Peluquería en casa: la tinta, el cerquillo y los baños de crema de la abuela

Para quienes acuden a estos centros muy ocasionalmente, probablemente la limitación de no poder ir durante la cuarentena no sea un problema. Pero para un importante grupo de personas que van religiosamente a su peluquera de confianza a teñirse las canas o retocarse los claritos, por ejemplo, este momento –en el que ya pasaron casi 50 días desde que comenzó la exhortación de permanecer en casa– puede ser algo dramático. Porque sí, la coloración es todo un tema.

Si bien desde hace algunos días algunos centros de belleza abrieron sus puertas y atienden con previa coordinación por agenda y acceso restringido en cuanto a la cantidad de clientes, hay quienes prefieren continuar un tiempo a cargo de su cuidado personal en casa. Y, aunque para quienes nunca lo hicieron teñirse el pelo puede resultar toda una odisea, es posible lograrlo si se apela al cuidado y la paciencia.

Eso sí, hay ciertas acciones sobre el cabello que es mejor postergar y dejar en manos de un profesional luego. “No les recomendaría que se hagan mechas, ni reflejos ni todas esas cosas que requieran de un tipo de técnica específica”, dijo el estilista Diego Alfonso y agregó que una cosa es corregirse las canas o las raíces –“que es lo más urgente que vemos cuando nos miramos al espejo” – y otra es apuntar a procesos más jugados donde de caer en un error puede ser más complejo de corregir por un estilista después.

Por su parte, la peluquera Sheilla da Silva de Glam Queen advirtió que no les recomendaría innovar en casa con la tinta a las personas que no tienen muy buena modicidad y son temerosas, dado que esa combinación puede ser la vía directa hacia un resultado contrario al esperado. Y si se trata de un tema de tapar canas, recordó que ahora se encuentra en el mercado una gama de spray que sirve para tapar los crecimientos y su tintura no es permanente.

Teñirse el pelo no es lo más sencillo –no en vano los coloristas estudian para serlo, y mucho-, pero es posible lograr cubrir las canas o raíces de color en estos momentos donde sentirse bien con uno mismo también alimenta la necesidad de levantar los ánimos.

Paso a paso: cómo aplicar la tinta sin morir en el intento

Desde las que se encuentran en la farmacia hasta las que están en la góndola de cuidados personales en el supermercado, la lista de tintas disponibles en el mercado es variopinta en cuanto a marcas y tonalidades. Y no son pocas las mujeres que más allá de la cuarentena optan por teñirse ellas mismas, dado que en la mayoría de los casos el gasto es considerablemente menor (aunque si se equivoca con el tono y luego tiene que irse a arreglar el pelo con un especialista seguro terminará gastando más). Para quienes ya sepan cuál es el color que nunca les falla, el procedimiento es sencillo. Si no, Alfonso aconseja consultar con un peluquero o estilista que lo conozca para que le diga cuál es su color. Y, en caso de dudar o de no conseguir la numeración exacta, lo recomendable es siempre elegir un tono más claro. Porque siempre va a ser más fácil corregir en un salón un tono más claro que uno que quede oscuro y genere que se formen barreras en la raíz.

Y una vez que elija el tono correcto, lo que sigue es respetar al pie de la letra las instrucciones que suelen venir detalladas en la caja del producto.

Una de las diferencias de estas tintas con respecto a las coloraciones que se preparan en los salones es que son más concentradas, porque se espera que el color funcione en el cabello de cualquier persona. Esto que implica que sea cuál sea el tipo de cabello al que se le aplique la tinta, la fórmula va a ser la misma. Lo que sí puede hacer la diferencia son las consideraciones en cuanto a cómo se esparza la tinta y cuánto tiempo se la deje reposar. Y es en ese punto del proceso donde se puede pisar el palito.

En un artículo publicado en el portal de belleza Byrdie, Christine Arndt, colorista de un prestigioso salón de Nueva York alertó sobre dos posibles errores en los que se puede caer al aplicarse la tinta. Uno es aplicar una cantidad de tinta inferior a lo que se necesita para cubrir bien todo el cabello y que el resultado sea el de un color irregular y con mal aspecto. El otro es exagerar y colocarse demasiada tinta y dejarla procesar por un tiempo prolongado. En el segundo caso, Arndt dice que el tono logrado puede ser demasiado oscuro y opaco e incluso el cabello puede quedar seco y dañado. Entonces, el cubrir bien todo el pelo y controlar no excederse en el tiempo de reposo son puntos fundamentales a prestar atención.

Preparación

En cuanto a la preparación previa, Alfonso recomienda lavarse el pelo unos dos días antes de teñirse, para evitar una posible irritación en el cuero cabelludo.

Operativamente, debe recordar colocar una toalla debajo del pelo y guantes en las manos para no mancharse. Además, ya que está en su casa aproveche para usar una remera que de mancharse por accidente no le duela tanto.

Por otro lado, hay que tener a mano un peine y pinzas para poder dividir el pelo en secciones a medida que se va aplicando la mezcla.

Seguir las instrucciones

Si se sigue con el paso a paso de la caja de la tinta es difícil fallar. Se debe esparcir cuidadosamente el producto de forma que no se manche el cuero cabelludo, además de respetar la cantidad y tiempo de reposo, para evitar en los errores que remarcó la estilista estadounidense.Da Silva dijo que para evitar que queden partes sin ser teñidas es fundamental ser prolijo con las divisiones de cabello en las que se va colocando la tinta .

Una vez que finalice el tiempo indicado de reposo del producto, se recomienda lavar el pelo con agua tibia. Si luego quiere darle mayor brillo, se puede dar un golpe de agua fría al final.

El flequillo

Más allá de un tema estético, el cerquillo crecido puede ser insoportable. Por eso, Alfonso aconseja que si alguien tiene que cortarse el flequillo, lo haga con la técnica conocida como desempolvado, que consiste en sacar apenas las puntitas de pelo. “Con esto, al menos sacamos las puntas florecidas y el pelo se sigue manteniendo sano y fuerte para que cuando volvamos al salón no haya que cortar demasiado”, agregó.

Lo que sí subrayó el estilista es que no se debe estirar el pelo hacia abajo al momento de cortar. Porque puede que después, cuando lo suelte, ese cerquillo suba un par de centímetros y el largo no sea para nada el esperado. Hay que peinar, soltar y cortar.

Por la misma línea, da Silva indicó que al cerquillo hay que cortarlo con el pelo seco.

Detox

Muchas personas, en su mayoría mujeres, cargan con la necesidad o costumbre de utilizar secador y planchita a la hora de aprontarse para salir. Pero ahora pueden salir de la ducha y dejar que el pelo se seque naturalmente. Y por eso este es un momento ideal para “desintoxicar” al cabello de los maltratos diarios.

Alfonso recordó que el pelo es una extensión de la piel. “La ansiedad y el estrés que predominan ahora también influyen en cómo se ve el pelo, entonces lo ideal es lavarlo ahora con un shampoo más liviano –libre de aditivos y sin sulfato– y dejarlo al natural. Ya no tenemos que apurarnos para salir, podemos hacer un detox”, aconsejó. Da Silva también alentó a utilizar el tiempo para aplicarse baños de crema y tratamientos que apunten a mejorar la calidad de la fibra.

"Si solemos darle palo todos los días, dejar reposar al pelo un mes o incluso una semana ahora vamos a obtener buenos resultados", destacó la peluquera.

Para Alfonso, esta es una excelente oportunidad para dejar a un lado los productos químicos y confiar en “esos cuidados caseros que seguían las abuelas”. Porque también en lo que a cuidados y estética respecta, la cuarentena se presenta como una posibilidad de reconectar en mano propia con lo natural.