Planean prueba “controlada” en el Sodre para la instrumentación del “pase verde”

El plan que tienen sobre la mesa las autoridades es realizar la primera prueba en el Auditorio Nacional Adela Reta del Sodre -con aforo para unas 1.800 personas- y, para ello, desde el Ministerio de Salud Pública (MSP) ya se comunicaron con integrantes del Consejo Directivo de la institución.

Fuentes del oficialismo dijeron a El Observador que la realización de la prueba está ligada a la evolución de la pandemia y agregaron que la experiencia que se evalúa llevar a cabo tiene como modelo, entre otras cosas, lo hecho en Israel y Barcelona para la apertura de actividades culturales. 

De concretarse, la actividad será “controlada” por el MSP y el Sodre pondrá la logística artística. Se evalúa que características sanitarias deberán tener los “invitados”: si serán vacunados,  portadores de anticuerpos o personas que se hayan hecho un hisopado momentos antes de ingresar. 

Nicolas Martinelli, asesor del presidente Luis Lacalle Pou que desde hace dos meses está coordinando todos los aspectos relativos al proyecto del "pase verde", dijo que todavía no está definido el escenario pero se piensa en algo vinculado a lo cultural: un museo, un teatro, la presentación de una banda sinfónica. 

La idea de este plan piloto es, fundamentalmente, probar el funcionamiento del software que servirá para su implementación y que fue desarrollado por la Agencia del Gobierno Electrónico y Sociedad de la Información (Agesic). Si ese primer paso sale bien, se desarrollarán nuevas instancias en otro tipo de actividades.

Tres "status" sanitarios

El plan se aplicará a través de la aplicación CoronavirusUY, y ofrecerá tres alternativas. Por un lado, las personas que estén vacunadas podrán obtener el “pase libre” 15 días después de la segunda dosis. El permiso estará vigente, en principio, por los siguientes seis meses. 

Por otro lado comprenderá a los que hayan cursado la enfermedad y conserven anticuerpos. En su caso, la vigencia será por tres meses. 

Finalmente, existirá la posibilidad de presentar el resultado negativo de un test de antígeno antes de ingresar al evento en cuestión. En este caso la validez dependerá de qué tipo de actividad sea. 

En las que sean consideradas de “alto riesgo”, el test deberá tener un máximo de 24 horas de realizado que demuestra que el individuo en cuestión “por lo menos no entre contagiado”.  

Al ser consultado, Martinelli aclaró que estos plazos dependerán de la decisión del Ministerio de Salud Pública, y pueden tener modificaciones. 

El  status de la persona estará cargado en el código QR que contiene la información sanitaria del interesado. 

A partir de estas alternativas, el jerarca destacó que cualquier persona podrá hacer cualquier actividad. “En algún momento se rumoreó que si no estabas vacunado no podías hacer nada y que esto convertiría a la vacuna en obligatoria”, recordó. “Es todo un rumor que no sé de dónde salió”, dijo Martinelli.

La semana pasada el senador y líder de Cabildo Abierto, Guido Manini Ríos, había advertido del riesgo que implicaba este “pase verde”. En el Parlamento sostuvo: sin ese certificado “no voy a poder salir de mi casa”. Y llamó a tener “ojo con hacer de la vacunación obligatoria”. 

Puesta en marcha

Martinelli admitió que el plan supone un “riesgo controlado” y que el objetivo siempre fue el retorno a las actividades. “Abrir más allá de lo que indican los protocolos. Si en un museo se permite un aforo del 30%, esto va a permitir abrirlo al 100%”, precisó. 

El plan contempla una excepción: para realizar actividades de “muy alto riesgo”, como visitar a un internado en un CTI, será necesario un test rápido más allá de que la persona esté vacunada o inmunizada. 

El gobierno pretende tener este proyecto en marcha lo antes posible. El asesor presidencial confirmó que a nivel oficial se confía en que en agosto Uruguay llegue a la “inmunidad de rebaño” por lo que tal vez allí “quizá esto ya no sea necesario”. 

El plan además estará vinculado al “pasaporte sanitario” cuya implementación viene siendo coordinada por el subsecretario de Turismo, Remo Monzeglio. La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) recibirá la información sobre las condiciones que deberá cumplir un visitante para realizar cualquier tipo de actividad. 

El visitante, entonces, deberá tener la aplicación y cumplir con cualquiera de las tres condiciones previstas. En el gobierno, de todas formas, se descuenta que la mayoría vendrán vacunados. 

¿Vacunado para trabajar?

Para el ministro de Trabajo, Pablo Mieres, la idea del “pase verde” es interesante y positiva para reactivar sectores que están muy afectados. 

“No hay que confundir esto con exigir la obligatoriedad de la vacuna para el trabajo”, precisó. “Eso no es posible, lo hemos dicho una y mil veces”, agregó. 

El ministro ratificó que no existe ninguna norma que establezca la obligatoriedad de la vacuna contra el covid-19. “Sería imposible además porque ese bien no está disponible para todos. No es universal”, sostuvo.

Por lo tanto, dijo, no se pueden tomar decisiones desde el punto de vista laboral que impliquen una actitud diferencial que sería discriminatoria con respecto a un trabajador.