Método educativo de Singapur aterriza en una escuela pública

Plan del líder de las pruebas PISA está presente en 48 colegios privados

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25 de octubre de 2017 a las 05:00

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El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) fue categórico a finales del año pasado: llegar al nivel promedio de las pruebas PISA en el mundo resulta "inalcanzable" para Uruguay. En ese marco, las maestras de la Escuela Nº 149 pidieron autorización al Consejo de Educación Inicial y Primaria (CEIP) y adoptarán el método de enseñanza de Singapur, el país con mejores resultados en las pruebas PISA. A partir de marzo del próximo año, los estudiantes de ese centro complementarán los aprendizajes oficiales con la metodología del sudeste asiático.

El principal diferencial entre lo que se enseña en Uruguay y en Singapur es el cómo. El gerente de Marshall Cavendish Education -la editorial que importa los libros de ese método a Chile-, Alex Castillo, dijo a El Observador que los contenidos que aprenden los estudiantes uruguayos no distan demasiado de lo que reciben los alumnos singapurenses, pero sí cambia la forma en la que les son enseñados.

Castillo puso como ejemplo la enseñanza de las operaciones matemáticas. Mientras que en Uruguay los niños aprenden "ciertos trucos" que les permiten resolver los problemas, en Singapur los maestros explican por qué esos mecanismos funcionan. Según explicó Castillo, en Uruguay el 96% de los estudiantes aplican una forma de trabajar y no entienden realmente por qué es esa operación la correcta y no otra.

El experto señaló que el 4% de los niños que logran comprender la forma en la que se manejan las matemáticas terminan eligiendo carreras como la ingeniería. El resto logra salvar las materias, pero no se apropia del conocimiento. "Todos aprendimos operatoria y nos dijeron una manera de hacer los ejercicios. Lo que no estudiamos era por qué esa abstracción de números funcionaba, por qué era que la resta funcionaba así y no de otra manera", sostuvo.


Por ese motivo, en Singapur los estudiantes no solo aprenden matemáticas a través de los números, sino que también utilizan materiales didácticos que les permiten ver el funcionamiento de las operaciones. En una resta, por ejemplo, usan objetos que representan las unidades, las decenas y las centenas, para que los niños comprendan qué es lo que pasa cuando a una cifra se le resta otra. "Los niños tienen que debatir, explicar por qué llegaron a determinado resultado, trabajan mucho en equipo. El cambio en la dinámica de la clase genera resistencias entre los profesores, porque deja de ser un grupo que mira hacia un pizarrón y pasa a ser un aula en la que los estudiantes son los verdaderos protagonistas", contó.

Experiencia uruguaya

Los libros del método Singapur llegan a Uruguay a través de Avista, una editorial que importa los textos en español. Actualmente hay 48 colegios privados de todo el país que ponen en práctica esa metodología, pero la Escuela Nº149 será la primera institución pública. La directora de Avista, María Eugenia Mones, dijo a El Observador que la propuesta surgió a partir de la directora y las maestras, que pidieron el aval en Primaria. Las autoridades resolvieron otorgar el permiso, pero advirtieron que en la escuela deberán complementar los aprendizajes de la currícula oficial con el método usado en el país del sudeste asiático.

Mones señaló que la implementación del proyecto será gradual. Empezarán por inicial, primero y segundo, y luego irán avanzando en el método a medida que los niños crezcan. El financiamiento del programa se realizará a través de empresas privadas que donarán fondos para costear los libros. Según relató Mones, por el momento no consiguieron todas las donaciones que necesitan, ya que se trata de un proyecto que implica un compromiso a mediano plazo. Sin embargo, afirmó que están "encaminados" y esperan llegar a marzo del año que viene con el dinero necesario.


El consejero de Primaria, Héctor Florit, destacó la iniciativa de las maestras de la Escuela Nº149, pero también se mostró cauto en que el proyecto pueda prosperar en el resto de los centros educativos del país. El jerarca dijo a El Observador que "no correspondería" que los libros cambiaran, ya que en Uruguay hay un equipo de expertos que resuelve qué textos se utilizarán oficialmente.

Además, afirmó que la financiación también resulta un obstáculo para que el plan se expanda, porque Primaria "ya invierte mucho dinero" para que los alumnos tengan los materiales que necesitan. De todos modos, consideró enriquecedor que los niños complementen los aprendizajes de la currícula uruguaya con una propuesta extranjera.
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