Considerando el impacto por la llegada de las cuadrillas kosher y que hay una mínima oferta disponible de ganados de campo, los precios del ganado gordo mostraron un leve repunte esta semana.
Aunque los equipos israelíes se encuentran operando en pocas plantas industriales, hay una colocación más fluida para el novillo especial, que cotiza entre US$ 3,20 y US$ 3,25 por kilo en cuarta balanza, con negocios puntuales que superan esa referencia, en lotes de volumen y óptima calidad.
La vaca gorda sigue siendo la más pedida por la industria, con negocios que se concretan entre US$ 3,10 y US$ 3,15 por kilo, y la vaquillona –muy demandada– se mueve en el eje de los US$ 3,20.
“Veo muy estabilizado el mercado”, señaló Gonzalo Bia, de Rodeos Negocios Rurales. Aunque no sean muchas las plantas en las que están presentes las cuadrillas kosher, eso “marca la diferencia para el novillo pesado”, apuntó el consignatario.
La disminución de la oferta de ganado se acentúa en la medida que pasan los días. La faena de ganado de corral con destino a Cuota 481 se encuentra en sus últimos días, se indicó.
En el mercado internacional comienza una paulatina reactivación del mercado europeo y en la primera semana de junio Estados Unidos superó a China como comprador de carne uruguaya, algo que hacía mucho no pasaba.
En este escenario la industria mantiene una demanda sostenida. La semana pasada la faena subió 8% frente a la semana anterior. Al 6 de junio sumó 42.090 vacunos, 8% menos que las 45.502 cabezas de igual semana del año pasado. El mayor aumento fue en la faena de vacas, que totalizó 15.213 cabezas.
De mantenerse la faena similar a los niveles actuales y posiblemente con una mayor dificultad para acceder a los ganados, el precio del gordo podría mostrar otro repunte en los próximos días, estimó Bia.
La poca oferta de ganado “va a presionar”, insistió. “No hay ganado, es muy poca la retención”, sostuvo. Todas las condiciones están para que suba, consideró, salvo que baje fuerte la faena.
En el mercado de reposición se consolida un gradual ajuste de valores. En la primera jornada de remate de Plaza Rural, esta semana, el ternero promedió US$ 2,15, por debajo de los US$ 2,19 del remate de mayo y lejos abajo de los US$ 2,46 registrados en mismo mes del año pasado. Con muy buena demanda, la colocación fue 92% en esta categoría.
Mientras, se habla de una posible reactivación de Turquía para las compras de ganado vivo, aunque no está claro cuándo.
En lanares, el mercado no registra mayores movimientos. Hay poca oferta, propio de la época. Con valores estables, los negocios se mueven en el eje de las referencias de Asociación de Consignatarios de Ganado (ACG): el cordero pesado en US$ 3,50, el liviano y los borregos en US$ 3,42, los capones en US$ 3,10 y las ovejas en el eje de US$ 3. La faena sigue con altibajos. En la semana cerrada el 6 de mayo se faenaron 7.542 ovinos, muy arriba de los 4.726 de la semana previa y el doble que en igual semana de 2019.
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