El fondo de inversión BlackRock, el mayor del mundo, redujo ligeramente su participación en Redeia —matriz de Red Eléctrica de España— en medio de la polémica por el reciente gran apagón que afectó a España, y cuyas causas aún se desconocen.
La firma estadounidense pasó de controlar el 5,020% del capital al 4,992%, una reducción que aunque leve fue suficiente para ceder el puesto de mayor accionista privado al empresario Amancio Ortega.
El fundador de Inditex mantiene desde 2021 una inversión estable en Redeia a través de su sociedad Pontegadea, con un 5% del capital.
El Estado español tiene el 20% de la empresa
Con este movimiento, Ortega se convierte en el principal inversor privado de la compañía, aunque el Estado español, a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), sigue siendo el mayor accionista con un 20%.
La operación de BlackRock coincide con la caída del valor de las acciones de Redeia, que pasaron de cotizar a 19,26 euros a 18,50 euros al cierre del pasado miércoles, tras el inédito apagón del pasado lunes, que dejó a oscuras a España.
Además, se produce mientras el Gobierno investiga las causas del apagón y pide información a las compañías eléctricas implicadas, sin descartar ninguna hipótesis, incluso la de que el gigantesco corte de suministro se produjera por una ataque cibernético, una idea que no abonan las empresas de energía.
Redeia, al gestionar una infraestructura crítica para el sistema eléctrico nacional, cuenta con limitaciones legales que impiden a cualquier accionista privado superar el 5% del capital social ni ejercer derechos políticos superiores al 3%.
Estas restricciones garantizan que el control estratégico de la empresa siga en manos públicas.