Este lunes, mientras Justino Zavala, tambero de Canelones, estaba en Montevideo a punto de reunirse con gremiales lecheras y el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca para hablar sobre los problemas provocados por la sequía, en su campo, cerca de la localidad de Aguas Corrientes, un incendio estaba destruyendo los últimos fardos de alfalfa que tenía como reserva para alimentar a su ganado.
En un incendio que consumió 30 hectáreas de su campo y también parte del campo vecino, en dos horas, el tambero perdió "más o menos US$ 15.000", contó a El Observador.
Fueron 50 los silopacks de alfalfa (fardos que se hacen húmedos y se envuelven en nylon) los que destruyó el fuego.
El incendio afectó 30 hectáreas de campo.
"Fue un desastre", comentó el productor, quien explicó que de esa alfalfa no puede salvar nada. "Fue una desgracia con suerte" y señaló que la casa, el tambo y los animales no fueron afectados por el fuego; "pero son cosas que pasan que a veces no entran en los cálculos del negocio", añadió.
Esos silopacks eran lo que le quedaba de reserva para sobrellevar el siguiente tiempo, junto a algunos fardos que se salvaron del fuego porque estaban en el tambo.
Aún no se sabe qué causó el incendio, uno de los varios que se generaron en la zona en los últimos días. Previo a eso un incendio causado por un cortocircuito en una bomba de agua quemó un monte, y en otra ocasión, un incendio que comenzó sobre la ruta 46 y llegó hasta la 11 "casi prende fuego la planta de Prolesa", contó Zavala.
"Es una locura, estamos en un momento horrible", sostuvo y resaltó que la solidaridad que existe entre vecinos "es tremenda".
El 2023 comenzó con una gran cantidad de incendios en campo. Solo el domingo pasado la Dirección Nacional de Bomberos registró 59 incendios forestales en un día.
Ahora, este tambero, con varios años de experiencia en la lechería, deberá volver a empezar. "Hay que esperar que llueva y sembrar de nuevo", contó.
"Que añito que viene cabortero el 2023", expresó el tambero en su cuenta de Twitter, junto a una foto en la que muestra los fardos quemados, de los que no puede recuperar nada para sus animales.