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Tailandia investiga amenazas del cirujano a Daniel Sancho como posible móvil del crimen
Los investigadores tailandeses que indagan en las causas del asesinato del cirujano colombiano Edwin Arrieta a manos del español Daniel Sancho, quien además lo descuartizó y esparció 14 pedazos del cuerpo por distintos lugares de la isla de Koh Phangan, están detrás de una posible pista que incluye amenazas de muerte al chef, según informaron en las últimas horas a periodistas.
El enviado especial de El Periódico contó este jueves que en el teléfono móvil del español, ahora en manos de la Policía, figuran esas amenazas en un intercambio de mensajes.
Por su parte, la revista Lecturas publicó una conversación que Sancho mantuvo con su círculo íntimo cuando ya estaba detenido, reiterando lo de las amenazas. "Me estaban amenazando tanto a mí como a mi familia", habría dicho el hijo del actor Rodolfo Sancho.
Sin embargo, familiares del colombiano desmintieron que existan esas amenazas y acusaron a medios españoles de intentar colocar a Sancho en el lugar de la víctima.
"¿Quién nos está defendiendo en Tailandia? Nadie. Están haciendo ver a mi hermano como un delincuente. Es mentira todo lo que están diciendo de él, lo de la extorsión de las fotos", aseguró Darlin, la hermana de Arrieta, citando informaciones de que el colombiano habría extorsionado al español con imágenes íntimas que supuestamente tendría en su poder.
"Yo tenía el mismo teléfono que él (duplicado) y ahí no había fotos de esas. Daniel puede decir cosas terribles de mi hermano, pero Edwin no está para defenderse", sostuvo la mujer.
El periodista de Antena 3 Adrián Foncillas, que se encuentra en Tailandia, confirmó la pista que investiga la policía de Tailandia para Espejo Público. "Hasta ahora sabíamos que Edwin había amenazado con mostrar fotografías comprometedoras de Daniel si rompía con él. La policía nos ha dicho que en los chats que han recuperado del teléfono de Daniel también se lee a Edwin amenazando con matarle si decide romper con él finalmente", dijo Foncillas, que asegura haber hablado con "uno de los líderes de la investigación".
De esa pista podrían sostenerse los abogados de Daniel Sancho para intentar evitar un veredicto de cadena perpetua en el juicio, aunque resultaría más difícil demostrar que no fue un crimen premeditado porque la policía tiene imágenes del español comprando cuchillos, productos de limpieza y bolsas de basura un día antes de que el cirujano aterrizara en la isla.
Por eso, los investigadores consideran que se trató de un asesinato premeditado y no consecuencia de un arrebato que terminó con una pelea y la muerte.
