El gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, hizo hincapié en que la reciente escalada de violencia en Rosario es el resultado directo de la presión ejercida sobre las organizaciones criminales que operan en el narcotráfico. Enfatizó que estas organizaciones, al sentirse acorraladas, están recurriendo a tácticas extremas que generan un clima de terrorismo urbano en la ciudad.
Para hacer frente a esta situación, Pullaro anunció la llegada de fuerzas federales y del Ejército a la zona. Además, informó sobre la llegada de un equipo especializado de las Fuerzas Federales para investigar el lavado de activos relacionado con el narcotráfico, con especial énfasis en la implicación de empresarios en estas actividades ilegales.
El gobernador destacó la gravedad de las amenazas recibidas por funcionarios en los últimos días, calificándolas como ataques terroristas destinados a perturbar la sociedad. En cuanto a las medidas dentro del servicio penitenciario, afirmó que se mantendrán estrictas para evitar la organización delictiva desde las cárceles.
En cuanto a la investigación de los recientes crímenes en Rosario, Pullaro mencionó avances significativos en la identificación de los autores materiales, mientras continúan trabajando para determinar los responsables intelectuales.
También ratificó la oferta de una recompensa de $10 millones para quienes brinden información relevante sobre estos crímenes, asegurando que los culpables serán llevados ante la justicia y recibirán la máxima pena.
El gobernador de Santa Fe reafirmó las políticas en materia de población penal, destacando un cambio significativo en la gestión anterior donde, según sus palabras, prevalecían acciones violentas como asesinatos y extorsiones, así como el manejo del negocio ilegal de estupefacientes. Este cambio generó diversas reacciones en el entorno.
Según explicó Pullaro, los recientes ataques que han ocurrido se deben al intento de revertir las medidas implementadas en el servicio penitenciario.
Además, el mandatario provincial señaló que las principales organizaciones criminales se han unido para enfrentar al Estado, mostrando una unidad inusual entre bandas rivales que antes se disputaban el control territorial.
Pullaro adelantó que el objetivo es combatir tanto el narcotráfico como el narcomenudeo, delimitando las vías de entrada de drogas a la provincia y fortaleciendo el control en las fronteras aéreas y terrestres. Enfatizó la importancia de ser contundentes con aquellos que comercializan drogas, considerándolos responsables de un daño irreparable a la sociedad.
Asimismo, el gobernador sugirió que el narcotráfico podría estar vinculado a la hidrovía, mientras que el narcomenudeo es el principal generador de problemas de violencia en la región.
Con respecto a las bandas narcotraficantes, afirmó que, a pesar de su violencia, son estructuras precarias que el Estado tiene la capacidad de desmantelar.
Finalmente, hizo un llamado a no dejarse vencer por el miedo, resaltando que los funcionarios públicos tienen mucho para ofrecer al país y que es necesario enfrentar los desafíos con determinación y valentía.
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