Sindicatos de Ancap realizan paro nacional y denuncian inseguridad en Minas y Paysandú
La medida es en contra de la "política privatizadora de la coalición de gobierno"
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20 de junio de 2022 a las 17:49
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La Coordinadora de Sindicatos de Ancap (que nuclea a 12 gremios) realizará un paro general nacional este martes contra la “política privatizadora de la coalición del gobierno” que afecta a la empresa pública y sus compañías colaterales.
Además, el Sunca (sindicato de la construcción) y la Federación Ancap (ambos pertenecientes a la coordinadora) emitieron un comunicado en el que expresaron la “enorme preocupación por los hechos que vienen ocurriendo en las plantas de pórtland de Minas y Paysandú”. Mencionaron inseguridad en las plantas por el ingreso de personas que no forman parte de la plantilla laboral y que, según la coordinadora, han hurtado y saboteado equipos.
El director nacionalista de Ancap, Richard Charamelo, denunció el pasado viernes que hubo “sabotaje” en instalaciones de la planta de pórtland ubicada en Minas.
El jerarca explicó a El Observador que se encontraron “restos extraños” en el molino de pasta, como piedras, aceite y zunchos, que fueron colocados con el objetivo de “degastar” y “romper” la cinta o rodillo de esta maquinaria. La presencia de estos desperdicios se constató cuando se estaba poniendo en funcionamiento la maquinaria -había estado detenida en días previos- y se empezaron a escuchar ruidos que no son habituales. El ente inició una investigación interna tras recibir el informe de los técnicos de la planta para identificar a los responsables. Además presentó denuncia ante Fiscalía el miércoles 15 de junio.
Los gremios denunciaron que hay falta de personal, presupuesto y malas gestiones que se hacen sentir en la continuidad productiva y que generan, además, que los funcionarios trabajen “meses sin descanso, con jornadas que superan largamente las 8 horas, llegando a las 12 o 14 horas diarias”.
Ante esos hechos, la coordinadora exigió a las autoridades que “dejen de sembrar desconfianza sobre los trabajadores y se hagan cargo de las decisiones que toman recortando presupuesto hasta el límite de la asfixia, con consecuencias operativas y de seguridad”.
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