La tarde de ayer, la Catedral de Valencia acogió una misa funeral en memoria de las 222 víctimas mortales y los cuatro desaparecidos que dejó la DANA del pasado 29 de octubre. Los reyes Felipe VI y Letizia estuvieron, por tercera vez, cerca de los afectados
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EL PÉSAME A LOS FAMILIARES
Al finalizar la ceremonia, la reina Letizia, junto al rey Felipe VI, se acercaron a los bancos ocupados por alrededor de 400 familiares de las víctimas. Y durante 28 minutos, los monarcas ofrecieron palabras de aliento, estrecharon manos y abrazaron a muchos de los presentes, en un recorrido pausado y respetuoso.
Uno de los momentos más conmovedores lo vivió la Letizia junto a los familiares que llevaban fotografías de sus seres queridos. La monarca conversó con ellos e intentó consolarlos con su abrazo,
Algunos de los familiares destacaron la sensibilidad de la reina en su trato.
FUERA DE PROTOCOLO
La presencia de la reina Letizia fue interpretada por muchos como un gesto que iba más allá de la formalidad institucional. Su disposición para interactuar directamente con los afectados, escucharlos y ofrecerles un gesto de cercanía, reflejó un enfoque enfocado en las personas en duelo.
El recorrido de la reina entre los familiares fue pausado y deliberado, mostrando atención a cada detalle y priorizando el contacto humano en un momento donde las palabras a menudo son insuficientes.