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馃敶 Real Madrid mostr贸 chapa de equipo grande, gole贸 al Girona y es m谩s l铆der que nunca
El Real Madrid dió una cátedra futbolística. El elenco de Carlo Ancelotti tachó al Girona por 4-0, en el marco de la jornada 24 de LaLiga EA Sports en el Santiago Bernabéu, en un duelo perfecto por parte de la Casa Blanca en todos los sentidos, que de esta manera confirma su presencia en lo más alto de la tabla de posiciones y dió un gran paso de cara al título. Los goles los marcaron Vinicius, Jude Bellingham en dos oportunidades y Rodrygo.
El partido comenzó muy dinámico y con el Girona asumiendo la responsabilidad de manejar el balón y de ir hacia adelante, ante un Madrid que respondió a esas amenazas por parte de la visita, lo que tornó el encuentro muy atractivo desde el inicio.
Tal es así que el Real Madrid rompió el marcador muy temprano en el encuentro con un golazo de Vinicius: el brasileño recibió con tiempo y espacio por parte de Valverde y el delantero sacó un remate magnífico desde afuera del área para poner el 1-0. El Girona arrancó muy bien, pero los de Ancelotti tienen la virtud que, con muy poco, genera mucho.
El conjunto local creció en confianza y comenzó a responder de manera muy efectiva los avances del Girona. Tuvo menos la pelota, pero cuenta con grandes lanzadores y futbolistas muy rápidos en la delantera que atacan muy bien los espacios y generan peligro. Con el correr de los minutos, el elenco blanco se hizo dueño de la posesión, pero no lastimó a la visita, que sintió el golpe del gol.
El Real Madrid se afianzó en el desarrollo y empezó a hacer lo que quiso en el cotejo, conectando muchos pases cortos, precisos y efectivos, sumado a los movimientos efectuados por todos los jugadores para asociarse, romper líneas y generar espacios. Movió el balón con mucho criterio, empleando un juego muy colectivo que desordenó por completo al Girona.
La táctica del Madrid fue muy efectiva a la hora de no tener la pelota: Kroos, Valverde y Camavinga se cerraron para reducir espacios y Bellingham se ubicó más adelantado, ayudando en la presión a Vinicius y Rodrygo. Luego, al recuperar, los últimos tres mencionados avanzaban y uno de los mediocampistas más retrasados era el encargado de romper la barrera defensiva del Girona.
Tanto dominió y buen juego, finalmente dió sus frutos: un pase extraordinario de Vinicius con cara externa para Bellingham, que trazó la diagonal como un delantero más, dejó mano a mano al inglés que se quitó al arquero de encima para aumentar la diferencia en el marcador y estampar el 2-0. Después de un tiempo, Bellingham volvió al gol.
Fue una paliza táctica del Real Madrid en los primeros 45 minutos. Ampliamente superior en todos los aspectos del juego ante un Girona que sintió el impacto del primer gol tempranero por parte de Vinicius. Un primer tiempo descomunal del Madrid, tanto individual como colectivo, y muy completo incluso en la faceta defensiva. Todos los jugadores muy comprometidos en hacer lo mejor posible su tarea y función.
Vinicius y Bellingham conforman una dupla aniquiladora, ambos se entienden muy bien dentro del campo de juego y son las piezas claves del éxito de este equipo que, merecídamente, se fue al descanso con ventaja.
El libreto del encuentro no se modificó en absoluto al inicio del segundo tiempo. El Madrid continuó siendo el dominador y, sumado a un Vinicius intratable, dió como resultado el segundo gol en la cuenta personal de Bellingham: el extremo brasileño tachó a Yan Couto, remató y el inglés capturó el rebote para el 3-0. Sin embargo, tras esa acción, Jude pidió el cambio por una dolencia en su tobillo que sufrió momentos antes, por lo que se retiró notablemente afectado.
Una exhibición del Real Madrid ante su público para ilusionarlo de cara a la pelea por el título. Controló todo y, a su vez, goleó el Girona: luego de una recuperación de Vinicius en mitad de cancha, Rodrygo capturó la pelota y comenzó a galopar con campo verde para correr hasta que llegó a la puerta del área y sacó un formidable remate para dictaminar el 4-0. Paliza total del líder.
Pese a la diferencia en el marcador, el elenco de Ancelotti no sacó el pie del acelerador y siguió atacando para aumentar la el resultado. El Girona en líneas generales no realizó un mal partido, solo que aguantó hasta donde pudo con las armas que tenía. Con el correr de los minutos, los de Michel perdieron la posesión, no conectó líneas de pases y pocas veces generó aproximaciones.
Para profundizar una noche oscura del Girona, Yan Couto derribó dentro del área a Arda Guler y el árbitro no dudó en sancionar penal en el cierre del encuentro. Sin embargo, Joselu se hizo cargo pero su tiro dió en el palo.
Un monólogo el partido que jugó el Real Madrid. Perfecto. Manejó los tiempos, dominó la posesión, movió la pelota con mucho criterio, juntos pases precisos, cortos y efectivos que rompieron todo el esquema defensivo del Girona, en especial en el centro del campo, y aprovechó los espacios que encontró y generó para lastimar.
De esta manera, es más líder que nunca y se despega, justamente, del Girona. Alcanza las 61 unidades y le saca una diferencia de cinco puntos al elenco catalán y dió un paso fundamental de cara a la pelea por LaLiga, aunque aún restan muchas jornadas por delante, pero sin dudas que ganar este compromiso es un puntapié y un envión anímico importantísimo.
