Un bloque de hielo de más de 20.000 años, procedente de un glaciar de Groenlandia, fue el protagonista inesperado del acto inaugural de la Conferencia Raising Hope en Castel Gandolfo.
El Papa León XIV, con un gesto cargado de simbolismo, tocó y bendijo ese fragmento de hielo, que había viajado más de 5.000 kilómetros hasta Roma, trayendo consigo una poderosa lección sobre la fragilidad de nuestro planeta.
A su lado, Arnold Shwarzenegger y representantes de comunidades de distintos continentes, provenientes de regiones golpeadas por el cambio climático, vertieron aguas traídas de sus tierras en un mismo cuenco ante lo que el Papa llamó el “grito de la tierra y de los pobres”, un llamado urgente a la acción por la crisis ambiental.
Este acto marcó el inicio de un congreso internacional que conmemora el décimo aniversario de la encíclica Laudato Si’ y reunió a líderes religiosos, políticos, científicos y activistas, todos con un mismo objetivo: reflexionar sobre cómo proteger nuestra casa común.
Un mensaje guardado en un bloque de hielo
El bloque de hielo representaba la realidad del deshielo de los casquetes polares, uno de los efectos más alarmantes del cambio climático. No se trataba solo de un pedazo de hielo, sino de un símbolo viviente de la velocidad con que estamos perdiendo nuestro planeta.
En su discurso, el Papa León XIV reflexionó sobre el legado de la Laudato Si’, la encíclica de su predecesor Papa Francisco, que en 2015 ya levantaba la voz sobre la necesidad de cuidar el medio ambiente. El Papa destacó cómo ese mensaje había inspirado cambios a nivel global, desde las aulas hasta las cumbres internacionales. A su vez, llamó a la sociedad a presionar a los gobiernos para adoptar políticas más estrictas que protejan al planeta.
Una "bendición viral"
La bendición del hielo fue uno de los momentos más comentados de la jornada. Con voz solemne, el Papa León XIV dijo: "Señor de la Vida, bendice esta agua, que despierte nuestros corazones, limpie nuestra indiferencia, alivie nuestro dolor y renueve nuestra esperanza, por Cristo nuestro Señor. Amén".
El acto, que para muchos fue una representación profunda del cuidado que debemos tener con la naturaleza, revolucionó las redes sociales entre los que aplaudieron la creatividad del gesto, y los que se cuestionaron si ese acto simbólico era apropiado ante a la magnitud de la crisis ambiental.
Schwarzenegger entre los asistentes
Entre los asistentes al evento, el actor y exgobernador de California Arnold Schwarzenegger se robó las miradas. El ex Terminator es conocido como gran defensor de las políticas medioambientales y trabajador incansable por la protección del planeta. Su participación junto a León XIV se suma a la de los apoyos de líderes políticos, científicos y figuras públicas que buscan generar un impacto global en la lucha contra el cambio climático.
Más allá de las controversias, y las redes, el Papa León XIV mostró que está dispuesto a seguir posicionando a la Iglesia como un fuerte actor por la defensa del medio ambiente. Para el que el sumo pontífice reclamó una “verdadera conversión ecológica” de todos los ciudadanos del mundo.