Nestlé, el gigante suizo de la alimentación, anunció este jueves un drástico recorte de personal que afectará a 16.000 trabajadores a nivel global durante los próximos dos años, en el marco de un plan de reestructuración destinado a reducir costos y recuperar el crecimiento tras un período de estancamiento.
La decisión fue comunicada por el nuevo director general, Philipp Navratil, quien asumió el liderazgo del grupo en septiembre, en medio de una agitación interna marcada por cambios abruptos en la cúpula directiva.
“El mundo está cambiando y Nestlé debe adaptarse más rápidamente”, declaró Navratil. “Eso implicará tomar decisiones difíciles, pero necesarias”.
Los despidos representan casi un 6% de la plantilla global de la empresa y afectarán principalmente a puestos administrativos, con 12.000 de los recortes previstos en funciones no operativas repartidas en diversas regiones. Los 4.000 empleos restantes se eliminarán como parte de iniciativas previamente lanzadas para modernizar las operaciones logísticas y de producción.
Sede de Nestlé en Suiza
Ahorros multimillonarios y repunte bursátil
Según la empresa, el programa permitirá generar ahorros anuales de 1.000 millones de francos suizos (1.260 millones de dólares) hacia 2027, el doble de lo inicialmente previsto.
La reestructuración fue recibida con entusiasmo por los mercados: las acciones de Nestlé se dispararon un 8,1% en la bolsa de Zúrich tras el anuncio, alcanzando los 82,30 francos suizos (103,3 dólares) por acción.
La empresa también publicó sus resultados correspondientes a los primeros nueve meses de 2025, reportando una caída del 1,9% en las ventas totales, que alcanzaron los 65.900 millones de francos suizos (83.000 millones de dólares).
No obstante, el crecimiento orgánico, excluyendo efectos cambiarios y desinversiones, fue positivo, con un avance del 3,3%, impulsado por un aumento promedio de precios del 2,8%.
Crisis interna y desafíos externos
El anuncio de recortes llega apenas semanas después de un turbulento septiembre para la compañía. El anterior director general, el francés Laurent Freixe, fue destituido tras confirmarse una relación con una subordinada, y el presidente del directorio, el belga Paul Bulcke, también comunicó su salida.
Nestlé, conocida por marcas emblemáticas como Nescafé, Maggi y KitKat, enfrenta un escenario desafiante tras años de presión inflacionaria, escándalos reputacionales y un consumo más cauteloso en varios de sus mercados clave, incluida América Latina.
En busca de estabilidad y crecimiento
Navratil, exjefe de la división de Nespresso, ha sido designado para estabilizar al grupo y reencaminarlo hacia el crecimiento sostenible. “Los resultados están empezando a verse. Ahora debemos hacer más y actuar con mayor rapidez para acelerar el impulso de crecimiento”, señaló el ejecutivo en su primera gran presentación ante los mercados.
A pesar del golpe social que implica la eliminación de 16.000 puestos de trabajo, los analistas financieros interpretan la medida como una señal de que Nestlé busca recuperar su competitividad en un sector cada vez más dinámico y fragmentado.
FUENTE: El Observador