La Corte Suprema de Brasil condenó a tres personas con penas de entre 14 y 17 años de cárcel en los primeros fallos del juicio que se sigue a los bolsonaristas que atacaron las sedes de los tres poderes en Brasilia el pasado 8 de enero.
Las primeras sentencias, de gran severidad, recayeron sobre Aécio Lúcio Costa Pereira y Matheus Lima de Carvalho, que deberán pasar los próximos 17 años en prisión, y sobre Thiago de Assis, con una pena de 14 años.
El juez supremo relator del caso, Alexandre de Moraes, señaló al trío de hombres por participar en un “ataque golpista” con miras a incitar a las Fuerzas Armadas brasileñas “a derrocar al Gobierno legítimo” de Lula da Silva, quien había asumido ocho días antes.
Los cargos eran, además del intento de golpe de Estado, asociación criminal armada y daños a edificios y monumentos históricos.
La pena del tercer condenado, De Assis, fue menor porque, según explicó la Fiscalía, no habría alentado a otras personas a unirse a la asonada.
El primer condenado, Costa Pereira, es un exempleado de la empresa de aguas Sabesp que fue grabado por las cámaras de seguridad del Senado vistiendo una camiseta que llevaba como inscripción el pedido de golpe militar y grabando un vídeo de él mismo, mientras llamaba a sumarse a la asonada.
En su defensa aseguró que sólo participaba en una manifestación pacífica de personas desarmadas.
Las condenas se producen ocho meses después de que miles de partidarios del expresidente ultraderechista Jair Bolsonaro ocuparan la plaza de los Tres Poderes de la capital brasileña y vandalizaran los edificios del Congreso, de la Corte Suprema Federal y la oficina de la primera dama en el Palacio de Planalto, sede del gobierno.
Además de los tres ya condenados, el tribunal supremo juzgó en la segunda audiencia del juicio a otros tres acusados y detenidos en la misma jornada, cuyas condenas serán dadas a conocer en los próximos días
Alrededor de 1.500 personas fueron detenidas el día de los disturbios, aunque la mayoría fueron liberadas.
Ese asalto a Brasilia recordó el ataque contra el Capitolio de Estados Unidos, ocurrido en enero de 2021, cuando los legisladores se disponían a ratificar la victoria del actual presidente, Joe Biden, y el lugar fue asaltado por miles de seguidores del derrotado expresidente ultraderechista Donald Trump.
Lula responsabilizó por el ataque a Bolsonaro, pero este lo negó aduciendo que se encontraba en Estados Unidos, adonde había viajado días antes de la asunción del líder del PT para no tener que entregarle los símbolos del mando ya que tampoco había reconocido su derrota en las urnas.
El Partido Liberal, que postuló a Bolsonaro, solicitó al Tribunal Electoral anular los resultados de los comicios presidenciales de 2022 alegando supuestas fallas en 280.000 máquinas de votación.
Pero el tribunal rechazó la demanda y acusó a la bancada política de actuar de “mala fe”, e impuso una multa al movimiento político de alrededor de 4 millones de dólares.
El pasado 30 de junio, el Tribunal Federal Electoral (TSE) terminó prohibiendo a Bolsonaro que se presente a elecciones para cargos públicos en los próximos ocho años, tras descalificar sin pruebas el sistema del voto electrónico de su país.
(Con información de agencias)