Los desafíos y los planes del nuevo CEO de Oca

En marzo de este año, el CEOregional de Itaú, André Gayley, lo invitó a asumir “el gran proyecto  y desafío único de liderar Oca”, que cuenta con 500 mil clientes activos. Moreira no se lo esperaba, pero aceptó enseguida para aportar al desarrollo de “una empresa líder, superposicionada, con una marca supervalorada”. En abril asumió en sustitución de Ignacio Arechavaleta, que pasó a desempeñarse como director de Banca Minorista de Itaú.

¿Cómo fue el mes de transición?
Con mucho soporte de Nacho (Arechavaleta) y reuniones con el equipo. Si bien somos empresas totalmente separadas, a nivel personal tenía vínculos con muchas personas de Oca, con lo cual fue más sencillo.

¿Cómo impactó la pandemia?
El covid afectó toda la industria financiera. Hay dos variables que son muy críticas: el consumo y el empleo. Vimos meses de abril y mayo donde realmente impactó en los resultados. Por suerte se tomaron muchas medidas previas, muchas acciones fomentando el consumo, que paliaron esos impactos. Pero también hubo que tomar medidas con los colaboradores. Nos preocupamos por su salud y por la de los clientes.

¿Cómo ha sido la evolución de los últimos meses?
A nivel general, el consumo ha bajado 4% de niveles precovid. Eso tiene un impacto en nuestro negocio. Pero hemos visto algunas mejoras en los últimos dos meses, aunque todavía insuficientes para volver a niveles precovid. Pasa una situación similar con el empleo. En nuestro plan habíamos previsto un posible deterioro en la cartera de préstamos que no se está reflejando en esa magnitud. Es mucho menor de lo que se podía prever.

¿Cómo han visto el comportamiento del consumidor en estos tiempos de pandemia?
El año pasado, cuando recién comenzó la pandemia había mucha incertidumbre; tomamos muchas medidas a nivel de crédito. Dimos flexibilidades en formas de pago, difiriendo préstamos, pudiendo pagar en cuotas estados de cuenta de tarjetas de crédito.
Luego no tuvimos que repetirlas porque no hubo indicios de que fuera necesario más allá de casos específicos que se tratan con los equipos de cobranza. Tenemos un producto para refinanciar con un sistema muy novedoso para que el cliente no pierda su tarjeta de crédito. Si cumple con los pagos iniciales se le activa nuevamente la tarjeta, para que no pierda ese producto, que es muy valorado. Los clientes de Oca son muy fieles, cuidan mucho su tarjeta.
Con la pandemia, vimos que la contratación de nuevos préstamos se vio afectada en los primeros cinco meses de este año en la industria. Y en junio y julio se retomó el interés por el crédito.

¿Cuáles son los grandes desafíos de la empresa hoy?
Oca tiene el gran desafío de modernizarse. Es una realidad. Ha sido exitosa en resultados, valoración de clientes y posicionamiento. Ya hace unos años empezó un proceso de modernización no solo en su imagen, sino en los productos, servicios y procesos internos .
El gran objetivo es continuar expandiendo los productos y servicios. Hay un dicho: “Lo que nos trajo hasta acá no nos asegura el éxito de mañana”. Tenemos que tomar el legado innovador y  continuarlo para brindar las mejores soluciones a nuestros clientes en un mundo que cambió.

Tenemos que pensar en el futuro y ver cómo atraer el segmento joven, no solo como clientes sino también como colaboradores. Queremos talento joven.

Hay que adaptarse al nuevo mundo. El factor humano sigue siendo un punto muy relevante. Nos desvelamos por tener la mejor experiencia digital pero con la cercanía del canal humano. Lo que hoy se llama figital.
Hay un frente que nos obsesiona y es la transformación digital. Esto va más allá de lo tecnológico. Estamos cambiando la forma en la que trabajamos para aplicar metodologías mucho más ágiles, que permitan brindar soluciones más innovadoras y con velocidades de entrega más rápidas.

Más del 60% de las tarjetas de crédito se solicitan  hoy a través de los canales digitales. Cerca del 50% de los préstamos en volumen se originan en canales digitales. Incluso Oca Blue, la cuenta de Oca Dinero Electrónico, se puede abrir en un formato totalmente digital.

¿Cómo viene Oca Blue?
Lo lanzamos en el último trimestre del año pasado a través de Oca Dinero Electrónico. Es una cuenta gratuita en la que se puede cobrar sueldos, jubilaciones, transferir desde cuentas bancarias.Se habilita una tarjeta de débito internacional gratis, para comprar o retirar efectivo.

Estamos trabajando muy fuerte en los beneficios que brinda. Nuestro objetivo es cerrar arriba de 100 mil clientes en este nuevo producto a fin de año y venimos muy bien en captación.

Además de la transformación digital y Oca Blue, ¿en qué  otro proyecto trabajan?
En la apertura de la adquirencia.
Antes los sellos eran sus propios adquirentes en los comercios: tenían la relación con los comercios y procesaban las transacciones. Ahora se ha llegado a un acuerdo a nivel de industria –es un hito en el mercado uruguayo– y se va a abrir la adquirencia. Se va a permitir que el comercio elija con quién quiere trabajar y no que tenga que hacerlo con distintos adquirentes. Sobre fines de agosto ocurrirá la apertura de los sellos Oca y Mastercard. El comercio va a poder optar por quién quiere que procese sus compras con esas tarjetas, tanto crédito como débito. Eso va a generar mucha eficiencia desde el punto de vista de los comercios.

¿Cómo ve el mercado?
Saturado y muy competitivo.  Ingresan nuevos jugadores que entran 100% digitales y con otras estructuras. Esto hace que la competencia sea más agresiva. Vemos más jugadores del mundo fintech, pero nuestra opinión es que generalmente podemos encontrar más oportunidades que amenazas. Podemos apoyarnos en determinadas fintech para desarrollar negocios.

El ecosistema de pagos está siendo muy atacado por las fintech. Está en auge en los últimos años. Es algo que pasa en el mundo. Tenemos que estar muy atentos y cerca para no perder relevancia. ¿Por qué es importante el canal de pagos? Porque es donde está el cliente. Debemos usar los datos muy proactivamente para entender qué precisa el cliente y en qué momento. y ser bien eficientes en brindar la mejor solución poniéndolo en el centro. l