Rosa Peral, condenada a 25 años de prisión por el mediático crimen de la Guardia Urbana, ha sido acusada de organizar y ordenar la agresión a una de las funcionarias de la cárcel Mas d'Enric de Tarragona donde cumple condena.
Funcionarias e internas del módulo donde se encuentra Rosa Peral la acusan de los hechos que tuvieron lugar el pasado 21 de julio, según publica el diario Segre.
Según el mismo medio, la condenada por el crimen de la Guardia Urbana instigó y planificó el ataque, que resultó en una brutal agresión en la que otra reclusa intentó asfixiar a la funcionaria a la que arrancó varios mechones de pelo.
El objetivo de Rosa Peral con esta agresión era vengarse de las funcionarias porque no le permitieron realizar una actividad al estar sancionada. Peral pagó a la autora de la agresión antes de que tuviera lugar el suceso.
Manipuladora y con mala conducta
El diario Segre recoge varios testimonios de varias funcionarias, tras haber consultado fuentes penitenciarias, que explican que "tiene mala conducta" y "manipular a otras internas para sus intereses".
Según explica el mismo diario, los incidentes protagonizados por Rosa Peral están causando malestar entre los funcionarios, que lamentan que no se estén aplicando otras medidas disciplinarias para evitarlos.
25 años de cárcel por el crimen de la Guardia Urbana
Rosa Peral cumple condena (25 años de prisión) en esta cárcel por el asesinato del agente de la Guardia Urbana, Pedro Rodríguez, junto a su amante Albert López. Este fue uno de los crímenes más mediáticos de los últimos años en nuestro país.
Además, Rosa Peral y su padre se enfrentan a una posible condena de cuatro años de cárcel por levantamiento de bienes para evitar pagar la indemnización a la familia del asesinado.
Tras este incidente en la cárcel de Mas d'Enric, las funcionarias de prisión piden que se le impute penalmente como inductora de los hechos