Secundaria pide cada año la destitución de cinco docentes por acoso aunque recibe “muy pocas” denuncias formales

Cada año el CES solicita la destitución de cuatro o cinco docentes al Consejo Directivo Central (Codicen), a quien le corresponde la medida por ser la autoridad máxima de la Administración Nacional de Educación Pública.

“Si tomamos que todos los días se reciben 270.000 adolescentes en los salones de clase, en realidad son muy pocas las denuncias que recibimos”, declaró.

El jerarca explicó que las instituciones cuentan con protocolos establecidos para abordar el tema. Es por esto que alentó tanto a víctimas como a familiares a acercarse a sus liceos y al personal de referencia para iniciar el proceso administrativo y jurídico.

“Secundaria se toma muy en serio las denuncias y las investiga todas”, afirmó, “por más que parezca que no son reales, se las investiga, porque toda la literatura dice que lo peor que puede hacer una institución es poner en duda lo que dice el adolescente”.

Rivero reconoció que el proceso “puede durar mucho tiempo”, extendiéndose incluso hasta seis meses en los casos más complejos. No obstante, señaló que se toman medidas inmediatas como evitar el contacto entre denunciante y denunciado.

En este sentido se expresó el presidente de la Federación Nacional de Profesores de Enseñanza Secundaria (Fenapes), José Olivera quien dijo a El Observador: “No podemos desconocer que se han dado sumarios con demoras que a veces son injustificadas y que son más un problema para el propio denunciante”. El sindicalista considero que los mecanismos formales “no están dando respuesta adecuada a esta situación que estaba escondida”.

Fenapes emitió el martes un comunicado anunciando que pondrá a disposición su equipo jurídico para que “todas las compañeras y los compañeros puedan realizar las denuncias correspondientes y reciban el acompañamiento necesario”.

Olivera adelantó que hay dos abogados laboralistas dedicados a definir en los próximos días las contrataciones para conformar un grupo dedicado al acompañamiento de las situaciones. El dirigente contó que será de carácter multidisciplinario y tendrá “no menos de dos integrantes” para dar apoyatura al equipo jurídico ya existente.

Declaró que “la preocupación central son las víctimas”. “Cuando se trate incluso de sindicalizados, tenemos un protocolo que lo primero que dispone es no asesorar jurídicamente al denunciado, incluso llegándose a la posibilidad de su expulsión del sindicato”, manifestó.

Fenómeno "reciente"

Para los casos en que la problemática es entre estudiantes -desde bullying hasta acoso- Secundaria apunta a resolver conflictos “con medidas educativas”. Cuenta para ello con el Departamento Integral del Estudiante, constituido por psicólogos, trabajadores sociales y otros técnicos para acompañar la situación.

La vía no alcanza, no obstante, a aquellos casos que acaben tratados por la justicia penal.

Consultado sobre aquellas denuncias en redes sociales que -sin señalar con nombre y apellido- describen quién es el denunciado y en qué liceo se encuentra, el consejero contó que “la administración siempre puede investigar de oficio”. Sin embargo, debe contar para ello con “elementos identificatorios claros”.

Rivero consideró que el fenómeno aún es “reciente”, por lo que el tema todavía no ha sido tratado por las autoridades a nivel orgánico.

La campaña a través de las redes sociales se suma a las desarrolladas por personas vinculadas a las facultades de Derecho y Medicina. También tomó fuerza a través de Instagram la cuenta VaronesCarnaval, que en más de 200 publicaciones en la última semana hizo de público conocimiento -a tarvés de denuncias anónimas- hechos de abuso y acoso en el ámbito del carnaval.