Martínez tuvieron la complicidad de un público que se sumó gustoso a las críticas a Lacalle.

–Nos imaginábamos que algo de eso iba a pasar. Prácticamente por Twitter había anunciado lo que iba a pasar. Palo, palo, y palo y muy poca propuesta –comentó el candidato.

–¡Ninguna! –interrumpió a grito pelado una mujer desde las gradas. “Nada propuso, ¡nada!”, exclamó otra.

–Bueno, tampoco hay que exagerar… –contestó Martínez, con un manto de ironía.

A continuación, el candidato del Frente trajo a colación una de las frases que más repitió durante la noche del martes y que se convertirá en un eje central de su discurso de campaña. “Por ahí en el debate me salió una frase. Cuando hoy en Uruguay hay gurises que reciben premios de robótica en el exterior, ¿verdad que estuve bien cuando dije ‘hechos, no palabras’? ¿Verdad que estuve bien?”, afirmó.

“Brillante, ¡lo mataste!”, le respondieron desde las gradas.

Martínez se retorció de la risa y continuó: “Cuando vemos que en 2004 una familia gastaba promedialmente 30 de cada 100 pesos en salud, y hoy hay más de 2,5 millones de personas con cobertura de Fonasa y las familias gastan promedialmente 8 de cada 100 pesos en salud, ¿verdad que estos son hechos y no palabras?”.

El eslogan volvió para hablar del aumento de la inversión en educación, la legalización del aborto, y de la reducción de la pobreza.

Como ha repetido a lo largo de la campaña, Martínez insistió en Melo en que el contexto internacional es “incierto”, pero subió el tono en la diferenciación con las propuestas de sus competidores. “Dos de cada tres niños que nacen van a trabajar en oficios que hoy no existen. Eso implica que también a varios de ustedes los adultos en unos años les va a cambiar la forma de trabajar. Pero entonces, ¿qué hacemos? ¿Vamos a buscar la motosierra para el recorte del estado?

La respuesta llegó al unísono. “¿Verdad que no?”, insistió Martínez. “¡Vamos a crear esperanza recapacitando a 400 mil uruguayos, dándoles herramientas para que sigan trabajando con dignidad!”, remató.

Luego dijo que se hará un fondo para la reactivación productiva “con la ganancia de un Banco República que dio pérdida cuando blancos y colorados daban préstamos al ton ni son sin ninguna garantía”.

“¡Eso es pensar en el futuro! No con el recorte. Con la valentía de enfrentarnos a un mundo diferente, diciendo que somos un pueblo orgulloso, y que aceptamos el desafío. ¡No para sacarle plata a los pobres, sino para ser todos más ricos!”, concluyó.