La audaz decisión de la candidata demócrata Kamala Harris de elegir como compañero de fórmula al gobernador de Minnesota Tim Walz puso el foco también en su familia. Su mujer, Gwen Walz, una profesora de inglés que trabajó muchos años en escuelas públicas y de migrantes en el estado, ha sido una fuerte defensora del acceso equitativo a la educación y la formación en las prisiones.
El ahora aspirante a vicepresidente conoció a su esposa en Nebraska, donde ella había empezado su carrera como docente, y se casaron en 1994. Dos años después se mudaron a Minnesota, donde Gwen nació y se crió, y allí tuvieron a sus dos hijos, Hope y Gus. En ese estado crearon también una empresa con la que organizaban viajes educativos anuales a China para estudiantes.
"Gwen sabe que un sistema educativo público sólido, que abarque desde el nacimiento hasta la tercera edad, es fundamental para que todos los habitantes de Minnesota tengan éxito", señala la biografía oficial de la mujer del gobernador, que trabajó muchos años como administradora y coordinadora en escuelas públicas del área de Mankato. Allí buscó "eliminar la brecha de rendimiento y lograr una mayor equidad y acceso dentro de los sistemas educativos", añade.
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Gwen Walz en un encuentro con docentes de Minnesota
Una defensora de la educación en las cárceles
Pero además, para Gwen Walz es importante que las personas que se encuentran detenidas tengan acceso a una formación. Después de que su marido fuera elegido como gobernador de Minnesota, en enero de 2019, se dedicó a recorrer prisiones a lo largo del estado y promovió la implantación de un nuevo plan de estudios universitarios para hombres y mujeres que se encuentran tras las rejas, entre otras cosas, informó la cadena CNN.
"Gwen entiende que los correccionales deben ser un componente inclusivo de nuestro sistema educativo y que, ampliando las oportunidades, nuestro estado puede reducir drásticamente las tasas de reincidencia y, lo que es más importante, transformar vidas", dice su biografía en la página de la gobernación de Minnesota.
A su vez, en su primer evento como la mujer del gobernador defendió que los delincuentes condenados recuperen su derecho a voto una vez que cumplan su pena.
"A lo largo de su vida, Gwen ha trabajado con pasión para construir un mundo más justo y equitativo. Desde la enseñanza en prisiones y la promoción de la reforma de la justicia penal, hasta la defensa del movimiento LGBTQ, el deseo de Gwen de aprender de los demás y trabajar con ellos para impulsar un cambio significativo es su principio rector", apunta la bio oficial.