Mitad de legisladores opositores bajaron su asistencia en año electoral

El próximo 15 de setiembre el Parlamento dará por concluido el período legislativo y todos los parlamentarios podrán dedicarse de lleno a la campaña electoral. Y a pocos días de que se cierre la XLVIII legislatura es un buen momento para repasar los números de asistencias a las comisiones. 

Si bien la asistencia de los diputados y senadores no define la calidad de su trabajo legislativo es, sin embargo, un indicador más para evaluar su tarea. En las comisiones parlamentarias se discuten los proyectos de ley que luego pasan al Plenario y es donde se realizan la mayoría de las modificaciones. Si bien es un trabajo que está menos sometido al escrutinio público, es donde se “cocina” gran parte de las leyes que luego son aprobadas. 

Entre los diez legisladores que más disminuyeron su asistencia a las comisiones parlamentarias en el último año hay cinco blancos, tres colorados y dos oficialistas. Y cada uno ensaya distintos argumentos para explicar estos números.  

Los legisladores del Partido Nacional, Luis Alberto Heber, Álvaro Dastugue y Gerardo Amarilla, aseguran que el aumento de la actividad proselitista debido a la campaña electoral tiene que ver con esta baja en su asistencia pero también apuntan a otras razones. “Hay comisiones que no tienen temas importantes y que leyendo las versiones taquigráficas podés estar al día. No es que dejás de participar”, dijo Heber a El Obsevador y mencionó como ejemplo la discusión del estatuto del funcionario en la comisión de Asuntos Administrativos del Senado. 

Amarilla, en tanto, dijo que la distancia –es diputado por Rivera- muchas veces le juega una mala pasada cuando las citaciones no se realizan con la debida antelación. Para el también diputado blanco Álvaro Dastugue la caída en el porcentaje de asistencia durante el año electoral también se debe al “trabajo en equipo” que realiza con sus suplentes. Sin embargo, cuando ingresa el suplente no se computa como falta. 

El legislador del Frente Amplio, Saúl Aristimuño, niega que su baja en la asistencia esté vinculada a la campaña electoral y asegura que tuvo dos faltas por temas personales y que el resto están vinculadas a citaciones en la Cámara de Senadores como suplente de Leonardo De León que, por el poco tiempo de antelación con el que se produjeron, no se pudo convocar a su suplente en la Cámara de Diputados. Aristimuño participó hasta en 17 ocasiones de la cámara alta en el período analizado (febrero – agosto de 2019). 

Las convocatorias de los suplentes, tanto en el Senado como en Diputados, solo se pueden realizar en una sesión del Plenario. Esto lleva a que si surge un imprevisto con poco tiempo de antelación es imposible concretarla. 

El también diputado oficialista, Gonzalo Civila, se sorprendió al ser consultado por este tema y descartó que la campaña electoral haya incidido en su asistencia a la cámara. Dos de sus faltas fueron por motivos de salud, según el legislador, y otras dos estuvieron vinculadas a actividades de representación de la propia actividad como diputado, según explicó. En 2019 hubo menos citaciones y cada falta tiene una incidencia mayor en el porcentaje. El diputado socialista, por ejemplo, faltó en 6 de las 19 ocasiones en las que fue citado este año y asistió a las 38 que tuvo en 2018. Ambos diputados del Frente Amplio habían tenido un 100% de asistencia entre febrero y agosto del 2018. 

Los diputados colorados Germán Cardoso (que solo fue a una de las 12 citaciones de este año), Walter Verri y Susana Montaner y la blanca Elisabeth Arrieta no respondieron a las consultas de El Observador. 

Todo el período

El líder del Partido Nacional, Luis Lacalle Pou, -que renunció al Senado el pasado 13 de agosto- y el líder del Partido Independiente (PI), Pablo Mieres, fueron objeto de críticas en las redes sociales por estar en campaña electoral y no renunciar a su banca en el Senado. Sin embargo, la situación de ambos es distinta. 

Mientras que el candidato a la Presidencia por los blancos asistió al 50% de las comisiones a las que fue citado en 2019, el candidato del PI acudió al 76%. Lacalle Pou, además, se encuentra entre los que tiene peor asistencia en toda la legislatura. 

En números generales tanto el Partido Independiente como el Frente Amplio son los que registran los mejores números de asistencia a las comisiones del Parlamento mientras que el Partido de la Gente –que luego de ser fundado contó en este período con dos diputados y un senador, que ya no tiene la banca- es el que tiene peores registros. 

Pero en el desglose por legislador, el Partido Nacional es mayoría en el ranking de los diez con más faltas. La mitad son parlamentarios blancos, mientras que dos son colorados, otros dos del Partido de la Gente y uno oficialista. 

Desde el entorno de Lacalle Pou dijeron a El Observador que “hay que tener en cuenta que las faltas con aviso son una modalidad permitida”. Todas las faltas del líder blanco, como la de la mayoría de los legisladores, son con aviso. El senador Jorge Larrañaga, que también se encuentra entre los que tienen peores registros, aseguró que los porcentajes no representan “el trabajo parlamentario” y apuntó que muchas comisiones son para temas de “mero trámite”. “La representación política supone otras cuestiones que también demandan presencia”, dijo. 

La senadora Verónica Alonso, en tanto, aseguró que estuvo “en todas las instancias que creía que debía estar”. “Mi trabajo es también recorrer el país y representar a los que están afuera. No solamente quedarme adentro de los muros de mármol alejada de la realidad”, apuntó a El Observador. Además, agregó que la mayoría parlamentaria del Frente Amplio, que le permite aprobar proyectos sin la necesidad de votos de la oposición, llevan a que muchas discusiones se vuelvan “eternas y estériles”. “A veces uno siente que pierde el tiempo”, agregó. 

El diputado por el Partido de la Gente, Daniel Peña, también apuntó a que atender a los ciudadanos es parte de su trabajo como representante departamental. “Mi trabajo es y será siempre estar al lado de la gente, escuchar sus necesidades, buscar soluciones y hacer oír la voz de mis compatriotas en la actividad parlamentaria”, dijo. Peña, que participó de la creación del Partido de la Gente durante este período, es el legislador con la peor asistencia a las comisiones de todos los parlamentarios. 

Los 13 legisladores con mejor asistencia son del Frente Amplio y entre los mejores 20 solo hay dos colorados, un blanco y un diputado del Partido Independiente. 

El interior lejano

En un país chico como Uruguay las distancias nunca suelen ser muy grandes. Pero cuando se trata de vivir en un departamento y trabajar en otro la perspectiva puede cambiar. De los 11 diputados mencionados en esta nota –entre los que tienen peores registros y los que disminuyeron su asistencia en 2019- siete son del interior del país (Cardoso, Aristimuño, Verri, Arrieta, Amarilla, Peña y Montaner) y muchos utilizaron la distancia para justificar alguna de sus faltas. 

El senador, Germán Coutinho, que es de Salto, también argumentó en ese sentido. “Tendré que evaluar si fue una buena decisión o no el haber optado no asistir por razones familiares, políticas y vivir a 500 km del lugar donde trabajo”, dijo en referencia a los llamados extraordinarios que permiten poca previsión. Además, reconoció que en 2015, cuando peleó por la reeleción en la Intendencia de Salto y tuvo algunos problemas personales, concentró muchas faltas. 

Por su parte los diputados Amarilla, Peña y el oficialista Federico Ruiz señalaron como un justificante que son representantes de su departamento y tienen que trabajar en su localidad. 

“Las inasistencias de los legisladores -en general, y sobre todo los del interior- no significan necesariamente que uno no realice su tarea, sino que - en mi caso particular- se priorizan otro tipo de acciones, como por ejemplo reuniones con ministros, directores de entes, inversionistas, etc., que son también parte del trabajo de un representante nacional”, señaló Ruiz. 

Cuando un legislador realiza los trámites con el debido tiempo y se puede convocar al suplente en un plenario no computa como una falta. A diferencia de las comisiones parlamentarias, la asistencia de la gran mayoría de los legisladores es cercana al 100% cuando se trata de plenarios.