La final de la Copa Libertadores era deseada por los sectores gastronómicos, hoteleros y de comercios. Luego de una primera experiencia como la final de la Copa Sudamericana, en donde, según las diferentes cámaras, no se había logrado mover la aguja, esta vez la sensación fue diferente. Casi 30 mil brasileños llegaron a Uruguay para el partido del sábado 27 y el balance para los sectores es muy positivo, consideraron varios representantes consultados por El Observador.
"La expectativa era que podía ser 5 o 10 veces más grande de lo que fue la final de la Sudamericana y fue más o menos 10 veces más. Estuvimos casi en 30 mil personas. Vimos un importante movimiento en la parte gastronómica que fue el doble del fin de semana anterior", declaró a El Observador, el secretario de la Cámara Uruguaya de Turismo, Francisco Rodríguez.
Según los números de la Cámara, la hotelería tuvo 100% de ocupación en Montevideo. En otros departamentos, aunque hubo menos ocupación, concurrieron personas que se quedaron cuatro o cinco días y que no vinieron solamente un día antes del partido. "Para Montevideo, que en la temporada de verano queda vacía, la concurrencia fue mucho más alta. Se recibieron en torno a 50 mil brasileros en todo noviembre. Es un número muy significativo. Si no hubiéramos peleado para que la industria hotelera estuviera medianamente en pie, hubiera sido imposible recibir a todos. Es un movimiento que sirve desde el punto de vista anímico, sobre todo para el sector gastronómico, que venía muy golpeado", aseguró.
En la misma línea se expresó el subsecretario de Turismo, Remo Monzeglio. "Hubo un tránsito aéreo como nunca antes se había dado. Después realmente se superaron las expectativas porque es difícil recibir a tanta gente en tan pocas horas", afirmó a El Observador.
Para Monzeglio, esta experiencia puede ser un puntapié para lograr más turismo, sobre todo por la cantidad de gente que supo de Uruguay a raíz de la final. "El partido no se vio en Cuba y no se vio en Corea del Norte. En el resto de los países del mundo de alguna manera se vio. Son millones de personas, Uruguay estuvo en la mira de los aficionados del futbol por una semana, hubo búsquedas sobre Uruguay, sobre el Estadio Centenario, todo subió exponencialmente", afirmó.
"Lo veo como un shock positivo después de tanto tiempo en que estaban cerradas las fronteras, de un día para el otro se produjo este ingreso masivo. Va a quedar esa imagen que dio Uruguay al mundo. Es un remanente en prestigio y localización del país que no se puede cuantificar", agregó.
En cuanto a la venta de bebidas en locales, la aguja también se movió, según dijo el presidente del Centro de Almaceneros Minoristas, Baristas, Autoservicistas y afines del Uruguay (Cambadu), Antonio Ameijenda. "Lo más fuerte estuvo el viernes en Ciudad Vieja y el Mercado del Puerto, que explotó un poco. Ese sector estuvo trabajando bien. Después, en el Centro, bien. Pero no hubo desborde por el consumo", declaró a El Observador.
"De todos modos fueron 30 mil personas que estuvieron deambulando y consumiendo por ahí. En Pocitos nos dijeron que se movió 20% o 30% más que otras fechas en las que hubo eventos", agregó. Ameijenda sostuvo que esta semana podrán hacer una evaluación, sobre todo las empresas de bebida, cuando vean si los comercios necesitan reponer o si tienen sobrestock porque no vendieron lo suficiente.
Asimismo, a diferencia de la semana pasada, también hubo un mayor movimiento en la zona cercana al Estadio Centenario. "La otra vez había dos tribunas que no estaban habilitadas y hubo comercios que casi no trabajaron porque no circulaba nadie", agregó.
Sin embargo, hubo dos factores que podrían haber favorecido que las ventas fueran mayores. Uno fue el tiempo, que no fue tan caluroso como el fin de semana anterior. Y otro fue el resultado del partido. Dada la cantidad de hinchas de Flamengo que había, en Cambadu consideraron que la venta de la noche del sábado habría sido mayor si ese equipo hubiera ganado. "Fue una lástima que perdiera Flamengo porque hubiera sido interesante. Hubiera sido otra cosa totalmente diferente si ganaba. Los de Palmeiras vinieron muchos en ómnibus y se fueron después del partido. La noche del viernes se movió más que la noche del sábado", resumió Ameijenda.
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá