Al menos cinco cabezas de cerdos fueron encontradas este martes frente a mezquitas en París y localidades cercanas. Uno de los hallazgos más preocupantes incluía una cabeza de cerdo con la palabra "Macron" escrita, lo que desató una ola de indignación tanto en la comunidad musulmana como en la sociedad francesa en general.
¿Dónde ocurrieron los hallazgos?
Las cabezas de cerdo fueron descubiertas en varias ubicaciones, incluyendo los distritos 15, 18 y 20 de París, así como en las ciudades periféricas de Montreuil y Montrouge. Los primeros hallazgos ocurrieron a las 5:30 de la mañana, cuando los fieles se dirigían a las mezquitas para realizar la oración matutina.
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Este acto de vandalismo ha generado una gran preocupación, ya que el hallazgo de los animales sacrificados en las puertas de los lugares de culto representa una clara agresión a la libertad religiosa de la comunidad musulmana en Francia.
El ministro del Interior de Francia, Bruno Retailleau, expresó su indignación ante los hechos, calificándolos de "absolutamente inaceptables".
En declaraciones a los medios, el funcionario francés subrayó la importancia de la laicidad en la República Francesa y la necesidad de que cada ciudadano pueda practicar su religión en paz. "Quiero que nuestros compatriotas musulmanes puedan practicar su fe en paz", afirmó Retailleau.
Investigación policial en curso: la búsqueda de los responsables
La Policía Nacional abrió una investigación para identificar a los autores de este acto de profanación. Según fuentes policiales, las cámaras de videovigilancia han permitido obtener imágenes de un hombre de aspecto europeo, vestido de negro y con mochila, que es considerado el principal sospechoso.
La Policía también ha indicado que los hallazgos podrían seguir ocurriendo conforme se abran más mezquitas en las próximas horas, lo que ha elevado la alarma en las autoridades.
Este no es el primer incidente de este tipo en Francia. En marzo de 2024, víspera del Ramadán, una cabeza de cerdo fue colocada frente a una mezquita turca en Calais. Asimismo, en 2019, las paredes de la futura mezquita de Bergerac fueron manchadas con sangre animal y se dejó otra cabeza de cerdo en la puerta principal.
Estos actos de intolerancia religiosa han aumentado las tensiones entre diferentes comunidades y han puesto en evidencia la creciente polarización social en algunas partes de Francia.
FUENTE: EFE
