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Castillo y los Consejos de Salarios: "Si depende de mi voto, voy a jugar a favor de los trabajadores"

El director de Trabajo admitió que si le toca romper un empate, no tendrá "ninguna duda"
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06 de noviembre de 2015 a las 05:00
El actual titular de la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra), Juan Castillo, fue claro al afirmar que, de tener que desempatar en una negociación entre empresarios y trabajadores, se va a inclinar por los últimos. "Todavía no me ha ocurrido, (pero) no creo tener ninguna duda: si depende de mi voto para desempatar voy a jugar a favor de los trabajadores", dijo en entrevista con el programa Quién es Quién, que se emite por Diamante FM y Televisión Nacional del Uruguay (TNU).

Castillo -referente del movimiento sindical uruguayo, que asumió la vicepresidencia del Frente Amplio en 2012- añadió que no tiene por qué disimular su favoritismo por los trabajadores de presentarse un escenario de desempate. Además, dijo, nadie se lo pidió. "Ni el propio (ministro de Trabajo y Seguridad Social) Ernesto Murro o el propio (presidente de la República) Tabaré Vázquez me condicionaron que viniera a ocupar un cargo de responsabilidad y que me golpeara la cabeza y sufriera amnesia, 'olvidate de lo que fuiste'", comentó.

El director de Trabajo –quien previamente en la entrevista había admitido que tenía que "aprender" que ahora posee un rol "distinto"– dijo, en respuesta a la pregunta de si desempatar siempre a favor de los trabajadores no viola la imparcialidad que debería tener dado su puesto, "mudate para Argentina, porque en Uruguay no hay independiente, acá todos juegan su partido".

El jerarca recordó nombres de otras personas que habían ocupado cargos en el Ministerio de Trabajo (MTSS) en años anteriores. "¿Acaso era más independiente que yo la ministra Analía Piñeyrúa? (...)¿Para dónde fue después? ¿De dónde venía antes?", se preguntó.

La misma interrogante se hizo respecto al extitular de esa cartera, Santiago Pérez del Castillo.
Piñeyrúa fue ministra de Trabajo durante el segundo gobierno de Julio María Sanguinetti, mientras que Pérez del Castillo ocupó esa secretaría de gobierno en la administración de Jorge Batlle.

Castillo indicó que "todos vienen de algún lugar" y cargan con una "mochila" a la hora de acceder a un puesto de gobierno. "Algunos tienen sentido vergonzante y la esconden; un problema de ellos, que se embromen: yo no", enfatizó. El actual número uno de la Dinatra señaló que durante tres décadas defendió "gustosamente" los derechos de los trabajadores.

"Yo no digo que soy un exdirigente sindical: yo me moriré siendo un militante sindical", sostuvo. "Transitoriamente ocupo un cargo de responsabilidad en el gobierno y trato de ser lo más ecuánime posible, trato de ser lo más justo posible, trato de buscar consensos", agregó.
Consultado acerca de cómo ha vivido estos meses "del otro lado del mostrador", Castillo comentó que "el estrés es bastante importante", pero que siempre se va "tranquilo" a su casa.

No preocupa

Estas declaraciones de Castillo se dan, además, en medio de una nueva ronda de negociación colectiva en la que, de hecho, algunos sectores llegaron a advertir que era el Poder Ejecutivo quien estaba obstaculizando preacuerdos alcanzados entre los trabajadores y las patronales.

Si bien son pocos los sectores que han logrado un acuerdo en esta ronda que se abrió en julio, el gobierno entiende que no se está frente a un retraso preocupante. Al igual que lo manifestó en su momento el ministro Murro, ayer en rueda de prensa, el subsecretario de Economía y Finanzas, Pablo Ferreri, dijo que se está "dentro de los plazos promedio históricos".

A la salida de una exposición en el Parlamento, el jerarca aseguró que la preocupación del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) es que las partes de la negociación respeten los lineamientos establecidos por el Poder Ejecutivo. Según Ferreri, las autoridades velarán para que "los acuerdos que excedan las pautas fijadas no tengan un costo para la población en general".

Ferreri puso como ejemplo la negociación de la bebida, que alcanzó el martes un acuerdo tripartito. En ese caso, trabajadores y empresarios habían convenido un aumento salarial por encima de los lineamientos establecidos por el Poder Ejecutivo. Fue el MEF quien trancó el acuerdo hasta no obtener el compromiso de las empresas de que no trasladarán a precios los incrementos de costos superiores a lo establecido en la pauta oficial, para que "no sea la población la que tenga que pagar" esos ajustes, según Ferreri.

En el caso de la construcción –que iniciará su negociación en 2016–, el Ejecutivo envió una clara señal en el mismo sentido que la bebida. El subsecretario del MEF hizo referencia a un decreto aprobado a principios de la semana a partir del cual las empresas adjudicatarias de obra pública se verán impedidas de trasladar al Estado los aumentos salariales que excedan los lineamientos establecidos para la negociación.

Proyecto de ley de fondo de insolvencia

En relación al proyecto de ley para crear un fondo de garantía en caso de insolvencia con un nuevo aporte patronal, Castillo dijo que está afín a que se llene ese "vacío legal". Aún así, indicó que no conoce el texto en detalle. Por su parte, el subsecretario de Economía, Pablo Ferreri dijo que desconoce el texto que está a estudio en la Comisión de Legislación del Trabajo de la Cámara de Diputados, recordó que "el presidente de la República ha sido claro sobre el compromiso electoral de no agregar nuevos impuestos".

A la espera del fondo venezolano para exportar


El embajador de Venezuela en Uruguay, Julio Chirino, afirmó ayer que no falta ningún detalle para comenzar a embarcar alimentos uruguayos hacia Venezuela, bajo el acuerdo que suscribieron los países en julio. Además, el diplomático sostuvo en entrevista con La Mañana de TNU que el gobierno de Nicolás Maduro ya giró la plata con la que se conformará un fideicomiso en el banco Bandes Uruguay, del cual se pagará a los exportadores uruguayos.

Pese a que los empresarios han mostrado su frustración ante esta situación –algunos ya enviaron productos, pero no obtuvieron pago alguno por ellos– el embajador manifestó que "las operaciones para concretar el acuerdo suscrito entre Uruguay y Venezuela han insumido un tiempo récord". De hecho, ayer Búsqueda informó que el presidente Vázquez llamó la semana pasada a Maduro, quien se comprometió a depositar US$ 50 millones.

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