Uruguay abre consulado "tecnológico" en Silicon Valley

"Servirá de experiencia piloto para que Uruguay inicie una nueva etapa, que hemos dado en llamar la diplomacia en la era digital", adelantó sobre la nueva oficina un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores en marzo de 2019, cuando recibió la aprobación del Departamento de Estado de los Estados Unidos para proceder con la apertura.  

Ignacio González fue el elegido para ocupar el cargo de cónsul general. Posicionar a Uruguay como país tecnológico es uno de sus principales objetivos. 

Estados Unidos es el principal destino de las exportaciones de software uruguayas. Del total, la cifra que se destina a Silicon Valley "no es significativa", apuntó el presidente de la Cámara Uruguaya de Tecnologías de la Información (CUTI), Leonardo Loureiro. Pero es el lugar donde se toman las decisiones tecnológicas: "Por eso (el consulado) tiene que estar ahí", añadió. Si la experiencia resulta exitosa, lo "ideal", dijo, sería que se replique en otras ciudades y países.

Para Loureiro, el nuevo consulado es parte de una estrategia por la que se venía insistiendo. "Necesitábamos una persona que hable en nombre del gobierno uruguayo y se levante pensando todos los días en cómo incrementar el flujo y la relación entre la tecnología uruguaya y estadounidense", apuntó. La industria espera que no solo aumenten las exportaciones a ese destino, sino que el consulado también lleve a las empresas a decidir radicarse en Uruguay. 

Cargo particular

Como cónsul enfocado en estrechar los vínculos tecnológicos entre Uruguay y Silicon Valley, la preparación de Ignacio González para el cargo fue distinta, sobre todo porque significó acercarse por primera vez al ecosistema uruguayo. "Habré ido a unas 40 empresas para conocer qué hacen, su estrategia de negocios, ver con quiénes se relacionan. Pude generar contactos con ellas y con todos los actores involucrados del ecosistema. Tuve muy buena recepción", contó González. 

Desde que se mudó a la ciudad en setiembre, 200 uruguayos vinculados al sector tecnológico se acercaron al consulado. "Estoy trabajando desde el día uno, porque la cantidad de gente que viene acá por negocios desde Uruguay es brutal", contó a El Observador. Llegan emprendedores y también empresas de software para buscar clientes, hacer negocios o hasta asistir a una conferencia. "Los uruguayos se van animando a hacer el viaje para explorar el mercado americano, para aventurarse y lanzar sus productos acá", señaló. 

Sin atajos

El consulado buscará, por un lado, conectar a los emprendedores que están en Silicon Valley con los que llegan. Para González, si bien es un destino tentador, es "muy duro" y "no tiene atajos": "La incertidumbre sobre si tu emprendimiento va a prosperar es muy grande. Los costos son altísimos tanto de vivienda como para contratar personal. Acá un ingeniero recién salido de facultad gana US$ 120.000 anuales. Hay muchos obstáculos para superar", sostuvo. 

Esta oficina ayudará a los uruguayos a buscar dónde alojarse y, si se requiere, también guiará en la búsqueda de trabajo. "Después, dependiendo de su foco, vemos qué reuniones le podemos organizar para crear un softlanding, que no es para nada fácil", señaló. 

Para eso, está conformando una lista de uruguayos con diferentes experiencias en la meca tecnológica que puedan asesorarlos, dependiendo de lo que cada uno busque. "Estimamos que hay unos 500 uruguayos en Silicon Valley", contó. 

"El contacto con uruguayos es clave para este proyecto, es conocerlos, estar cerca de ellos y ver cómo podemos acercar al país acá, y Estados Unidos a Uruguay. Para los que llegan, es importante que se conecten y sepan cuál ha sido la experiencia de quienes estuvieron antes que ellos. Es importante que se contagie en los que están allá y que sepan cuáles son las condiciones o requerimientos para venir", señaló. 

El consulado es también un espacio en el que los uruguayos pueden trabajar, tener reuniones o hacer presentaciones. "Está pensado para eso, como lugar de encuentro para uruguayos. El hecho de que puedan hacer reuniones es beneficioso para los emprendedores y publicidad para el país, porque llevan a sus clientes al consulado y se asocia con país tecnológico", acotó. 

Un punto a tener en cuenta en Silicon Valley, según González, es que "las escalas son distintas". Se habla de montos que para un uruguayo, "a golpe de vista pueden parecer "descabellados". "Acá no se habla de cientos de miles de dólares, sino de millones, decenas de millones o más". Lo clave, añadió, es "estar convencido" de lo que se busca. "Muchas veces te vas a dar contra una pared y tenés que buscarle la vuelta para seguir avanzando". 

¿Más fuga?