AFP

Putin, Xi y los límites de la amistad

La guerra en Ucrania que Rusia está perdiendo también es un importante revés estratégico para China

Tiempo de lectura: -'

22 de septiembre de 2022 a las 16:00

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 3 45 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 3 45 / mes

El 4 de febrero de este año — tres semanas antes de la invasión rusa de Ucrania — Vladimir Putin se reunió con Xi Jinping en Beijing. Una declaración conjunta de ambos líderes anunció que la amistad entre Rusia y China "no tiene límites".

Siete meses después, quizás Xi se arrepiente de esas palabras. En su intervención ante una reunión del Consejo de Cooperación de Shanghái en Uzbekistán, Putin prometió abordar las "preguntas y preocupaciones" que tiene China sobre la guerra de Ucrania.

Ni Putin ni Xi decidieron profundizar en esas preocupaciones en público. Pero no es difícil adivinarlas. La guerra ha debilitado a Rusia, ha desestabilizado a Eurasia y ha reforzado la alianza occidental. Nada de eso luce bien, según lo ve Beijing.

La declaración del 4 de febrero dejó claro que la base de la amistad ruso-china es la hostilidad compartida hacia el liderazgo global estadounidense. Una rápida victoria rusa en Ucrania — apenas unos meses después de la caótica retirada de EEUU de Afganistán — habría representado otro duro golpe para el prestigio y el poder de EEUU. Eso le habría venido bien a Beijing, e incluso podría haber preparado el terreno para un ataque chino a Taiwán.

Por el contrario, un conflicto prolongado en Ucrania — y la perspectiva de una derrota rusa — es un serio revés estratégico para China. Como dice Nigel Gould-Davies, del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos: "Hay muchísimas razones para que China esté muy descontenta".

La más evidente es que Rusia es el socio internacional más importante de China. Los dos países no son aliados formales de tratados. Pero se apoyan mutuamente en los foros internacionales y realizan ejercicios militares conjuntos. La primera visita al extranjero que realizó Xi tras convertirse en presidente fue a Moscú. Xi se ha referido a Putin como su "mejor amigo". Pero ahora su amigo parece un perdedor. Y la amistad de China con Rusia parece una vergüenza, no una ventaja.

Además de debilitar al socio internacional más importante de China, la guerra en Ucrania ha provocado un resurgimiento de la alianza occidental. El liderazgo de EEUU vuelve a parecer confiado y eficaz. Las armas estadounidenses han contribuido a cambiar el curso del conflicto. Nuevos países están haciendo cola para unirse a la alianza de la OTAN. A los medios de comunicación estatales chinos les encanta subrayar el inexorable declive de Occidente. Pero, de repente, la alianza occidental parece tener renovados bríos.

Beijing podría al menos consolarse con el hecho de que el "sur global" parecía ser neutral, y a veces incluso tácitamente pro-ruso en este conflicto. Esto es importante porque la lucha por la lealtad de los países de África, Asia y las Américas es una parte importante de la rivalidad de China con EEUU.

Pero la opinión en el sur global está cambiando. En la cumbre de Samarcanda, Narendra Modi, el primer ministro indio, reprendió públicamente a Putin diciéndole que "la época actual no es de guerra". El líder ruso se vio reducido a prometer que: "Haremos todo lo posible para detener esto lo antes posible". La semana pasada, en la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), India se unió a otros 100 países para votar a favor de que Volodymyr Zelenskyy, presidente de Ucrania, pronunciara un discurso virtual. Sólo seis países se unieron a Rusia para oponerse al discurso. China se abstuvo.

Tanto en el país como en el extranjero, a Xi le gusta subrayar su deseo de estabilidad. Pero la guerra ha avivado la inestabilidad en toda Eurasia. Azerbaiyán acaba de atacar a Armenia, que es aliada de Rusia. También han estallado combates entre Kirguistán y Tayikistán.

Una Rusia seriamente debilitada y avergonzada es ya un socio mucho menos útil para China. Y los resultados de la guerra siguen desarrollándose. La mayor pesadilla para Beijing sería que Putin cayera y fuera sustituido por un gobierno prooccidental, lo cual es improbable, pero no imposible.

Por supuesto, la debilidad de Rusia también le aporta algunos beneficios a China. Moscú depende cada vez más económicamente de Beijing. Recientemente, Putin hizo una sombría referencia a la actitud extremadamente exigente de China en las negociaciones comerciales.

Algunos analistas de Washington van incluso más allá, alegando que la guerra de Ucrania llevará a Moscú a los brazos de Beijing de forma permanente, al tiempo que distrae a EEUU de enfocarse exclusivamente en hacerle frente a China.

Esta escuela de pensamiento sostiene que un punto de inflexión crucial en la guerra fría fue la apertura Nixon-Kissinger a China de 1971. Ahora temen que esté ocurriendo lo contrario y se esté endureciendo el eje China-Rusia.

Pero este argumento trata a las grandes potencias como piezas sin valores fundamentales en un tablero de ajedrez estratégico.

La realidad es que Rusia y China han formado una alianza informal porque sus visiones del mundo tienen mucho en común. Es inverosímil que una de ellas se despegue y decida alinearse con EEUU. EEUU es el problema que intentan resolver.

El eje ruso-chino presentado el 4 de febrero fue también, en gran medida, un acuerdo personal entre dos líderes autoritarios. Está claro que a Putin y Xi les gustaban sus estilos mutuamente y se veían a sí mismos como la encarnación de sus respectivas naciones. Eran, según las palabras de Alexander Gabuev, del Centro Carnegie de Moscú, "el zar y el emperador".

Pero ahora que Putin se parece más a Nicolás II que a Pedro el Grande, Xi debe estar arrepintiendo de haber acogido a su homólogo ruso tan incondicionalmente.

CONTENIDO EXCLUSIVO Member

Esta nota es exclusiva para suscriptores.

Accedé ahora y sin límites a toda la información.

¿Ya sos suscriptor?
iniciá sesión aquí

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Accedé ahora y sin límites a toda la información.

Registrate gratis y seguí navegando.