¿Qué tan lejos está Uruguay del resto de Sudamérica en salarios de futbolistas?

En Bolivia los jugadores de Real Potosí cortaron una calle en protesta por no percibir los salarios. En Venezuela los futbolistas venden los zapatos para poder subsistir en medio de un panorama social y económico muy difícil que trasciende los límites del fútbol.

La realidad de los dos países contrasta con los US$ 200 mil que ganan por mes jugadores como Paolo Guerrero (Inter), Dudú (Palmeiras) y Fred (Cruzeiro) en la poderosa liga brasileña. O con los US$ 100 mil que acordó Fernando Gago en 2017 en Boca Juniors, hasta 2020.

Entonces, mientras en Bolivia es noticia una denuncia del diario Los Tiempos donde se revela que algunos integrantes del plantel de Universitario de Sucre, de Primera división, tenían salarios de US$ 200, en Brasil se conmueven por la millonaria inversión de Flamengo por Giorgian De Arrascaeta: 15 millones de euros.

Por su parte, en Uruguay se conocen noticias de que los futbolistas de Nacional, uno de los clubes que abona los salarios más altos, pasaron hasta cinco meses sin cobrar durante 2018 como denunció el volante Luis Aguiar este año. Peñarol atravesó una situación similar hasta hace dos temporadas y Marcel Novick denunció en 2017 que le debían 12 meses de sueldo.

Por su parte, en Uruguay se conocen noticias de que los futbolistas de Nacional, uno de los clubes que abona los salarios más altos, pasaron hasta cinco meses sin cobrar durante 2018 como denunció el volante Luis Aguiar este año. Peñarol atravesó una situación similar hasta hace dos temporadas y Marcel Novick dijo que en 2017 que le debían 12 meses de sueldo.

Referí se metió en el complejo mundo de los salarios de los futbolistas para conocer quiénes son los profesionales mejores pagos de cada liga miembro de la Conmebol y qué tan lejos está el mercado uruguayo en ese contexto.

En los últimos años, el Brasileirao se potenció de forma increíble. Comenzaron repatriando a jugadores de alto nivel. Uno de los primeros que dio el paso fue Ronaldo cuando en 2009 retornó a Corinthians y así sucesivamente fueron volviendo Ronaldinho, Fred, Julio Baptista, Roberto Carlos, el holandés Seedorf, Elano, Luis Fabiano, Ganso, Alexandre Pato, Lucio, el argentino D’Alessandro y hasta Diego Forlán fue contratado por Inter para jugar un año, con un contrato anual de US$ 3.000.000, en 2015. Al año siguiente jugaría en Japón por el doble de salario.
De hecho, muchos entienden que los equipos han contratado tantas figuras que el torneo está al nivel de las mejores ligas europeas. El dinero que mueve el Brasileirao permite a los equipos mantener a sus principales figuras.

Entre los jugadores que mejores salarios reciben figura, Dudú (Palmeiras). El citado jugador pidió un aumento salarial en el club a cambio de rechazar una oferta de 4.000.000 de euros anuales de un club chino. Informaron medios brasileños que pasó a ganar más de US$ 200 mil mensuales.

El peruano Paolo Guerrero tenía uno de los salarios más altos con US$ 280 mil mensuales, suma que al año asciende a US$ 3,4 millones.

Boca inversiones

Los jugadores argentinos también se cotizaron en materia de salarios. Si bien su liga no tiene la misma promoción que la brasileña, producto de las malas decisiones dirigenciales de los últimos tiempos, algunos jugadores tiene altas cotizaciones.

Hasta hace poco el jugador mejor pago de la vecina orilla era el volante de Boca, Fernando Gago.

En marzo el volante renovó su contrato con los xeneizes hasta el año 2020. Su cláusula de rescisión es superior a los US$ 10 millones.

Sin embargo, hay otros jugadores bien cotizados y curiosamente todos militan en Boca ya que River apeló a la cantera que a incorporar.

Carlos Tévez, Cristian Pavón, Darío Benedetto y el citado Gago, cobran salarios que llegan hasta US$ 1.200.000 al año.

Para Tévez, estas cifras están muy lejos de los US$ 730.000 mensuales (US$ 8,7 millones anuales)que recibía en China.
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Bolivia: hasta US$ 25.000

Esta realidad contrasta con lo que se vive en el fútbol boliviano. Según un informe del diario Los Tiempos, el secretario general de Futbolistas a Agremiados de Bolivia (Fabol) David Paniagua, manifestó que en la liga hay contratos de hasta US$ 25.000 mensuales, pero son muy pocos los deportistas que lo perciben.

“En Bolivia el promedio no llega a ser US$ 3.000 mensuales, pero es muy desequilibrado, el 10% gana más que el otro 90%”, manifestó. Además aseguró que incluso se detectaron sueldos desde US$ 150, casi la mitad de un salario mínimo.

El presidente del club Aurora señaló a principios del año pasado, que la planilla del primer equipo sería de US$ 50.000, tomando en cuenta la crisis económica que arrastran desde hace un tiempo. Dividir ese monto entre los casi 30 jugadores con los que cuenta da un promedio de algo más de US$ 1.600. 

Aurora terminó undécimo en un torneo de 14, el último año.

En julio de 2013 figuraba el uruguayo William Ferreira entre los que más ganaba. Percibía US$ 17.000 por mes.

El costo de repatriar en Chile y Colombia

Colo Colo inició una movida para repatriar a un jugador líder como el volante Jorge Valdivia. Un exquisito del fútbol que deslumbró jugando en Palmeiras.

Según reveló el diario La Tercera, Valdivia se convirtió en el jugador mejor pago del fútbol chileno con US$ 100 mil mensuales de salario. El ex volante del Palmeiras es el futbolista más caro del vestuario albo, condición que ostenta desde mediados de 2017, cuando firmó su regreso al Monumental.

Detrás de Valdivia se encuentra el argentino nacionalizado paraguayo, Lucas Barrios que, por defender a Colo Colo, cobraba US$ 77.000 mensuales.

Dentro de ese entorno está la cifra que gana el seleccionado Jean Beausejour que defiende a Universidad de Chile.

En el fútbol colombiano también se dio un hecho como en el chileno donde Junior repatrió a Teo Gutiérrez con la finalidad de terminar con los años de sequía deportiva.

Teo fue contratado a cambio de un salario mensual de US$ 70.000, lo que le convirtió en el jugador mejor pago de la liga Postobón.

Un gusto caro

En Ecuador el que rompió la alcancía fue Barcelona que, para la temporada 2018, fue en procura de Michael Arroyo con la finalidad de reforzar el equipo de cara al torneo local y la Copa Sudamericana.

Arroyo abandonó Gremio de Porto Alegre a cambio de un salario de US$ 50.000 mensuales (US$ 600.000 anuales).

Michael Arroyo fue campeón con Barcelona en la temporada 2012, y luego emigró para jugar en Atlante y América de México, y Gremio de Brasil que adquirió su ficha.

El club del presidente

En el mercado paraguayo se da la particularidad que no son los clubes grandes los que tienen al jugador mejor pago de la liga sino que es Libertad, una institución saneada y fuerte desde el punto de vista económico, y que en los últimos años se consolidó como uno de los poderosos de su país.

Libertad es el club del expresidente de Paraguay, Horario Cartes, y cuenta en sus filas con el delantero de la selección Oscar “Tacuara” Cardozo que es el jugador mejor pago de la liga.

Tacuara percibe un salario de US$ 100.000 mensuales (US$ 1.200.000 por año).

Entre el delantero y los siguientes mejor pago hay un escalón enorme y baja a la mitad de los ingresos. Según pudo saber Referí, los que ganan más en los equipos grandes, son 10 o 12 jugadores por equipo, que perciben un salario anual de US$ 500.000 a US$ 600.000.

En Paraguay se plantea una situación similar a la de Uruguay, con equipos grandes y poderosos que pagan muy bien para el mercado local y equipos chicos que abonan salarios bajos y una brecha grande entre los jugadores que defienden a unos y a otros.

Mercado con carencias

Unos de los jugadores que se ganó un lugar y elevó considerablemente su cotización en el mercado peruano es el uruguayo Jorge Cazulo que el año pasado se coronó campeón de liga con Sporting Cristal.

Sin embargo, el jugador mejor pago de la liga peruana es su compañero de equipo el argentino Emannuel Herrera, goleador del torneo 2018 que cobra US$ 30.000 mensuales (US$ 360.000 al año).

El otro grande de Perú, Universitario de Deportes, abona salarios de entre US$ 20.000 y US$ 22.000 mensuales a los seleccionados Alberto Rodríguez y Juan Manuel Vargas.

La especial Venezuela

El fútbol venezolano se encuentra inmerso dentro de la compleja realidad que vive el país. Como consecuencia de la problemática situación, la exportación de futbolistas venezolanos es cada día más numerosa.

Liga venezolana es considerada como la última del ranking del continente. Los salarios son bajos y al cambio en divisas, debido a la pérdida de valor de la moneda, hacen que el contingente jugadores que claman por irse se multiplique.

Un informe del diario El Nacional reveló que “cuando en algunos países los jóvenes luchan por pertenecer a un equipo profesional para disfrutar de los beneficios de ser deportista profesional, en Venezuela algunos de ellos están ganando US$ 11, menos que el salario mínimo del país”.

¿Y por casa cómo andamos?

Durante mucho tiempo se afirmó que el uruguayo es un fútbol pobre. Su realidad tiene puntos de contacto con otros mercados del continente. Con Paraguay, por ejemplo, por las diferencias entre los salarios que pagan los clubes grandes, muy elevados, y los equipos chicos que tienen apenas compromisos contractuales por encima del salario mínimo. O con Chile y Colombia, que repatrian a sus viejas figuras con salarios muy elevadas para el mercado local.

Para asegurarse un mínimo en el cobro de los salarios de los jugadores profesionales, la Mutual de Futbolistas tiene un convenio con la Asociación Uruguaya de Fútbol a través del cual se asegura que los clubes no paguen por debajo de determinados niveles.

El mínimo vigente desde el 1° de agosto de 2018 hasta el 31 de julio de 2019 es $ 40.492 (US$ 1.230) para los jugadores de Primera división y $ 20.246 (US$ 615) para los de Segunda División Profesional.

Según pudo conocer Referí, en la temporada 2018, Nacional tenía ocho contratos de US$ 500.000 anuales, incluidos los impuestos, o por encima de ese valor. Seis de ellos (Tabaré Viudez, Álvaro González, Gonzalo Bergessio, Alexis Rolín, Luis Aguiar, Santiago Romero), culminaron el 31 de diciembre y no fueron renovados. Los únicos que siguen vigentes son los de Esteban Conde y Gonzalo “Chory” Castro. El mejor pago del plantel de Nacional y uno de los mejores del fútbol uruguayo es Castro, su vínculo se extiende hasta diciembre de 2020 y percibe US$ 672 mil anuales, lo que equivale a US$ 56 mil por mes. 

La realidad salarial de Peñarol no dista mucho de la de Nacional. Tanto es así que hasta 2018, el jugador mejor pago del mercado uruguayo era aurinegro, el argentino Maximiliano Rodríguez que llegó en julio de 2017 con un salario mensual de US$ 65.000 (anualmente US$ 780.000). Ese contrato se ajustó en el segundo semestre del año pasado y este año el jugador regresó a su país. El jugador mejor pago hoy es Cebolla Rodríguez, con US$ 700.000 anuales.

Para este 2019, Nacional intenta bajar 30% el presupuesto del plantel principal.

El tope salarial de Defensor Sporting es de US$ 12.000 mensuales más impuestos (US$ 15.000), que al año se transforman en un contrato de US$ 180.000. Solo dos jugadores del equipo reciben esos ingresos, la reciente incorporación Álvaro González y el zaguero Nicolás “Coto” Correa.