El Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) aprobó por consenso una resolución que exige a las autoridades de Venezuela la publicación "de manera expedita" de las actas de las elecciones del pasado 28 de julio en ese país. El gobierno de Joe Biden logró sumar a Brasil y Colombia al pedido, exponiendo el fraude cometido por Nicolás Maduro.
El texto, no vinculante, fue presentado en nombre de Estados Unidos y de Antigua y Barbuda, Argentina, Canadá, Chile, Ecuador, Guatemala, Paraguay, República Dominicana, Suriname y Uruguay en calidad de copatrocinadores. El uruguayo Luis Almagro preside la OEA.
La resolución insta al Consejo Nacional Electoral (CNE) a que "publique de manera expedita las actas con los resultados de la votación de las elecciones presidenciales a nivel de cada mesa electoral" y "respete el principio fundamental de la soberanía popular a través de una verificación imparcial de los resultados que garantice la transparencia, credibilidad y legitimidad del proceso electoral".
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La resolución de la OEA le exige a Maduro "transparencia, credibilidad y legitimidad del proceso electoral".
Su llamamiento se une al que también efectuaron este viernes la Unión Europea, entre ellos España, y 22 países más, en favor de la "inmediata publicación de todas las actas originales" de las elecciones y la verificación "imparcial" e "independiente" de los resultados de esos comicios, en los que según el CNE el presidente Nicolás Maduro se impuso al opositor Edmundo González Urrutia.
Cómo votaron los países de la OEA en contra Maduro
El texto fue adoptado por consenso de las 26 delegaciones de países miembros que acudieron a la reunión extraordinaria celebrada en la sede de la OEA en Washington. Estados Unidos consiguió, tras delicadas negociaciones, que Brasil y Colombia se sumaran a la condena diplomática contra el fraude cometido por el chavismo.
El embajador de EEUU en la OEA, Frank Mora, lideró las charlas para encontrar un punto de acuerdo que permitiera apuntar contra el régimen de Maduro. Tras horas de negociaciones, Brasil aceptó sumarse al proyecto a cambio de introducir algunos cambios en el texto. En una entrevista con El Observador USA previa a la elección presidencial, Mora había anticipado que Maduro estaba preparando el terreno para un fraude.
"Mostremos al pueblo de Venezuela que no está solo", dijo al inicio de la sesión el embajador Mora. Con matices, internas y un ojo puesto en su política doméstica, tanto Lula da Silva como Gustavo Petro empezaron a tomar distancia de Maduro. Ambos presidentes plantean la necesidad de repetir las elecciones, pero tanto EEUU como la oposición de Edmundo González y María Corina Machado rechaza esa posibilidad.
El gobierno de Bolivia, en cambio, decidió no participar en la sesión convocada por la Organización de Estados Americanos (OEA) sobre la situación en Venezuela tras las elecciones de julio pasado, al considerar que el organismo no tiene "competencia" para pronunciarse sobre un país que ya no es parte del organismo.
La resolución de este viernes resalta la importancia de "proteger y preservar todos los equipos utilizados en el proceso electoral, incluyendo todas las actas y resultados impresos, a fin de salvaguardar toda la cadena de custodia" de dicho proceso.
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Asimismo, solicita proteger las instalaciones diplomáticas y al personal residente en territorio venezolano, incluidas las personas que soliciten asilo en tales instalaciones.
Llama también a las partes interesadas a "abstenerse de cualquier conducta que pueda comprometer la construcción de una salida pacífica de esta crisis, respetando la voluntad soberana del electorado venezolano".
El Consejo Permanente apostó porque sea "una prioridad absoluta y una obligación para Venezuela" respetar los derechos humanos y las libertades fundamentales, (...) especialmente el derecho a reunirse pacíficamente y al ejercicio pleno de los derechos civiles y políticos sin represalias, el derecho a no ser sometido a detenciones ni encarcelamientos arbitrarios y el derecho a juicio imparcial".
El pasado 31 de julio había fracasado en ese organismo panamericano, con sede en Washington, otra resolución que exigía la difusión de inmediato de las actas electorales. Maduro queda vez más aislado del mundo en su aventura de aferrarse al poder a cómo sea.
