El Gobierno quiere avanzar con el nombramiento del Procurador General de la Nación después del recambio legislativo y para eso el presidente Javier Milei habilitó una negociación en el Senado con el peronismo, pero también con el sector de la ex mandataria Cristina Fernández de Kirchner. Como gesto de buena voluntad, ofrecerá las vacantes en la Corte Suprema.
La Casa Rosada, además, tiene pensado incluir en la negociación a los gobernadores para poder garantizarse gobernabilidad en el Congreso en los segundos dos años del mandato de Milei. Por eso, pondrá en la mesa las vacantes en los diferentes juzgados federales, y también fiscalías, a lo largo y a lo ancho del país.
El Gobierno abre una negociación con el peronismo y Cristina Kirchner por cargos judiciales
"No va a haber un cambio drástico en la composición del Congreso ya que los diputados y senadores que eran del ex Juntos por el Cambio van a ser reemplazados por los de La Libertad Avanza. Entonces vamos a tener que negociar igual que ahora. Por eso si queremos conseguir los dos tercios para el Procurador vamos a tener que habilitar canales con el peronismo", analizó un funcionario nacional con diálogo fluido con los integrantes del triángulo de hierro compuesto por Javier Milei, Karina Milei y Santiago Caputo.
En el primer piso de la Casa Rosada, el fallo de la Corte Suprema contra Fernández de Kirchner encendió las alarmas, por lo que significó a nivel político. Por primera vez el máximo tribunal tomó una decisión de impacto en un año electoral y eso fue interpretado por el Gobierno como un cambio de época que derivó en la noción de que no tener terminales en la Justicia es un lujo que Javier Milei no puede darse.
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En el reportaje con el medio estadounidense, Javier Milei defendió su política de ajuste y reivindicó la motosierra como símbolo de su gestión.
La importancia del Procurador General para Javier Milei
"El Procurador General va a ser la figura central en la Justicia una vez que entre en vigencia en todo el país el código procesal, que es acusatorio. Es el cargo a ocupar", se sinceró ante El Observador un dirigente del riñón de Javier Milei. Cerca del jefe de Estado están convencidos de que otra prenda de negociación será limitar los poderes del Procurador, que hoy en día puede remover fiscales mediante resoluciones a diferencia del proceso que debe enfrentar un juez federal en el Consejo de la Magistratura para ser apartado de su cargo.
"Es posible que el Procurador General Adjunto lo tengamos que ceder o modificar las competencias que tiene la cabeza del Ministerio Público Fiscal", agregó la misma fuente. Esa será una de las prendas de negociación que pondrá el oficialismo, pero no será la única.
El Gobierno pone como prenda de negociación nombramientos en la Corte Suprema
En los cálculos que hacen en Balcarce 50 contemplan la intención de los gobernadores dialoguistas, pero también los kirchneristas, de contar con magistrados y fiscales afines a ellos. Son más de 170 cargos que la Casa Rosada pondrá sobre la mesa para seducirlos y conseguir los votos necesarios para el Procurador General. La estrategia en las conversaciones incluye también no ejercer poder de veto ante cualquier nombre propuesto.
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El Gobierno quiere avanzar con el nombramiento del Procurador General después de las elecciones.
"Somos un espacio joven que no tiene candidatos para juzgados y fiscalías porque aún no construimos ese tipo de relaciones. Lo vamos a hacer, pero en este momento no tenemos esa capacidad", le dijo a este medio una fuente al tanto de las negociaciones.
Javier Milei, sin decirlo abiertamente, leyó el fallo de la Corte Suprema contra Cristina Kirchner como un cambio de época en donde la Justicia evolucionó sus formas ante el hartazgo de la sociedad. Eso, para la Casa Rosada puede ser un arma de doble filo de la que debe buscar una forma de protección. Por eso, la avanzada que planea después de octubre para nombrar al Procurador General.
