El ultraderechista Partido de la Libertad (FPÖ) ha ganado las elecciones legislativas celebradas este domingo en Austria con un 29,1 por ciento, por delante del Partido Popular (ÖVP), que obtiene un 26,2 por ciento, según las primeras proyecciones realizadas a partir de encuestas.
El tercer partido sería el Partido Socialdemócrata de Austria (SPÖ), que lograría un 20,4 por ciento de votos), según el estudio de Foresight publicado por la televisión pública austriaca, ÖRF.
La cuarta posición sería para NEOS-La Nueva Austria con un 8,8 por ciento, seguido muy de cerca por Los Verdes (8,7 por ciento). Más lejos está el Partido de la Cerveza (Bier Partei, 2,1 por ciento).
El estudio estima una participación del 78,1 por ciento y un margen de error de dos puntos porcentuales. No se esperan resultados oficiales antes de las 23.00 horas.
Qué dijo Kickl tras el triunfo
El líder del partido ultraderechista austríaco FPÖ, Herbert Kickl, se mostró satisfecho con las proyecciones electorales, que apuntan a una victoria de su formación este domingo con el 29 % de los votos en las elecciones legislativas, y se postuló ya para "dirigir el Gobierno".
Kickl, que pidió esperar a los resultados finales, se mostró en unas declaraciones a la televisión pública ORF dispuesto a hablar con todos los partidos para hacer cumplir "el mandato ciudadano" de cambio.
"Los votantes han hablado", señaló Kickl, que pidió a los demás partidos y también al presidente federal, Alexander van der Bellen, "recapacitar" y asumir la petición de cambio de rumbo.
Pese a su probable victoria en las urnas, el FPÖ necesita un socio de coalición porque todas las proyecciones de votos le niegan una mayoría para gobernar en solitario.
El actual canciller federal, Karl Nehammer, del conservador Partido Popular (ÖVP), ha repetido que no gobernaría con un FPÖ dirigido por Kickl, mientras las demás formaciones, socialdemócratas, ecologistas y liberales, rechazan coaligarse con los ultras.
El presidente Van der Bellen, que tiene la potestad de encargar la formación de Gobierno, ha repetido en numerosas ocasiones sus reticencias a darle ese mandato a Kickl.
Nehammer repitió que su partidos conservador está por la estabilidad y un política de centro y que mantenía lo que había dicho antes de las elecciones, pero se negó a descartar totalmente una posible coalición con los ultras.
FUENTE: Europa Press