La popularidad de Javier Milei continúa creciendo en Israel, a pesar de que el presidente argentino tuvo que posponer la visita de Estado que tenía planeado realizar el domingo 23 de marzo a Jerusalén para reunirse con el primer ministro Benjamín Netanyahu y recibir el Premio Génesis.
El apoyo que le ha brindado Milei a Israel durante todo el desarrollo de la guerra que está llevando adelante contra el grupo terrorista Hamás, tras la masacre del 7 de octubre de 2023, hizo que el primer mandatario sea muy bien visto por la población israelí y la mayoría de los políticos locales.
"Un gran amigo de Israel"
“Milei es un gran amigo de Israel”, afirma el diputado del partido oficialista Likud y ex editor en jefe del diario Israel Hayom, Boaz Bismuth, en una conferencia con periodistas extranjeros durante una visita organizada por la Asociación de Prensa Europeo-Israelí (EIPA, por sus siglas en inglés).
En tanto, la vicecanciller israelí, Sharon Haskel, estaba muy emocionada por la llegada al país del presidente argentino, antes de que se conociera la noticia de que su viaje había sido pospuesto, porque habían pasado mucho “tiempo esperándola ya que siempre ha habido otros eventos” que habían hecho que su llegada se retrasara.
“Es un gran aliado y un hombre muy valiente. Dice la verdad tal como la ve. No teme tomar decisiones importantes para impulsar el cambio. Cree que eso es bueno para el pueblo argentino y también para la humanidad”, sostiene la funcionaria de la Cancillería israelí.
Milei tenía planeado llegar a Israel el domingo y quedarse cuatro días en el país.
c34378ad-c9c5-48f5-93e2-f8784605b7bd_16-9-discover-aspect-ratio_default_0.webp
Un premio que ningún presidente extranjero había recibido
Allí, iba a recibir el Premio Genesis, que le había otorgado la fundación homónima por su “inequívoco apoyo a Israel durante uno de los momentos más difíciles” desde su fundación en 1948.
Esta es la primera vez que un mandatario extranjero recibe este galardón, considerado como el Premio Nóbel Judío.
Durante el viaje frustrado, Milei iba a reunirse con Benjamin Netanyahu, con quien pensaba firmar un memorando de entendimiento sobre la paz y la cooperación en la lucha contra el terrorismo, y con el presidente, Isaac Herzog, durante la visita que iba a incluir una visita a la Knesset, el Parlamento israelí.
Por otra parte, el presidente argentino tenía planeado asistir a mesas redondas y encuentros con “socios comerciales” locales en busca de fortalecer los vínculos económicos que unen a ambos países desde hace casi ochenta años, que incluyen negocios vinculados con la tecnología, los alimentos e insumos militares.
“Eso es parte de cómo fortalecemos la relación. No se trata solo de gobierno a gobierno, sino también de empresa a empresa y de pueblo a pueblo. Hay mucha similitud entre el pueblo argentino y el israelí. Mantenemos una relación muy sólida y cercana y esperamos seguir colaborando juntos” concluye Haskel al opinar sobre la llegada de Milei.
Milei debió suspender la visita a Israel por la tensión política y las turbulencias económicas que está viviendo la Argentina.
Esto también lo había llevado al presidente argentino a cancelar unos días antes el viaje que tenía pensado realizar a España el 21 de marzo para recibir el premio “Escuela de Salamanca”.
Su llegada a Jerusalén se iba a dar en medio de un creciente clima de tensión interna luego de la reanudación de las hostilidades de Gaza, tras la finalización de la tregua pactada con el grupo terrorista Hamás el 1 de marzo.
Esto ha generado controversias y protestas entre la ciudadanía y los familiares de los 59 rehenes, que aún permanecen secuestrados en manos de los integristas islámicos, quienes se oponen a continuar con la guerra ya que dudan que sea la mejor forma de lograr su retorno.
A esto, se le suman los problemas legales que atraviesa Netanyahu, quien debía haber declarado ante la Justicia esta semana por diversas causas que tiene abiertas, cuando se reanudaron los bombardeos sobre Gaza, por lo que su comparecencia fue pospuesta una vez más.