Camilo dos Santos

Mecanismo de Montevideo cumple un mes sin avances y en México se molestan con Uruguay

Mientras que el Grupo de Contacto Internacional está activo y ya tuvo tres reuniones, el Mecanismo de Montevideo nunca despegó

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07 de marzo de 2019 a las 05:04

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La tranquilidad habitual de Montevideo en verano se vio alterada en los primeros días de febrero, cuando las calles de la capital se llenaron de diplomáticos que llegaron al país para participar de una serie de negociaciones internacionales para lograr una salida a la crisis venezolana.

De los diálogos ocurridos entre el 6 y 7 de febrero en el Palacio Santos y en la Torre Ejecutiva surgieron dos grupos, con la particularidad que Uruguay era el único que integraba ambos: el Mecanismo de Montevideo –una iniciativa uruguayo-mexicana junto a los 15 países de la Comunidad del Caribe (Caricom)– que abogaba por el diálogo “sin condiciones” entre el oficialismo chavista y la oposición liderada por Juan Guaidó, y el Grupo de Contacto Internacional –encabezada por Uruguay y la Unión Europea– que reclamaba “elecciones presidenciales libres, transparentes y creíbles” en el “menor tiempo posible”.

@SRE_mx

Pasado un mes de estos acontecimientos, el Mecanismo de Montevideo registra muy pocos avances, lo cual generó la molestia del gobierno mexicano, que entiende que Uruguay no ha hecho los esfuerzos suficientes y que no están trabajando conjuntamente. Una alta fuente de la cancillería que lidera Marcelo Ebrard y que estuvo en Uruguay durante esos días, dijo a El Observador que luego del encuentro en Montevideo no hubo novedades y que eso se debía fundamentalmente a la falta de rumbo y de una postura clara por parte del gobierno de Tabaré Vázquez.

A los mexicanos no les cayó nada bien que Uruguay firmara la declaración del Grupo de Contacto Internacional y menos que una semana después junto a Mauricio Macri pidiera encontrar “una solución democrática con elecciones libres, creíbles y con controles internacionales confiables” en Venezuela. Mientras que Uruguay y México se declaran neutrales, Argentina reconoce a Guaidó como presidente encargado y no ha dudado en calificar a Maduro como un dictador.

Desde la cancillería uruguaya se limitaron a decir a El Observador que seguían “dialogando”.

La posición del gobierno ha sido defendida por Rodolfo Nin Novoa, quien ante los cuestionamientos de la oposición en el Parlamento dijo que Uruguay no andaba “zigzagueando”.

“No es que Uruguay ande cambiando. Las situaciones son y uno responde ante esas posibilidades. ¿Cómo hacemos para conciliar posiciones en un país que dice tener dos presidentes? Tenemos los objetivos claros. Uruguay está en la línea correcta”, agregó antes de reconocer que en el país caribeño había una “crisis democrática”, que existía una “crisis humanitaria” y “presos políticos”.

Nin criticó a Guaidó por no tener “control efectivo del territorio” y dijo que “su gobierno en condiciones actuales solo puede validarse por la vía de la fuerza como un levantamiento militar o una intervención extranjera”, por lo que era prácticamente “irresponsable” reconocerlo como presidente

Camilo dos Santos

El mecanismo consta de cuatro partes (diálogo inmediato, negociación, firma de compromisos e implementación de lo asumido con acompañamiento internacional) y fue rechazado por Guaidó y aceptado por Maduro. Los mediadores elegidos Rebeca Grynspan (exvicepresidenta de Costa Rica y actual secretaria general Iberoamericana) y los excancilleres de Uruguay y México, Enrique Iglesias y Bernardo Sepúlveda, aún no han viajado a Venezuela.

La semana pasada, Rusia anunció que estaba dispuesta a unirse a este grupo si “era necesario”, según declaró la portavoz del Ministerio de Exteriores, María Zajárova.

Los esfuerzos de Uruguay han estado destinados al desarrollo del Grupo de Contacto Internacional. El jueves pasado, altos representantes de la cancillería participaron de una reunión en Bruselas con técnicos de la Unión Europea en la que acordaron una serie de “acciones” como seguir buscando espacios para lograr el ingreso de ayuda humanitaria a través de Naciones Unidas y la realización de elecciones, según supo El Observador en base a fuentes diplomáticas.

Leonardo Carreño

En el encuentro también analizaron los informes elaborados por la delegación que se reunió con ambas partes en Venezuela. Por Uruguay viajaron a Caracas el director de Asuntos Consulares y Vinculación, Jorge Muiño, y la directora de Derechos Humanos, Dianela Pi, mientras que la UE estuvo representada por la jefa de la delegación Isabel Brilhante. El vicecanciller Ariel Bergamino dijo a la agencia Sputnik que la oposición y el gobierno venezolano tuvieron "buena recepción" al diálogo, lo que "confirma la validez de la misión".

El sábado, la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, reiteró que la solución a la crisis venezolana solo podía ser “política, democrática y pacífica” y señaló que estaban observando “atentamente” los acontecimientos en “cooperación con los miembros del Grupo de Contacto Internacional”.

Pero este grupo es rechazado por el chavismo y así lo volvió a dejar en claro este martes la embajadora de Venezuela ante la Unión Europea. Claudia Salerno criticó la "extrema incoherencia de la UE" por llamar a un diálogo que conduzca a elecciones mientras sus miembros reconocen a Guaidó. La diplomática criticó al grupo por "no estar balanceado" entre países europeos y latinoamericanos, y aquellos que apoyan a Maduro o a Guaidó. Además de Uruguay y la UE, la declaración del 7 de febrero fue firmada por Costa Rica, Ecuador, España, Italia, Portugal, Suecia, Alemania, Francia, Países Bajos y Reino Unido.

Salerno también aseguró que para Caracas “ningún tema” era tabú y que no había nada “fuera de la mesa", aunque reiteró que "Venezuela tuvo elecciones" en mayo de 2018 y que no debería desoírse a quienes votaron por Nicolás Maduro entonces.

Por último, respecto al otro objetivo del Grupo de Contacto Internacional, el envío de ayuda, la embajadora aseguró que "no existe una crisis humanitaria", sino un "estrangulamiento económico" por las sanciones de Estados Unidos.

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