Almagro, su agradecimiento al "Uruguay batllista", y su grito: "¡Viva Brum! ¡Viva Batlle!"

Almagro comentó que toda su actividad pública "tiene mucho que ver" con ese "Uruguay batllista" y recordó que pasó por la escuela, el liceo y la universidad pública, y que también fue funcionario público. "Soy esencialmente, aunque originariamente blanco, hijo de eso y eso es algo que tenemos que tener siempre muy presente". 

Almagro militó durante años en el Partido Nacional y en 1999 se sumó al Movimiento de Participación Popular (MPP), del Frente Amplio (FA). Fue embajador en China durante el primer gobierno de Tabaré Vázquez y ministro de Relaciones Exteriores en la administración de José Mujica. En diciembre de 2018, el Plenario del Frente Amplio decidió por una unanimidad expulsarlo del partido por su postura sobre Venezuela luego de afirmar que no podía “descartar” una intervención militar en el país caribeño. 

En marzo fue reelecto como secretario de la OEA hasta 2025, cargo que ocupa desde 2015.  

"¿Aspira algún día a ser presidente"?, le preguntó una de las participantes al excanciller. Y Almagro contestó que la "prioridad" para ocupar el mayor cargo del país la tienen las personas que están "completamente integrados" al sistema político uruguayo. Aunque aclaró: "Nunca digo nunca voy a hacer esto porque después es exactamente lo que me pasa". 

En la charla uno de los dirigentes de la agrupación colorada Por el porvenir le dijo que las puertas del partido "están más que abiertas". 

Los elogios a Talvi 

El secretario general de la OEA reconoció al canciller uruguayo, Ernesto Talvi, por rechazar la nueva conformación del Consejo Nacional Electoral de Venezuela. Luego de reunirse con el presidente Luis Lacalle Pou, el ministro divulgó este martes un comunicado conjunto del Grupo de Contacto Internacional (GIC), uno de los mecanismos creados para intentar solucionar la crisis política del país caribeño, que es condenatorio de la forma en que se eligió el órgano. 

"Lo veo como una persona comprometida con la democracia en Venezuela, sabemos lo que piensa. Lo ha dicho en muchísimas ocasiones y está haciendo un extraordinario trabajo", dijo Almagro y destacó que la iniciativa del último rechazo haya surgido de Talvi. 

Sin embargo, Almagro prefirió no opinar sobre la postura del canciller de no utilizar la palabra dictadura para referirse a Venezuela. "Nunca juzgo los dichos de ningún canciller de ningún país. Ese no es mi trabajo, no es el trabajo institucional de la organización y la organización tiene que ser respetuosa de todos los posicionamientos de todos los países", explicó el exministro. 

Más allá que considera y afirma que en Venezuela no hay una democracia, el canciller asegura que desde ese rol no puede denominarla como dictadura, según manifestó en una entrevista con El Observador. "Este canciller no va a decir en este rol esa palabra (dictadura) y lo que yo piense personalmente respecto al régimen que gobierna Venezuela dejó de ser relevante en el momento en que asumí este cargo". 

Las declaraciones de Talvi generaron un cruce con el presidente Luis Lacalle Pou y críticas de socios de la coalición. Días después, Talvi comunicó su salida de la cancillería para asumir un rol más político dentro del oficialismo. El ministro dejará el cargo antes de fin de año.

El anterior canciller, Rodolfo Nin Novoa, celebró este posicionamiento del líder de Ciudadanos. "Es una posición igual a la nuestra. Se puede imaginar que no me parece mal", dijo Nin Novoa a radio Monte Carlo. 

Durante la charla del martes, Almagro consideró que Talvi tiene "definiciones claras" y "categóricas" sobre Venezuela que "no hubo" en los cinco años anteriores. "No veo una continuidad, no veo un hilo conductor", consideró el secretario general y puso como ejemplo el rechazo al Consejo Nacional Electoral, "algo impensado en la actuación anterior".

Almagro definió a Venezuela como "un régimen violador sistemático de los derechos humanos, que comete crímenes de lesa humanidad, que induce una crisis humanitaria". "Uno no puede tener neutralidad. Y sabemos que Talvi no es neutral frente a ese régimen", dijo. "Eso significa un rompimiento con cinco años de política anterior", concluyó. 

Su postura como canciller 

La última vez que Almagro viajó a Venezuela fue en 2014 para participar de una reunión de la Unasur. En ese momento era canciller del gobierno de Mujica y, según dijo, en esa ocasión condenó "las violaciones de derechos humanos del régimen". En una misión de Unasur, Almagro pidió el cese de la violencia contra la oposición y se reunió con la dirigente Corina Machado. Almagro fue un año más ministro de Relaciones Exteriores de Uruguay y en ese período estuvo "sin poder entrar" al país caribeño, según afirmó. 

Almagro afirmó en la videoconferencia que el "régimen bolivariano" le pidió al entonces presidente que lo "echara" de su cargo y destacó que Mujica, más allá de las diferencias que tenían, no lo hizo. "Siendo canciller de Mujica, fui en marzo y abril del 2014 a la misión de Unasur a Venezuela. Ahí ya mismo, en persona, mi actuación fue de condena a las violaciones de derechos humanos del régimen. Fui siendo canciller de Mujica y Mujica, más allá de lo que discrepaba o no conmigo, no tomó ninguna acción porque el mismo régimen bolivariano le pidió que me echara. Y no lo hizo", afirmó. 

"Voy a seguir pensando lo mismo. Cuando uno ve estas situaciones uno tiene que asumir ese compromiso con la democracia, con los derechos humanos, mantener las cuestiones de principios es fundamental", expresó. 

La postura que tomó sobre Venezuela tuvo repercusiones tanto en el MPP como en el FA. "Me costó a la larga y en la corta también porque eso tuvo un impacto en la interna del MPP, donde tuve reuniones muy duras al respecto. Y me costó a la larga con la expulsión del partido", finalizó.