Diego Vila

Crece el consumo de helado y el negocio de las heladerías se vuelve atractivo

La mayor demanda de helados de los uruguayos impulsa al mercado, convierte a esos comercios en un negocio anual rentable y aparecen nuevos jugadores

Tiempo de lectura: -'

14 de enero de 2022 a las 05:04

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 3 45 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 3 45 / mes

Frente a la ola de calor que invade Uruguay, los consumidores colman las heladerías y mueven un mercado que hasta hace un par de meses tenía escasa demanda. Este negocio es zafral y consigue –como es habitual– su pico de ventas en los meses de verano. 

Sin embargo, la tendencia de consumo a nivel mundial ha cambiado y ha convertido a las heladerías en un negocio anual. Aunque los uruguayos no mantienen un mismo nivel de demanda durante las cuatro estaciones del año, sí compran helados y empujan a que las heladerías se mantengan abiertas. 

“Es muy grande el salto de ventas entre invierno y verano”, aseguró la gerenta general de La Cigale, Magdalena Lorenzo. Pero igual, las compras alcanzan para mantener las 17 sucursales de la zona metropolitana abiertas. La única que se ubica en un balneario –Atlántida– cierra luego de la temporada.

La Cigale es una empresa familiar. Fue fundada en el año 1959 por la familia Urrutia con un único local ubicado en la calle Joaquín Requena, en el barrio Cordón. En el año 1969 fue adquirida por la familia Lorenzo, que convirtió a La Cigale en una heladería líder en el país. En la década de 1970, comenzó un camino de crecimiento dentro de un mercado competitivo. “Desarrollamos un negocio muy fuerte con una red de sucursales manteniendo la calidad de la producción artesanal con materias primas naturales”, dijo Lorenzo a Café & Negocios. 

Esto los diferenció hasta que empresas extranjeras llegaron a Uruguay con una propuesta similar. Freddo se instaló en el país hace más de 20 años, posicionándose como una heladería premium, donde se vende el gelato tradicional de Italia. Con 19 sucursales, la marca vende un promedio de 475 mil kg de helado al año (25 mil kg por sucursal). 

“El consumo por parte de los uruguayos es alto. Está por encima de la media de los otros mercados a nivel regional”, indicó el presidente de Freddo, Raúl Mandía.

Chelato, ingresó como competidor en 2014. Su faro para crecer como compañía fue la innovación en sabores raros, que le dieron fama. Actualmente tiene 31 locales distribuidos por todo el territorio nacional, con un ingreso promedio aproximado a US$ 17.900 mensuales. Cada año crece en diez comercios, aproximadamente.

Cada vez más jugadores

“El helado es un producto que tiene un margen bueno y razonable por lo que siempre hay gente interesada en entrar al negocio”, indicó Mandía. De hecho, en Uruguay han entrado varias cadenas en los últimos años.

La argentina Lucciano´s llegó a Uruguay hace menos de un año con un local en Montevideo y otro en Punta del Este. Aunque aún no hacen una evaluación del funcionamiento de las tiendas –lo harán al cabo de un año de trabajo–, su dueño, Christian Otero, dijo a Café & Negocios que creen que el nivel de ventas va a ser alto porque llegan con una propuesta de helados artesanales que los posiciona bien. 

En Montevideo esperan que las ventas se mantengan en el mismo nivel durante todo el año, una realidad similar a lo que viven en Buenos Aires. En Punta del Este, creen que las ventas van a estar en auge durante la temporada y luego bajarán, como en los balnearios argentinos. Para Mandía, “el mercado de las heladerías es competitivo pero sano, lo que da lugar para nuevos jugadores”. Siempre que ingresa un nuevo competidor impacta en el negocio, pero aún hay espacio para convivir.

Posicionarse en un mercado competitivo

Estar en un mercado con muchos competidores obliga a cada empresa a mantenerse aggiornada; innovando constantemente en sabores y otras propuestas. Según Mandía, Freddo es una heladería caracterizada por lanzar sabores nuevos continuamente. “Viajamos a Italia para ver cómo se está moviendo la cuna del gelato y traemos fórmulas nuevas, adaptándolas al mercado local”, aseguró. Además, agregó que “todos los sabores nuevos que incorporamos tienen una muy buena aceptación del público”. 

De igual modo que es importante pensar en los sabores que ofrece la heladería, también es esencial entender cómo llegar a los clientes. Para hacer el consumo más accesible, La Cigale incursionó en la venta de sus productos –helados artesanales– en centros como supermercados o minimercados. Además de los distintos puntos de venta, otra estrategia clave para el negocio fue la incorporación del delivery. 

“Las heladerías generan el principal ingreso de la empresa, pero esto no quiere decir que los otros canales no rindan”, aseguró Lorenzo. Son medios de venta en pleno crecimiento. Freddo lanzó su línea de productos preempacados hace dos años bajo la premisa. “El helado es un producto de consumo por impulso. Si tengo cerca un producto de calidad, lo consumo más”, explicó Mandía. 

La apuesta por el Este

Los balnearios esteños son codiciados durante la temporada de verano, zafra imprescindible para las heladerías. Por esto, la mayoría de las empresas optan por colocar al menos una sucursal allí. Freddo cuenta con 11 locales ubicados entre Portezuelo y José Ignacio con grandes ingresos en verano. En invierno el panorama cambia, pero todas las tiendas están abiertas de forma anual. “Más allá de que en algún mes pueda no ser rentable estar abierto, las empresas que dan servicios tienen que darlo. Para que te vaya muy bien en determinado mes, es importante estar disponible para el consumidor siempre”, explicó Mandía. 

Lucciano´s abrió su tienda en Gorlero el 31 de diciembre. Habiendo pasado 15 días desde su inauguración, Otero aseguró que la heladería está teniendo una temporada muy fuerte. No cree que se mantenga todo el año, pero la propuesta es mantener el local en funcionamiento. “Punta del Este es una ciudad en crecimiento y Gorlero tiene movimiento constantemente por lo que el comercio funcionaría”, estimó. 

Por su parte, La Cigale se ha focalizado en la capital del país. Si apuestan a la temporada en el Este pero llegando a los clientes a través de la venta en tiendas de conveniencia; abasteciéndolas y logrando allí una buena exhibición de los productos. 

Por fuera de lo tradicional

Zero abrió en 2020. Nicolás Baladón lo creó luego de haber estado en el mercado con Chelato porque vio un nicho en aquellas personas que no pueden consumir un helado tradicional, por ejemplo, las personas celíacas, intolerantes a la lactosa y demás.  Zero tiene cinco sucursales ubicadas en Montevideo, Maldonado y Soriano. Sobre la que está en el este, Baladón dijo: “Nos solicitaban que estuviéramos en Punta del Este por lo que la abrimos luego de hacer algunas pruebas piloto. Funciona muy bien”. 

CONTENIDO EXCLUSIVO Member

Esta nota es exclusiva para suscriptores.

Accedé ahora y sin límites a toda la información.

¿Ya sos suscriptor?
iniciá sesión aquí

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Accedé ahora y sin límites a toda la información.

Registrate gratis y seguí navegando.