Ciudadanos molesto con Laura Raffo por rol asumido tras elección

Pese a la derrota, las proyecciones decían que la economista había alcanzado el 40% de los votos, superado la experiencia del Partido de la Concertación en 2015 y ubicado como la persona más votada en la capital.

Pero su corta intervención, en la que ratificó su “compromiso” con Montevideo y anunció que todo había sido “solo el comienzo” de una carrera política, también dejó un gusto agridulce en algunos dirigentes de la coalición que apoyó su candidatura a la Intendencia.

Según fuentes políticas, en el sector Ciudadanos del Partido Colorado hubo  “malestar” por el tono “personalista” de Raffo en su discurso del domingo –“los invito a acompañarme”, dijo sobre el final–, así como el que dio dos días después rodeada de ediles, alcaldes y concejales electos por la coalición multicolor, y en el que se mostró como líder del bloque opositor en Montevideo.

Los colorados recibieron con disgusto que, apenas conocidos los resultados, la economista centrara sus palabras en su experiencia personal de campaña y su futuro, y no en los socios que la rodearon. El martes, luego de que la candidata dijera que los partidos de oposición debían actuar “como una coalición”, los dirigentes de Ciudadanos sintieron la necesidad de remarcar que una vez pasada la elección, la relación pasaba a ser de “socios” y que cada uno debía asumir su “propio perfil”.

Así se lo transmitieron a Raffo y a dirigentes blancos en conversaciones informales, según contaron a El Observador diversas fuentes de la coalición. Además fue considerado durante una reunión entre dirigentes montevideanos de los partidos.

Los integrantes del sector fundado por Ernesto Talvi –y al que pertenece el abogado Andrés Ojeda, primer suplente de Raffo en la elección departamental– insistieron en que si bien ven con buenos ojos la conformación de un grupo de trabajo común y la coordinación de toda la oposición, las bancadas deben ser “independientes” y no estar bajo el paraguas de un liderazgo nacionalista como el de Raffo.

Si bien la molestia no adquirió mayores proporciones, y se limitó a un par de intercambios y charlas telefónicas, se suma a la visión de varios dirigentes de que el apoyo a la candidatura única permitió un crecimiento de los blancos en Montevideo, que pasaron de cuatro a ocho ediles. Eso ya había sido percibido por los colorados al momento de acompañar la candidatura común y fue ratificado en el correr de una campaña que tuvo a la Lista 1 del Partido Nacional como el apalancador de votos detrás de la candidata. 

Los colorados, en tanto, pasaron en Montevideo de 15 mil votos en 2015 a 92 mil sufragios este domingo. En la anterior elección, el partido no obtuvo ningún edil aunque en el correr del período varios de los ediles obtenidos por Edgardo Novick terminaron respondiendo a la colectividad de Fructuoso Rivera.

La molestia con el discurso de Raffo, sin embargo, no estuvo arriba de la mesa en instancias orgánicas del Partido Colorado. 

El lunes siguiente a la elección, el Comité Ejecutivo Departamental del Partido Colorado expresó estar “satisfecho” con el “desempeño electoral” del partido en la capital y destacó el “gran desempeño” de Laura Raffo como candidata única de la coalición”. 

En la declaración, los colorados señalaron que “la votación del domingo constituye un gran avance” frente a los resultados de 2015 y señala que “los votos del Partido Colorado fueron determinantes” para el triunfo en los municipios E, CH y F, que tendrán alcaldes nacionalistas en la zona este y noreste de la ciudad. 

Lo nacional con críticas a blancos y Talvi

El diagnóstico político sobre la elección en Montevideo se suma también a los claroscuros del desempeño del Partido Colorado en el resto del país. Contando todos los departamentos, los colorados obtuvieron casi 50 mil votos más que en 2015 pero 80 mil menos que en octubre de 2019. Respecto a las departamentales anteriores, Cerro Largo (-66%), Salto (-54%) y Artigas (-52%) marcaron las principales caídas del partido en estas elecciones. 

En Salto estuvo la principal decepción. El senador y candidato Germán Coutinho no logró captar a los votantes que lo habían puesto en el sillón municipal en 2010 y quedó muy lejos tanto del ganador, Andrés Lima (Frente Amplio), como del segundo, Carlos Albisu (Partido Nacional). Antes y después de la elección, el secretario general del Partido Colorado, Julio María Sanguinetti, advirtió la falta de “inteligencia” de la coalición para arrebatarle el gobierno al Frente Amplio en el departamento. Si bien blancos y colorados juntos sumaron más que Lima, la falta de acuerdo para concurrir bajo un mismo lema inclinó la balanza a favor de la reelección del frenteamplista. 

Tras los resultados del domingo, Sanguinetti sostuvo que “el gobierno actuó con parcialidad” en las elecciones departamentales y dijo que en Salto “pasaron una serie de cosas que no fueron las deseadas”. También volvió a insistir en que el gobierno nacional “no es blanco sino multicolor”.

En paralelo a las críticas hacia el Partido Nacional, en el sector Ciudadanos fundado por Ernesto Talvi sintieron los efectos del abandono de su líder. 

En Canelones, tierra del ministro Adrián Peña –hoy referente principal de la agrupación–, el que se impuso fue el sector Batllistas liderado por Sanguinetti. El departamento canario fue uno de los que presentó la mayor caída de los colorados en comparación con 2015 (-43%).

Desde el sector Batllistas, el diputado Conrado Rodríguez vio con mayor optimismo los resultados del domingo. En su cuenta de Facebook, destacó que “a pesar de la polarización” en varios departamentos, el Partido Colorado pasó de 55 ediles en 2015 a 61 en 2020, un aumento del 10%.