Visiones dispares sobre motivos de aumento de arrendamientos de tierras

Los acuerdos firmados muestran por lo general un compromiso que no supera los dos años, esto se viene dando así desde 2016. Alejandro Zambrano, de Zambrano & Cía explicó que esto es común en el mercado de arrendamientos. “Este aumento movió el mercado que venía tranquilo a fines de 2019, se había estancado” opinó. Para el operador, el aumento en la firma de estos contratos se debe a dos razones: “El arrendamiento es una alternativa interesante a la opción de compra, por ejemplo para toda la movida de argentinos que vienen y quieren conocer. Además hay la gente está viendo que la plata no renta en ningún lado y el tema agropecuario se vuelve interesante”.

Por su parte, Sebastián da Silva, de Da Silva Agroinmuebles no coincide en que el aumento en los arrendamientos muestre la actividad de inversores argentinos. "Todo el mercado de arrendamientos generalmente se compone de gente relacionada al sector que licua sus costos fijos con una expansión en el área” dijo, y explicó que la suba en los arrendamientos se debe a que “el mercado de tierras en Uruguay tiene una demanda infinita y la concreción es casi inmediata”. Según explicó, actualmente, su empresa cierra acuerdos de arrendamientos aproximadamente en cuatro días.

En este contexto el campo sigue reafirmando que es una excelente caja de ahorros para los inversores. Si bien no se destaca por la rentabilidad, sí por la seguridad (Da Silva)

Además de la firma de contratos, el promedio de valor anual también aumentó, de enero a marzo era de US$ 92 por hectárea y en el período abril a junio pasó a ser US$ 101. El precio de las rentas cayó un 6% respecto al del año pasado, pero las inversiones aumentaron entre 2% y 17% en casi todos los sectores excepto en el lechero ganadero y el agrícola ganadero donde se registró un 8% menos de operaciones que en 2019.

Mercado forestal

Los datos muestran que en el primer semestre de este año se hicieron 36 contratos por arrendamiento para forestación, para Da Silva, “esto marca que el avance de la forestación existe en la mitología. El informe no muestra lo que se dice por ahí”, afirmó. 

El sector con más contratos arrendatarios firmados es la ganadería, para lo que se concretaron 503 acuerdos, el sector que le sigue es la agricultura secano con 187 acuerdos.

Por otra parte, Da Silva lamentó los datos del sector lechero, que muestran una disminución en los contratos. "El informe muestra el estado del sector de los tambos. La falta de interés en ese sector se da por la falta de rentabilidad en el sector lácteo. A diferencia de otros sectores agropecuarios, este se retrae, hay menos contratos y a menos precios,” explicó.

Sobre las perspectivas que tiene el sector tras conocerse estos datos, Da Silva dijo a El Observador: “Estos datos marcan un termómetro donde, a mi entender, el sector sigue confiando en sí mismo y por eso se expande. Hubo una variación, con un gobierno con una realidad más empática y el aumento de tipo de cambio. En el horizonte de la agricultura hay una esperanza de que este año nos acerquemos a los US$ 400 y esto tiene una respuesta significativa”.

Para Zambrano el aumento en los arrendamientos da una buena perspectiva en el sector agrícola y en la ganadería. “Para m estamos en un escenario donde la gente se está dando cuenta que no hay muchas alternativas para la inversión. Con los argentinos la verdad es que no se está dando una concreción de compra tan alta, pero si se van cerrando arrendamientos de manera más fácil.”

Rentabilidad en el campo

Si bien Zambrano y Da Silva no coinciden en las razones que explicarían el aumento en los arrendamientos, están de acuerdo en que el retorno y la rentabilidad del campo no son muy grandes. Para Zambrano, el movimiento en los arrendamientos no tendrá una incidencia directa en el retorno del sector. Según explicó, para el sistema agrícola los contratos suelen ser de uno o dos años, y para el ganadero de tres a cuatro.