Molestia en Peñarol por una bandera en la tribuna tricolor

Fioritto había sido baleado el 28 de setiembre en Santa Lucía y estuvo internado en el Sanatorio Americano hasta su muerte, el 4 de noviembre. Una docena de implicados en su muerte se encuentran en prisión.

Según pudo confirmar Referí, Peñarol pretende hacer énfasis en este hecho para contrarrestar los argumentos conocidos en las primeras horas respecto al desencadenante de los disturbios del domingo.

Ese día, uno de los temas que encendió la mecha de los incidentes en la Tribuna Ámsterdam y afuera del Estadio Centenario, y que produjeron la suspensión de la disputa del clásico, fue el hecho de que la Policía detuviera a tres de los cabecillas de la barra brava aurinegra.

Al detenerlos, la hinchada de la cabecera quedó diezmada, con gente que no había podido ingresar, sin bombos y sin las banderas largas, lo que provocó la ira de la barrabrava, que veía que en la tribuna contraria sí habían podido ingresarlas.

Respecto a esto y al saludo de los jugadores tricolores a la hinchada desde el talud, el capitán de Nacional, Diego Polenta, dijo: "Pido disculpas porque yo no vi esa bandera. Como plantel no nos dimos cuenta de ese hecho, si no éramos los primeros en decir que sacaran esa bandera".

"Hay mucha gente de Nacional que no tiene nada que ver. También en Peñarol y van al deporte a vivirlo de otra manera", afirmó al programa "Último al arco" de Sport 890.

El clásico del fútbol uruguayo debió ser suspendido en la tarde del domingo antes de que comenzara el juego luego de saqueos en los comercios del Estadio Centenario y enfrentamientos entre los barras de Peñarol y la Policía, a la que le llegaron a tirar una garrafa desde la Tribuna Ámsterdam hacia donde se encontraba un grupo de agentes.