El líder nacionalista iraní Mohammad Mossadegh fue depuesto por un golpe dirigido por la CIA

Mundo > Historias

Hace 70 años, la CIA orquestaba el derrocamiento del líder iraní Mohammad Mossadegh

El primer ministro Mossadegh era una figura querida en Irán. Durante su mandato introdujo una serie de políticas sociales y económicas, como la nacionalización de la industria petrolera iraní, los servicios telefónicos y la industria pesquera
Tiempo de lectura: -'
19 de agosto de 2023 a las 05:03

Recién en agosto de 2013, la Agencia Central de Inteligencia de los Estados Unidos (CIA) admitió públicamente y por primera vez su participación en el golpe de Estado de agosto de 1953 contra el primer ministro electo de Irán, Mohammad Mossadegh.

Los documentos proporcionaron detalles del plan de la CIA en ese momento, que estaba dirigido por el oficial superior Kermit Roosevelt Jr., nieto del presidente estadounidense Theodore Roosevelt. En el transcurso de cuatro días en agosto de 1953, Roosevelt orquestó no uno, sino dos intentos de desestabilizar el gobierno de Irán, cambiando para siempre la relación entre ese país y los Estados Unidos.

Mohammad Mossadegh era una figura querida en Irán. Durante su mandato como primer ministro, introdujo una serie de políticas sociales y económicas, siendo las más importantes la nacionalización de la industria petrolera iraní, los servicios telefónicos y la industria pesquera.

Gran Bretaña había controlado el petróleo de Irán durante décadas a través de la empresa Anglo-Iranian Oil Co. Después de meses de conversaciones, el primer ministro rompió las negociaciones y negó a los británicos cualquier participación adicional en la industria petrolera de Irán.

Debido a la oposición de Occidente a las medidas de Mossadegh y por las tensiones políticas, el Sha intentó destituir a Mossadegh, pero la respuesta popular en su apoyo lo impidió.

En respuesta, Gran Bretaña pidió ayuda a los Estados Unidos, lo que finalmente llevó a la CIA a orquestar el derrocamiento de Mossadegh y restaurar en el poder a Mohammad Reza Pahlavi, el último Sha de Irán.

Según Stephen Kinzer, autor del libro All the Shah’s Men, para garantizar el control de la opinión pública, Roosevelt se ganó el apoyo de la prensa sobornándola para que hiciera circular propaganda y acusaciones falsas contra Mossadegh.

Reclutó aliados entre el clero islámico y convenció al Sha de que Mossadegh era una amenaza. El último paso implicó un dramático intento de detener a Mossadegh en su casa en medio de la noche. Pero el golpe fracasó. Mossadegh se enteró, pudo defenderse con apoyo de sus aliados y, a la mañana siguiente, anunció la victoria por radio.

Mossadegh pensó que estaba a salvo, pero Roosevelt no se había dado por vencido. Orquestó un segundo golpe, que finalmente tuvo éxito. Mossadegh fue llevado a juicio y pasó su vida bajo arresto domiciliario.

El Sha volvió al poder y gobernó durante otros 25 años hasta la revolución iraní de 1979. El golpe de 1953 fue invocado por los estudiantes y la clase política de Irán como justificación para derrocar al Sha.

Las aproximadamente 1.000 páginas de documentos desclasificados revelan por primera vez los detalles de cómo la CIA intentó cancelar el primer fallido golpe de estado, sólo para ser rescatado en el último minuto por un espía en el terreno que no siguió las órdenes de cancelar el golpe.

El primer intento de golpe, conocido como Operación Ajax, comenzó el 15 de agosto, pero fue frustrado rápidamente. Mossadegh hizo docenas de arrestos. El general Fazlollah Zahedi, uno de los principales conspiradores, se escondió y el Sha huyó del país. La CIA canceló la operación creyendo que había fracasado.

“La operación se intentó y fracasó y no debemos participar en ninguna operación contra Mossadegh que pueda rastrearse hasta los Estados Unidos”, escribió el cuartel general de la CIA a su jefe de estación en Irán en un cable enviado el 18 de agosto de 1953.

Ese es el cable que Kermit Roosevelt, el principal oficial de la CIA en Irán, supuestamente ignoró, según Malcolm Byrne, quien dirige el Proyecto de Relaciones entre los Estados Unidos e Irán en el Archivo de Seguridad Nacional de la Universidad George Washington.

Al menos “un tipo estaba en la habitación con Kermit Roosevelt cuando recibió este cable”, le dijo Byrne a la publicación Foreign Policy. “Roosevelt dijo ‘no, no hemos terminado aquí’”. Ya se sabía que Roosevelt no había cumplido una orden de Langley de cesar y desistir, pero recién con la desclasificación de los documentos se tuvo acceso al cable que certificaba la información.

Las consecuencias de su decisión fueron trascendentales. Al día siguiente, el 19 de agosto de 1953, con la ayuda de multitudes “alquiladas” organizadas con la ayuda de la CIA, el golpe tuvo éxito. El líder nacionalista de Irán fue encarcelado, la monarquía restaurada bajo el Sha, firme aliado de Occidente, y el petróleo anglo-iraní, rebautizado como British Petroleum, comenzó a recuperar sus activos y campos de explotación, aunque finalmente, debido al fuerte sentimiento nacionalista que había surgido con Mossadegh, se convirtieron en empresas en las que el estado iraní tenía participación.

La Operación Ajax fue durante mucho tiempo un cuco para los conservadores en Irán, pero también para los liberales. El golpe avivó las llamas del sentimiento antioccidental, que alcanzó su clímax en 1979 con la crisis de los rehenes en los Estados Unidos, el derrocamiento final del Sha y la creación de la República Islámica para contrarrestar al “Gran Satán” norteamericano.

Mossadegh es ampliamente considerado como lo más cercano que Irán tuvo a un líder democrático. Defendió abiertamente los valores democráticos y esperaba establecer una democracia en Irán.

Fue elegido primer ministro por el Parlamento y usó su cargo para reducir el poder del Sha, acercando así a Irán a las tradiciones políticas que se habían desarrollado en Europa. Pero cualquier desarrollo democrático adicional fue bloqueado el 19 de agosto.

El gobierno de los Estados Unidos negó durante mucho tiempo su participación en el golpe. El Departamento de Estado publicó por primera vez documentos relacionados con el golpe en 1989, pero eliminó cualquier referencia a la participación de la CIA.

La indignación pública hizo que el gobierno prometiera publicar una edición más completa, y parte del material salió a la luz en 2013. Dos años después se programó la entrega completa del material desclasificado, pero podría haber interferido con las conversaciones nucleares con Irán y se retrasó nuevamente, según Malcolm Byrne. Finalmente fueron liberados completamente en 2017, aunque se estima que numerosos telegramas de la CIA desaparecieron.

Probablemente, la desaparición de alguna documentación haya obedecido a la necesidad de proteger no sólo algunos detalles específicos de la actuación de la agencia, sino la participación de la inteligencia británica en los prolegómenos y el desarrollo del golpe.

(Con informes de National Public Radio, Foreign Policy y George Washington University)

Comentarios

Registrate gratis y seguí navegando.

¿Ya estás registrado? iniciá sesión aquí.

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 345 / mes

Elegí tu plan

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Te quedan 3 notas gratuitas.

Accedé ilimitado desde US$ 345 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 345 / mes

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Elegí tu plan y accedé sin límites.

Ver planes

Contenido exclusivo de

Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.

Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá

Cargando...