Antes de ver La Mula, cuatro versiones de Clint Eastwood para repasar su carrera

El sustituto

La trilogía del dólar

Tenía más de 30 años, unos pocos papeles secundarios en el CV y los ánimos bastante deprimidos, cuando Clint Eastwood encontró su oportunidad. Fue gracias a que un conocido se bajó de una película llamada Por un puñado de dólares que el actor norteamericano conoció al (por entonces) ignoto director italiano Sergio Leone. Juntos, forjaron a partir de esa primera película una de las trilogías más importantes del wéstern –del spaghetti western–. En Por un puñado de dólares, Eastwood interpretó al Hombre sin nombre, un personaje que lo catapultó a la fama y lo convirtió en un ícono del cine. Tras esa película, el actor y Leone continuaron la historia del personaje en La muerte tenía un precio y El bueno, el malo y el feo. Esta última producción dejó a la posteridad la que, tal vez, sea una de las tonadas más famosas de la historia del cine. Además, la figura del Hombre sin nombre –callado, recio, siempre en busca de recompensas– fue elegido como el 33° personaje de cine más importante de la historia. Toda la trilogía está en Qubit.
 

Sully: hazaña en el Hudson

Clint Eastwood sabe –porque lo ha probado en varias ocasiones– que las grandes historias muchas veces se ocultan en la vida real. También, que los héroes cotidianos y verdaderos resultan, en general, más interesantes que los ficticios. Sully es su recordatorio más reciente de que esto, efectivamente, es así. En esta película estrenada en 2016, Eastwood cuenta la historia del piloto homónimo que salvó a su tripulación y los pasajeros de un avión comercial que falló en su despegue y que logró aterrizar forzosamente en el río Hudson de Nueva York. La película, además, sigue el proceso judicial que vino después. Disponible en HBO GO.

Cartas desde Iwo Jima

En 2006, Eastwood se propuso armar un díptico que contara, desde ambos bandos, la batalla de Iwo Jima, una de las contiendas definitorias en la batalla por el Pacífico durante la segunda guerra mundial. Mientras que en La conquista del honor enfoca la atención en los estadounidenses que invadieron la isla, en Cartas desde Iwo Jima muestra las peripecias del ejército japonés que la defendió. Hablada casi íntegramente en el idioma nipón, Eastwood expone los horrores de la guerra desde el lado japonés, en una de las mejores películas bélicas jamás hechas. Su paleta de colores grisácea, su épica melancólica y su emocionante desarrollo la hacen una de sus mejores películas por lejos. Está en Claro Video para alquiler.