La policía detuvo en la tarde de este miércoles al sospechoso de ser el autor material del asesinato de la policía Daniela Da Silva, la agente de 31 años que murió por un disparo en el cuello el sábado 7 de marzo, informaron a El Observador fuentes del caso.
A pedido de la fiscal María de los Ángeles Camiño, este miércoles había sido imputado el presunto coautor del homicidio, un adolescente de 17 años, la misma edad del que disparó. En una audiencia que tuvo lugar en la tarde del miércoles en los juzgados de Adolescentes de Bartolomé Mitre, la Justicia decidió que el menor fuera internado en dependencias del Instituto Nacional de Inclusión Social Adolescente (Inisa), hasta que se dicte una sentencia. Este imputado, de acuerdo a la teoría de la fiscalía, fue quien condujo la moto hasta la casa de Da Silva, en cuya entrada ocurrió el asesinato.
Los jóvenes la atacaron para robarle el arma de reglamento, algo que lograron.
Da Silva nunca ofreció resistencia. También había accedido a entregarles su chaleco antibalas. Pero en cuanto empezó a sacárselo, su esposo, también policía, abrió la puerta y disparó contra los delincuentes. Fue en ese momento que quien estaba apuntando a la cabeza de la mujer gatilló su arma y le causó la herida mortal. Luego hubo un intercambio de disparos con el esposo de la víctima, hasta que huyeron.
Ambos jóvenes tienen antecedentes penales, y estaban bajo las órdenes de un narcotraficante del barrio, que les había ordenado que se "hicieran de poder de fuego propio", según indicaron las fuentes. Con esa orden, identificaron a Da Silva, y estudiaron durante días su "rutina", de modo que sabían a qué hora salía de la Embajada de Suiza, donde trabajaba como guardia, y cuándo llegaba a su casa.
En un operativo policial que se llevó a cabo este martes de mañana, se detuvo a dos menores. Entre ellos, estaba el imputado por conducir la moto, y otro que no tenía relación con este delito, pero que igualmente fue enviado al INISA como medida cautelar, acusado de cometer una rapiña y dos delitos de recepción.
Sin embargo, en los allanamientos realizados en los alrededores de Nuevo Ellauri –en los que participaron efectivos de la Guardia Republicana y del Grupo de Respuesta Táctica–, no se había encontrado al sospechoso capturado ahora. Igualmente, la policía obtuvo información sobre su ubicación.
En la investigación policial intervino la Dirección de Hechos Complejos y el departamento de investigaciones de la Zona Operacional III de Montevideo, que abarca el noreste de la capital.
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