Selección > HISTORIAS
Fabricio Díaz en una experiencia de elite: de dormir con Godín a absorber el espíritu competitivo de Luis Suárez
El teléfono sonó sorpresivamente. La baja por covid-19 de Matías Vecino le abrió las puertas para ser protagonista de una historia de sueños con la selección mayor, en donde comprendió a qué se refieren cuando hablan del espíritu competitivo de Luis Suárez, compartió la concentración con el capitán Diego Godín y fue protagonista directo de la clasificación de Uruguay al Mundial de Catar 2022.
El lunes de noche, luego que bajaron a Vecino, sonó el teléfono de Fabricio. Que llamaran a esa hora no era nada diferente a otras veces. Salvo que en esta ocasión tenía reservada una sorpresa especial. Del otro lado, Gustavo Ferrín, el gerente deportivo de Liverpool le comunicó que al otro día debía presentarse en el Complejo de la AUF para entrenar con la selección mayor que dirige Diego Alonso. Poco después lo llamó el secretario técnico de la AUF, Jorge Giordano, para completar las formalidades.
De allí en más, el fútbol lo invitó a protagonizar un viaje de emociones y sensaciones que no alcanza sus palabras para describirlo.
“Lo disfruté al máximo porque es una experiencia tremenda, que no esperaba vivir”, dice Fabricio Díaz a Referí.
Fabricio es un volante de 19 años que debutó en Primera con Liverpool una semana después de cumplir 17, lleva 77 partidos entre las temporadas 2020 y 2022 con los negriazules por torneos locales y copas internacionales
“Nunca imaginé que pudiera sonar el teléfono para eso. Estar en la sub 20 es una gran distinción y es algo que disfruto al máximo, imaginate en la mayor, que es uno de los sueños que cualquier futbolista puede tener”, apunta.
Fueron ocho días de una adrenalina e intensidad inéditas en su carrera deportiva. Quería ver todo, absorber el conocimiento que pudiera y disfrutar cada momento. De todas formas, aunque conocía el Complejo de la AUF, porque concurre tres veces por semana a entrenar con los juveniles, ingresar por la puerta grande representó algo diferente.
“Tenía un nerviosismo tremendo, aunque conocía el camino. Después que empezaron a llegar los jugadores, me hicieron sentir parte del grupo. Y cuando me tocó entrenar, seguía nervioso. Luego se empezó a aflojar”, subraya.
Descubrimientos, aprendizajes. También fue la ocasión para comprobar con sus propios ojos por qué Uruguay llegó al nivel que alcanzó con estos futbolistas.
“El espíritu competitivo que hay es muy lindo. Si te quiere ganar en fútbol tenis, imaginate lo que dejan para un partido oficial”, dice sobre el carácter ganador de Suárez.
“Estoy muy agradecido con Luis porque estuvo conmigo, me acompañó y jugamos al truco juntos”, dice.
Los equipos de truco se integraban con Luis Suárez, Sergio Rochet y Fabricio Díaz contra Matías Viña, Rodrigo Bentancur y Nicolás de la Cruz.
“Ganábamos siempre nosotros, porque a Luis no le gusta perder a nada. A mí tampoco me gusta perder a nada”, subraya, y comenta una anécdota: “En un entrenamiento jugamos un fútbol-tenis con Manu Ugarte contra Luis y Damián (Suárez), y para ellos era la final del mundo. Nos pasaron por arriba”.
Eso momento quedó registrando en una imagen que Luis Suárez publicó en sus redes sociales, en las que el jugador de Liverpool aparece en el piso y el Pistolero sobre él.
“Eso ocurrió en ese partido de fútbol-tenis, que después de ganar un punto se me paró encima y me decía: ‘Cuando los rivales están en el piso hay que pisarlos’ (se ríe). Todo en el tono de broma de los trabajos que realizamos pero con el espíritu competitivo a flor de piel”.
El volante de Liverpool compartió la habitación con Diego Godín durante la estadía en el Complejo de la AUF. En el exterior, en hoteles, se alojan en forma individuales.
“Fue muy especial estar con el capitán de la selección, que es un referente. Hablábamos. Me hizo sentir muy cómodo. Hablamos de todo, me preguntaba de dónde era, cuántos años tenía”, rememoró.
En la madrugada del miércoles, a las 3.30, regresó en el vuelo chárter a Montevideo, y de tarde volvió al Complejo para jugar un partido amistoso ante México con la sub 20, selección en la que es capitán.
“Volver a la sub 20 siempre es algo especial. En este caso pude transmitir una experiencia de la mayor a mis compañeros de la 20. Porque tenemos por delante grandes desafíos y nos seguimos preparando día a día para el Sudamericano del año próximo”.
Dice que jamás olvidará la experiencia que vivió el jueves de noche en Estadio Centenario, ante Perú, en el partido que Uruguay clasificó al Mundial de Catar 2022.
“Es de las sensaciones más hermosas que me podía tocar. Vivirlo fue algo inolvidable y son momentos que me llevo para siempre, porque estuve en uno de los partidos más especiales para los referentes y que terminó con la clasificación”.
A la hora de rescatar conceptos de su experiencia en la mayor, apunta: “Me quedo con muchos momentos que me tocaron vivir, el espíritu competitivo, ese deseo de ganar siempre, el profesionalismo y la humildad”.
Este jueves el volante regresó a entrenar con el plantel de Liverpool y fue recibido con la tradicional pasarela y las preguntas de cómo resultó esta experiencia de la mayor. Sobre la apuesta de los negriazules, manifestó: “Liverpool está muy bien y tenemos un gran grupo”.
Comenta que se guardó la camiseta del partido con Perú. Y también se llevó una serie de fotos que guardará para siempre.
“Esa con Suárez, fue en Chile, y será imborrable”, explica.
En otra aparece firmando autógrafos. “Ya me había tocado, ahora también. Me piden y firmo”.
Finalmente, resume en una frase los sueños que tiene como futbolista: “Participar en un mundial con la selección y jugar en las grandes ligas de Europa. Sé que atrás de eso hay un gran sacrificio y esfuerzo”.
