Política > proyectos
El Gobierno analiza implementar un plan de alfabetización para mejorar los malos resultados escolares
Con la premisa de abordar la significativa carencia en la comprensión lectora, considerada uno de los principales desafíos en Argentina, el gobierno de Javier Milei está evaluando la posibilidad de lanzar un plan nacional de alfabetización que abarque a toda la población, no limitándose exclusivamente a los estudiantes escolarizados.
Los resultados de las pruebas nacionales e internacionales han generado preocupación entre las autoridades educativas, motivando a la nueva gestión liderada por la Secretaría de Educación, dependiente del Ministerio de Capital Humano, a trabajar en la ejecución de este ambicioso proyecto bajo la dirección de Carlos Torrendell.
El plan de alfabetización pretende involucrar no solo al sistema educativo convencional, sino también a organizaciones de la sociedad civil, empresas, corporaciones, clubes e incluso a los medios de comunicación. En términos de financiación, aunque el Estado nacional aportaría una partida, se busca principalmente respaldo financiero de organismos internacionales, inversiones de empresas locales y difusión a través de los medios, con espacio publicitario.
Aunque el gobierno ya ha delineado su orientación educativa en la reciente Ley Ómnibus, donde establece un examen obligatorio al concluir la escuela y la revalidación de conocimientos para los docentes cada cinco años, el plan de alfabetización surge como una iniciativa independiente de la Secretaría de Educación. Se ha informado que la secretaría está trabajando en una "fe de erratas" para realizar enmiendas en los artículos del proyecto actual.
Este plan será un tema central en la reunión del Consejo Federal de Educación programada para febrero, donde se discutirá durante dos días. Además, se prevé continuar y ampliar la entrega de libros en formato físico, y se garantizará la "libertad de métodos" en lugar de un enfoque único de alfabetización, siempre y cuando los métodos sean eficaces.
La Secretaría descarta la implementación de vouchers y la eliminación de la Educación Sexual Integral, aunque expresan la necesidad de revisar la calidad de los materiales educativos proporcionados por el Estado. También descartan la creación de rankings de escuelas y fomentar la competencia entre ellas, favoreciendo la cooperación.
En cuanto a la privatización de Educar, la sociedad del Estado responsable del Plan Nacional de Inclusión Digital Educativa, se anticipa que algunas funciones podrían mantenerse bajo la órbita estatal, preservando así un plan de educación digital. La Secretaría de Educación está evaluando la continuidad de Conectar Igualdad y los programas de distribución de dispositivos digitales, considerando la falta de evidencia suficiente sobre su impacto en el aprendizaje.
El secretario de Educación, Carlos Torrendell, ha destacado que consolidar el sistema de información educativa y avanzar con un plan de alfabetización son objetivos prioritarios. En relación con el plan de alfabetización, se planea llevarlo a cabo de manera intensiva durante dos años, con el respaldo principalmente de las universidades, buscando llegar a toda la población, incluyendo aquellos fuera de los sistemas educativos tradicionales.
En respuesta a las evaluaciones desalentadoras de los últimos tres años, se pretende abordar la correcta alfabetización en el primer ciclo de primaria dentro de la escuela, así como resolver las deficiencias en lectocomprensión y expresión escrita de aquellos que egresan del sistema educativo. Este plan surge como un esfuerzo integral para enfrentar los desafíos actuales en el ámbito educativo argentino.
